Johan Sebastián Castellanos Romero, estudiante de medicina, tomó la decisión de quitarse la vida, tras haber sufrido matoneo y abuso por parte de sus compañeros y profesores de la Universidad de Los Andes en Bogotá, según contó su familia a Semana.
El caso del joven de tan solo 20 años de edad salió a la luz después de la conmoción que generó la muerte de Catalina Gutiérrez, médica residente de la Pontificia Universidad Javeriana, quien dejó una carta en la que denunció abusos durante su formación académica y terminó con su vida.
De acuerdo con el medio de comunicación antes mencionado, Sebastián hizo un video en el que se despidió de su mamá y le pidió perdón por tomar la decisión de acabar con su vida, pues a su juicio, no podía aguantar el momento que estaba atravesando.
¿Quién era Johan Sebastián Castellanos, estudiante de medicina de Los Andes que se quitó la vida?
Johan Sebastián Castellanos era de Paipa, Boyacá y llegó a la Universidad de Los Andes, gracias a su rendimiento académico, pues se graduó con el mejor ICFES del departamento del centro de Colombia y el octavo en el país. Logrando así, obtener una beca por medio del programa Generación E del Ministerio de Educación.
Durante el primer semestre de estudio de Sebastián, la Universidad en el 2020 le entregó la distinción Alberto Magno, por contar con los mejores puntajes en el proceso de admisión, según reveló Semana.
A pesar de contar con la beca para estudiar, todos los gastos no eran cubiertos por esta misma. Según la familia del joven, quien habló con el medio de comunicación antes mencionado, desde ese momento inició el ‘matoneo’, ya que, Sebastián tuvo que aplazar varios semestres por no contar con los recursos económicos suficientes, mientras que sus compañeros avanzaban, lo que habría provocado burlas de los estudiantes con los que empezó a cursar la carrera.
En diálogo con Semana, la madre del joven, Oliva Romero, contó que “hubo persecución por su condición económica, porque él se puso a trabajar en un call center para comprar sus cosas y no sentirse tan menos. Pero él no era aceptado (en la universidad)”.
Los problemas habrían incrementado porque algunos de los compañeros de Sebastián lo acusaron de enviar un correo anónimo en el cual se reveló que una profesora de Patología permitía presuntamente a algunos estudiantes hacer trampa en los parciales.
“Él me decía que estaba presionado, que nadie lo quería, que lo rechazaban y que había un grupo de profesores, en especial esa profesora, que lo trataba mal, lo hacía sentir mal y le gritaba al frente de todos que con él era muy fácil acabar. Los compañeros le hacían bullying y no querían trabajar con él. Ahí empezó a caer en depresión y echó para atrás”, reveló la mamá del joven en Semana.
Según la madre de Sebastián, se tomó la decisión de informar la situación que se estaba viviendo a Diego Vivas, el director de pregrado de la universidad. Por ello, según el medio antes mencionado, la familia todavía se cuestionan por qué no se atendió el respectivo caso.
En mayo del 2023, según Olivia, “Sebastián ya no dormía bien, cuando salía era con miedo, caminaba con zozobra de que le iban a hacer daño. Se empezó a adelgazar muchísimo y fue cuando tomó la decisión de que lo llevara a la Clínica Montserrat porque se sentía muy mal”.
Tras esa situación, el joven empezó a tratar los episodios de depresión con un medicamento recetado después de varias valoraciones médicas. Después de ello, asistió a 15 sesiones con psiquiatría en el centro académico, el cual fue notificado. Sin embargo, el acoso y la presión continuó en cuarto semestre de Medicina.
Sebastián grabó un video y contó la situación que estaba sucediendo, pues había tomado la decisión de terminar con su vida. “Te amo, ma”, fueron sus últimas palabras de la pieza audiovisual en la cual el joven anunció que estaba en un prestigioso hotel de Cartagena y deseaba ser cremado.
El 9 de septiembre de 2023, el joven de tan solo 20 años se quitó la vida. Oliva recibió por parte de un compañero de su hijo una lista con los nombres de los estudiantes y profesores que lo habrían acosado. Semana tuvo acceso a dicha información y por ende, se comunicó con la Universidad de Los Andes, sin embargo, hasta el momento guardaron silencio.
Cabe mencionar que por medio de un derecho de petición, la Universidad le dio una respuesta a Olivia Romero, madre del joven estudiante de Medicina de cómo manejan este tipo de casos y los detalles de atención que recibió Sebastián en psiquiatría.