Las velas aromáticas no solo sirven como elementos decorativos, sino que también ofrecen una variedad de beneficios que pueden mejorar la calidad de vida en el hogar. Desde crear un ambiente relajante hasta mejorar la salud mental, por lo que se han convertido en un complemento indispensable para muchos hogares.

A continuación, exploramos tres de los beneficios más significativos de tener velas aromáticas en casa.

Creación de un ambiente relajante

Las velas aromáticas deben estar eleboradas con productos naturales para evitar afecciones salud. | Foto: Getty Images

Uno de los principales beneficios de las velas aromáticas es su capacidad para transformar el ambiente de cualquier habitación en un espacio de tranquilidad y relajación. Los aromas juegan un papel crucial en la percepción sensorial y emocional, y las velas aromáticas están diseñadas para explotar esta conexión.

Las fragancias como la lavanda, la manzanilla y el sándalo son conocidas por sus propiedades calmantes. Encender una vela con estos aromas después de un día estresante puede ayudar a reducir la ansiedad y promover la calma. Un estudio publicado en el Journal of Alternative and Complementary Medicine encontró que la aromaterapia con lavanda puede disminuir significativamente los niveles de cortisol, la hormona del estrés, en el cuerpo. Esto se traduce en una sensación general de bienestar y relajación.

Además, el acto de encender una vela y observar la llama parpadeante puede tener un efecto meditativo, ayudando a reducir la tensión y promover un estado de paz mental. La combinación del aroma y la luz suave crea un ambiente propicio para la meditación, la lectura o simplemente para disfrutar de un momento de calma.

Mejora de la calidad del sueño

Las velas aromáticas pueden mejorar la calidad del sueño. | Foto: Getty Images/iStockphoto

El sueño es una parte vital de nuestra salud general, y las velas aromáticas pueden desempeñar un papel importante en la mejora de la calidad del sueño. Los aceites esenciales utilizados en muchas velas aromáticas, como el de lavanda y el de eucalipto, son conocidos por sus propiedades que inducen el sueño.

Investigaciones han demostrado que el aroma de la lavanda puede mejorar la calidad del sueño, permitiendo un sueño más profundo y reparador.

Además de las fragancias específicas, el ritual de encender una vela antes de acostarse puede ayudar a establecer una rutina nocturna que señale al cuerpo y a la mente que es hora de relajarse y prepararse para el sueño. Crear un ambiente tranquilo y aromático en el dormitorio puede reducir la ansiedad y el estrés que a menudo interfieren con el sueño.

Beneficios para la salud mental

Las velas aromáticas son una gran opción para tener un buen olor en el hogar. | Foto: ben phillips

Más allá de la relajación y la mejora del sueño, las velas aromáticas pueden tener un impacto positivo en la salud mental. Los aromas específicos pueden influir en el estado de ánimo y el bienestar emocional. Por ejemplo, el aroma de la menta puede aumentar la concentración y la energía, mientras que el aroma del jazmín puede elevar el estado de ánimo y reducir la depresión.

La aromaterapia es una práctica reconocida en la medicina alternativa para tratar una variedad de trastornos psicológicos y emocionales.

Además, las velas aromáticas pueden ser una herramienta útil en la práctica de la atención plena (mindfulness). Esto implica estar presente en el momento y apreciar las experiencias sensoriales. Encender una vela aromática y enfocarse en su aroma y la danza de la llama puede ser una forma efectiva de practicar la atención plena, lo que puede reducir el estrés y aumentar la sensación de bienestar.

Las velas aromáticas también pueden ser una fuente de confort emocional. En momentos de tristeza o soledad, el simple acto de encender una vela y disfrutar de su aroma puede proporcionar una sensación de consuelo y calidez. Este pequeño ritual puede tener un gran impacto en el bienestar emocional y ayudar a las personas a sobrellevar los momentos difíciles.

*Este artículo fue creado con ayuda de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano, y curado por un periodista especializado de El País.