La muerte de un niño de 3 años conmociona al departamento de Santander este fin de semana. La tragedia ocurrió en la tarde del sábado, 4 de noviembre, en una casa campestre de la vereda Acapulco, ubicada en el municipio de Girón.
Según se conoció, el caso se presentó hacia las 3:30 de la tarde y la investigación está en manos de las autoridades judiciales. El reporte conocido por la Policía Metropolitana de Bucaramanga indica que el menor estaba con una empleada de servicio cuando cayó de forma accidental a una piscina.
Al parecer, la abuela era la encargada de cuidar al niño. Sin embargo, la mujer se encontraba por fuera de la casa realizando otras diligencias cuando recibió una llamada telefónica en la que le informaron que el pequeño sufrió este accidente.
El menor fue rescatado inconsciente de la piscina y el caso fue reportado a los uniformados de la Policía de Ruitoque, que rápidamente se trasladaron al lugar. Aunque el niño fue llevado al Hospital Internacional de Colombia, HIC, no lograron salvarle la vida.
Luego de las maniobras de reanimación efectuadas por el personal médico, sobre las 4:30 de la tarde se confirmó que el pequeño de 3 años había “fallecido por posible inmersión”. Ahora, las autoridades investigan las circunstancias en las que el pequeño, quien tenía un diagnóstico de autismo, cayó a la piscina.
En septiembre, dos casos similares ocurrieron en el departamento de Santander. El pasado 4 de septiembre en la vereda Santo Domingo, en Lebrija, un pequeño de 4 años se encontraba jugando. En un presunto descuido, el niño se acercó a una piscina de una finca, ubicada en el sector conocido como El Cebadero. Sin embargo, en hechos que son materia de investigación, terminó sumergido.
De acuerdo con el reporte, el pequeño se encontraba al cuidado de su madre cuando ocurrió la tragedia. Una vez la mujer se percató de lo que sucedía, lo trasladó a la fundación Niños De Papel para recibir los primeros auxilios. Desafortunadamente, antes de llegar al centro asistencial, el pequeño ya no tenía signos vitales.
“Nos ingresó una llamada a la línea del cuadrante informando el caso, que un niño de 4 años de edad se había ahogado en una piscina de una finca y lo trasladaron a una sede de la Fundación Niños de Papel para que le prestaran los primeros auxilios, ya que en esa fundación hay personal de salud, pero ya no tenía signos vitales”, dice el reporte de la Policía de Lebrija.
El otro caso ocurrió el pasado 7 de septiembre en el municipio de Piedecuesta, área metropolitana de Bucaramanga, donde un niño de 2 años cayó a una piscina y murió ahogado en un hotel localizado en la vereda Barro Blanco.
“A esa hora, de acuerdo con el reporte conocido por la Policía, la madre del menor se encontraba laborando como administradora del hotel y su hijo estaba con ella”, informó el medio regional Vanguardia.
La Organización Panamericana de la Salud (OPS), advierte el ahogamiento es una de las principales causas de muerte en el mundo para niños y jóvenes de 1 a 24 años. “Más del 90% de las muertes por ahogamiento ocurren en países de bajos y medianos ingresos, y los niños y las niñas menores de cinco años corren el mayor riesgo”, señala la OPS.
En cuanto a la prevención, la Organización Panamericana de la Salud destaca que se debe trabajar en varios aspectos:
- Instalación de barreras que controlan el acceso al agua.
- Proporcionar lugares seguros lejos del agua, como guarderías para niños en edad preescolar con cuidado infantil capacitado.
- Enseñar natación, seguridad en el agua y habilidades de rescate seguras.
- Capacitar a los transeúntes en rescate y reanimación segura.
- Establecer y hacer cumplir normas seguras de navegación, transporte marítimo y transbordadores.
- Mejorar la gestión del riesgo de inundación.