Fernando González Rubio, el primer colombiano en escalar el Everest, asegura que es poco probable que los alpinistas que se hallaban en los picos de las montañas y hayan sido cubiertos por la avalancha que generó el terremoto en Nepal, sobrevivan. Entrevista.

Fernando González Rubio es uno de los montañistas más famosos del país. De hecho es el primer colombiano que escaló el Everest y ha logrado llegar a siete de las 14 cimas más altas del mundo sin utilizar tanques de oxígeno o cualquier otra ayuda.

“En las otras siete no llegué a la cima para  estar hablando contigo, disfrutar mi familia, seguir con vida. Un montañista no se gana el respeto por las cimas que logra sino por las decisiones que toma en la montaña. El mejor escalador del mundo es aquel que se mantiene vivo”, dice.

La noticia del terremoto en Nepal apenas la conoció el domingo pasado, luego de regresar de una labor de rescate de las avionetas accidentadas en Santander hace unas semanas.

Las imágenes que vio por televisión lo golpearon. Nepal, dice, es un pueblo hermano, sus amigos durante las 14 expediciones que ha realizado.  

Él conoce al país asiático tanto como para afirmar que la pobreza que padece es una de las razones para entender por qué el terremoto arrasó prácticamente con todo, por qué murieron más de  4000 personas.  

Por eso, este lunes en la mañana, Fernando estaba reunido con los miembros de su Fundación con la que promueve la práctica del montañismo y la preservación del medio ambiente,  para evaluar de qué manera podría ayudar a la gente que alguna vez le trazó el camino a la cima. Antes de la reunión, conversó con El País.

Fernando, usted conoce a Nepal muy bien. ¿Por qué lo afectó tanto el terremoto, más allá, claro, de la razón obvia, la fuerza del mismo?

Lo que sucede es que Katmandú (la capital) es una ciudad hecha con ladrillitos. Los templos son muy bonitos, muy antiguos, pero no hubo una planificación para su construcción.

Hay unos sitios donde vive la gente de más dinero, casas un poco más grandes, más seguras, más organizadas, pero la mayoría de la población vive en edificaciones que seguramente no cumplen las normas de sismoresistencia. De eso te das cuenta a simple vista. 

Por eso las consecuencias del terremoto fueron tenaces. Katmandú es algo así como un laberinto de edificios pegados unos con otros, una ciudad mal planeada, además de ser una ciudad pobre. La pobreza hace que la gente construya lo que sea.

Ahora, la zona rural de Nepal también es muy particular.  Hay pueblos a los que solo se llega caminando o en helicóptero.

Hay gente que está a seis horas de una carretera y quién sabe si tras el terremoto pueden llegar a un hospital porque los caminos están bloqueados por derrumbes causados por el temblor.

De hecho cuando nosotros vamos con la expedición de montañistas, la gente pregunta si llevamos un médico o un botiquín y enseguida nos sacan niños con brotes, niños que están sin la posibilidad de recibir atención médica. Todas esas condiciones hicieron que el terremoto golpeara a Nepal de la manera en que lo hizo.

Hablando propiamente del campo base del Everest, donde están atrapados cientos de montañistas, ¿cuál cree  usted que sea la situación?

El campo base del Everest es también un sitio retirado al que solo se llega a pie o en helicóptero. Allí están algunos de los escaladores, pero también hay muchos más en los picos que estaban intentando escalar. Es decir: los que estaban en el campo base tuvieron la suerte de estar al final de la onda expansiva de la avalancha.

En cambio los que estaban más adentro de las montañas, los picos,  sufrieron mayores consecuencias. En esos picos de las montañas de Nepal hay mucha gente atrapada.

Lea también: Videos en YouTube muestran el poder del terremoto que sacudió a Nepal.

El problema es que si sobreviven, tendrán que salir a pie, pero lo harán a una zona rural que también está hecha un desastre y en la que es muy difícil que consigan ayuda. Y para llegar a la zona rural son por lo menos cinco, seis,  diez días caminando.

La situación es bien complicada, teniendo en cuenta otro tema: estamos a 28 de abril, que es cuando normalmente las expediciones están terminando de montar el campamento dos, que es un trabajo avanzado para después esperar el 18 de mayo y enfrentar las cumbres. A partir de esa fecha es cuando se da la ventana de buen clima. 

Es decir que de aquí hasta el 18 de mayo a los montañistas atrapados les esperan varias nevadas y muchos cambios de temperatura.

¿Pero tienen realmente oportunidades de sobrevivir quienes se encuentran en los picos de las montañas de Nepal?

A los que estaban más adentro de la montaña les pudo haber caído encima masa glaciar (una gruesa masa de hielos) que lo puede matar a uno en minutos.

La masa glaciar, cuando te tapa completamente, si tú no tienes la cabeza por fuera, te mueres en 40 minutos. Tú tienes máximo ese tiempo para sobrevivir cubierto. Pero si quedaste tapado y con la boca llena de nieve, te mueres en cinco minutos. 

Cuando uno va a recibir una onda expansiva como esa lo que se hace es abrazarse en circulo entre los compañeros para generar un espacio interno en el que, si nos llega a tapar la nieve, tenemos tiempo de respirar, para movernos o para que nos rescaten.

Porque esa nieve que cae de las avalanchas es algo así como el concreto. Es un agua nieve que una vez que te atrapa, se endurece y  no te puedes mover. Tienen que ayudarte a salir.

En el año 98, cuando murió  mi amigo Lenin  Granados, todos quedamos atrapados, con nieve hasta la cintura,  y no podíamos sacar las piernas por más que luchábamos. Hasta que llegaron los compañeros y con una pala sacaron la nieve. Pero si hubiéramos quedado tapados hasta la cabeza tal vez ni nos encuentran.

Es duro decirlo, pero yo creería que los que quedaron cubiertos completamente por la avalancha no tienen posibilidades de sobrevivir. Incluso puede que no los encuentren jamás.

O tal vez el cuerpo podrá aparecer muchos años después. Las masas glaciares son como un río congelado. Siguen moviéndose lentamente y en algún momento puede expulsar el cuerpo hacia arriba. No es el cuerpo completo. La masa glaciar se congela y también se fractura, por lo que podría salir el tronco o una pierna.

¿Y qué sucede con los que están atrapados en el campo base?

Propiamente hablando del campamento base, tengo que decir que el Everest es una montaña muy comercial. Eso quiere decir que no solamente van deportistas que escalan sin oxígeno, sino que también van muchas personas que desean escalarla con oxígeno y pagan mucho dinero por ello.  

Entonces en el Everest pueden haber 300 personas fácilmente, incluso muchas más. Cada expedición la componen entre seis y doce personas. Y cada expedición tiene una carpa comedor, una carpa cocina, además de la carpa de cada expedicionario.

Esa es más o menos la estructura.  Los que están allí, repito, tuvieron la suerte de estar al final de la onda expansiva.

Ahora viene lo otro: ¿cómo salimos del campo base? Tienen que caminar por el Valle del Khumbu, pero ese valle también está afectado por derrumbes. Deben llegar a un poblado que se llama Lukla, donde está el aeropuerto, uno de los más peligrosos del mundo.

Si no, deben caminar por lo menos diez días para tomar un bus que los lleve a Katmandú, pero allá también está todo destruido. Lo que te quiero decir con todo esto es que los montañistas están atrapados y hay que tener en cuenta que el resto del país también lo está. Eso es lo más grave de la situación. 

¿En el campamento base tienen comida para esperar el rescate?

Sí. Generalmente en el campamento base hay comida para dos meses. Arroz y lentejas, sobre todo. Pero salir de ahí va a ser difícil.