La suspensión del suministro de gas en Cali y el Valle del Cauca, debido a un extraño fenómeno de gases e incandescencias que se presentó en una de las laderas de Cerro Bravo, en el departamento del Tolima, y que afectó el gasoducto, ha generado que en la ciudad se empiecen a escasear los electrodomésticos eléctricos.
Aunque por el momento no hay una fecha estimada en la que se regulará nuevamente el servicio y aún hay varios sectores del departamento que todavía tienen gas, muchos ciudadanos empiezan a buscar otras alternativas para no depender de ese combustible para realizar las labores en sus hogares.
Energías renovables
Esta es una gran alternativa al gas natural. De hecho, países como España y Portugal cerraron un acuerdo con la Comisión Europea, en el cual, ambas naciones tienen independencia de energética.
Pese a que las energías verdes han empezado a tomar protagonismo desde hace algunos años, el uso del gas natural, el gasóleo y los gases licuados continúan perteneciendo a un gran porcentaje del tipo de energías que se consume en los hogares. En países como España suponen el 40 % de la que se consume en los hogares, según el medio de comunicación Fotocasa.
“Las familias españolas recurrimos a varios tipos de energía para el hogar, la mayoría de las cuales son no renovables. Sin embargo, existen firmes alternativas al gas natural, al gasóleo y a los gases licuados del petróleo, butano y propano”, menciona el portal web.
La electricidad
Esta es la fuente de energía más común de los hogares, puede provenir de energías fósiles como la quema de carbón, petróleo o gas. Además de las hidráulicas, eólicas y solares, como es el caso de las renovables.
La biomasa y el biogás
Según Fotocasa, “la biomasa es, después de la electricidad y el gas natural, la tercera más usada: representa casi el 20% del consumo total de energía en los hogares españoles y se trata de una energía renovable. El biogás es un gas natural que se produce a partir de la biomasa”.
El medio explica que ese combustible es más económico y es usado para calentar los hogares en las diferentes partes del mundo que se requieren por las condiciones del clima.
Los combustibles sólidos
Los combustibles sólidos pueden ser naturales, y, por lo tanto, renovables, como lo son la leña, el carbón, y los residuos agrícolas. Estos, también pueden ser artificiales y no renovables, generalmente aglomerados. Sin embargo, representan casi el 1 % del consumo total de energía en naciones como España.
Otras fuentes de energía
Adicional a las alternativas mencionadas anteriormente, también es importante tener en cuenta otras fuentes de energía que son menos conocidas, pero que de todas formas son una opción y empiezan a tomar terreno en otros países.
Estas son la aerotermia, la hidrotermia, la geotermia, la energía eólica o la mineólica, entre otras. De hecho, los sistemas de calefacción con la primera energía reduce los costos en un 25 % a diferencia del gas natural.
Estas alternativas, aunque son poco conocidas en Colombia, son una opción ante situaciones como las que están viviendo el Valle del Cauca, Cauca, Eje Cafetero y el Tolima.
También, es importante tener en cuenta que, de acuerdo con el informe de Promigas del 2021, las reservas probadas de gas natural en Colombia a 2020 fueron de 2,9 Tera Pies Cúbicos (TPC). Según las cuentas del Ministerio de Minas y Energía, esto serviría para que haya autosuficiencia durante 7,7 años, la cifra más baja de la última década.
A pesar de esto, las reservas potenciales de gas natural serían mucho mayores, de 54 Tera Pies Cúbicos. De estos, 30 estarían costa afuera, cuya explotación se espera que inicie entre 2024 y 2028; mientras tanto, los otros 24 TPC estarían en Yacimientos No Convencionales (YNC) en el Magdalena Medio, en Cesar-Ranchería y en Catatumbo.