La pólvora sigue dejando víctimas en Colombia. Al mediodía de este viernes 1 de diciembre se registró una explosión en Facatativá, Cundinamarca. Exactamente, el hecho ocurrió en una fábrica de pólvora de la vereda Pueblo Viejo.
De momento las autoridades locales reportan ocho heridos. Los Bomberos de Facatativá estuvieron en la zona, para conjurar las llamas. A la vereda llegaron los organismos de socorro más cercanos para atender a los heridos, los cuales fueron remitidos al hospital San Rafael.
Según información entregada por el hospital a Noticias Caracol, cuatro de los heridos presentan quemaduras en sus vías respiratorias, por lo que se encuentran en observación.
Esta es una de las primeras emergencias relacionadas con lugares de expendio y fabricación de pólvora que se presenta en el país, dándole la bienvenida a diciembre.
Lesionados por pólvora comenzando el mes
Sin embargo, el uso de pólvora y juegos pirotécnicos ya empezó a dejar lesionados en Colombia. Solo en el Valle del Cauca se tiene registro de cuatro personas durante la realización de la tradicional alborada. Lo más preocupante es que tres de ellas son menores de edad, y todas las víctimas pertenecen a Tuluá.
“Los cuatro afectados fueron en el municipio de Tuluá, uno de 25 años, otro de 14, 15 y 16 años. Les recordamos que el mayor riesgo de quemados por pólvora está precisamente en estas edades entre los adolescentes y los jóvenes porque la condición para categorizar el riesgo en ellos es muy diferente a la de un adulto”, indicó la secretaria Departamental de Salud, María Cristina Lesmes.
Los lesionados que se reportaron en el inicio de esta temporada decembrina son hombres que sufrieron quemaduras en miembros superiores, tronco y genitales, y amputación de dedos en manos.
Así mismo, en Medellín, se reportaron cuatro personas con quemaduras, incluido un niño de cinco años afectado por uno de estos artefactos.
Además del peligro que representa la pólvora por las quemaduras que puede dejar en la piel, la intoxicación por fósforo blanco es otro de los riesgos que se presentan en esta época decembrina y que se vigila desde la Secretaría de Salud junto con el Instituto Nacional de Salud y el Ministerio de Salud.
“El fósforo blanco aparece especialmente en esa pólvora que se llama ‘totes’ y es muy común la intoxicación en los niños, ojalá no usemos este elemento que tiene dos riesgos: la quemadura de los dedos de los niños o la ingesta por los dedos untados y la intoxicación de organofosforados que producen lesiones muy graves y puede poner en riesgo la vida de sus niños”, aseveró Lesmes.