El pasado viernes, 7 de julio, la sargento segundo Ghislaine Karina Ramírez y sus dos hijos, de seis y ocho años, uno de ellos en condición de autismo, fueron liberados por el Ejército de Liberación Nacional (ELN) luego de permanecer por más de tres días secuestrados.
El Ejército Nacional había denunciado, en un comunicado de prensa, el secuestro de la sargento por parte de integrantes del Frente Domingo Laín Sáenz del grupo armado organizado ELN. Los hechos se presentaron en el municipio de Fortul, del departamento de Arauca, el pasado 3 de julio en las horas de la noche.
Pues bien, tras recuperar su libertad, las autoridades confirmaron que la mujer y sus hijos ya se encuentran en Bogotá y serán trasladados hasta las instalaciones del Hospital Militar, donde se realizarán los procedimientos médicos pertinentes para revisar sus condiciones vitales.
Las víctimas llegaron a la base militar de Catam y de allí fueron remitidas hasta el centro médico.
El secuestro
La suboficial y su familia fueron entregados a una comisión compuesta por representantes de la iglesia Católica y la Defensoría del Pueblo en un lugar no especificado. Ramírez, acompañada por sus hijos de 6 y 8 años, fue secuestrada mientras viajaban de Melgar a Arauca y fueron interceptados en el municipio de Fortul. La institución castrense responsabilizó al Frente de Guerra Oriental del ELN por la vida e integridad física de la suboficial y los menores.
En las imágenes de la liberación se pudo observar a la sargento uniformada, sus dos pequeños hijos y su mascota junto a miembros de la guerrilla, la Defensoría del Pueblo y la Iglesia Católica. El presidente de la República, Gustavo Petro, se pronunció a través de su cuenta de Twitter con un mensaje breve: “Liberada la sargento Karina Ramírez y sus hijos por el ELN”, acompañado de la fotografía ampliamente conocida en el país.
La sargento Glhislaine Karina Ramírez, tiene 32 años de edad. El papá de sus hijos es un mayor también del Ejército Nacional. Lleva aproximadamente 15 años en la Institución.
Estuvo en la Banda de la Guardia Presidencial, en el Batallón Jaime Rooke de Ibagué y estuvo en el Batallón de Tolemaida. En Ibagué se graduó como bachiller del Amina Melendro donde adquirió sus conocimientos en música, luego ganó una beca y pudo ingresar al Ejército.
Karina notificó a sus superiores todos los detalles del viaje y explicó que el desplazamiento aéreo no era una opción viable debido a las limitaciones económicas, ya que su sueldo no era muy alto. Durante el camino, la sargento Ramírez mantuvo comunicación vía chat con su padre, quien destacó que los mensajes dejaron de llegarle repentinamente.
Tras confirmarse el secuestro, se escucharon voces de diferentes sectores que rechazaron la acción y exigieron la liberación inmediata de la sargento y sus hijos, entre ellos la vicepresidenta Francia Márquez, quien aseguró: “Rechazamos el secuestro de la Sargento segundo Ghislaine Karina Ramírez y de sus dos hijos, de 6 y 8 años, uno de ellos con una condición especial de autismo, en el departamento de Arauca. Exigimos la libertad inmediata de la Sargento y sus hijos”.
El ministro de Defensa de Colombia, Iván Velásquez, se pronunció nuevamente con respecto a este lamentable hecho y subrayó que el viaje de la sargento y sus hijos solos en un vehículo en una zona conocida por la presencia del ELN era un acto de imprudencia, enfatizando la importancia de que las personas tomen precauciones necesarias.
El padre de la sargento se pronunció tras la liberación, mostrando su felicidad y agradeciendo a los medios de comunicación: “Que felicidad, mi hija me llamó y se puso a llorar, me dijo que estaba bien, que no me preocupara”.
Aunque Gerardo Ramírez no pudo hablar mucho tiempo con su hija, sí contó detalles de la llamada y aseguró que no se esperaba que fuera ella pero que al escucharla sintió mucha alegría. Del mismo modo, indicó que vio las fotos publicadas por la Defensoría del Pueblo y sintió gran alivio al verla.