Las sillas de plástico son una opción popular debido a su durabilidad y facilidad de mantenimiento. Sin embargo, con el tiempo, pueden acumular suciedad, manchas y deteriorarse si no se cuidan adecuadamente. Para aquellos que buscan una alternativa económica y ecológica a los productos de limpieza comerciales, existen métodos caseros que resultan efectivos y accesibles.

Preparación del área y materiales necesarios

Antes de iniciar el proceso de limpieza, es crucial preparar el área de trabajo y reunir los materiales necesarios. Se recomienda disponer de:

A medida que las sillas de plástico acumulan suciedad y manchas, muchos optan por soluciones caseras para su limpieza. | Foto: Getty Images
  • Trapo o esponja suave: Es importante evitar el uso de estropajos ásperos que puedan dañar el plástico.
  • Balde con agua tibia: El agua tibia ayuda a disolver la suciedad, facilitando la limpieza.
  • Jabón líquido para platos: Este tipo de jabón es suave y no dañará el plástico.
  • Vinagre blanco: El vinagre actúa como desinfectante natural y ayuda a eliminar manchas.
  • Bicarbonato de sodio: Sirve como abrasivo suave y desodoriza.
  • Aceite de oliva o de coco: Utilizado para devolver el brillo al plástico.

Es recomendable trasladar las sillas al exterior o a un área bien ventilada para evitar que los productos de limpieza afecten otras superficies. Además, se sugiere colocar una lona o toalla en el suelo para protegerlo de posibles salpicaduras.

Proceso de limpieza

El uso de productos como el vinagre, el bicarbonato de sodio y el aceite de oliva puede proporcionar resultados sorprendentes sin complicaciones | Foto: Getty Images/iStockphoto
  • Limpieza básica: Se debe llenar un balde con agua tibia y añadir una pequeña cantidad de jabón líquido para platos. Con un trapo suave o una esponja, se limpia la superficie de las sillas frotando con movimientos circulares para eliminar la suciedad superficial. Es importante asegurarse de alcanzar todos los rincones y grietas, enjuagando el trapo con frecuencia para evitar esparcir la suciedad. Posteriormente, se debe pasar un paño limpio y húmedo para eliminar cualquier residuo de jabón.
  • Devolver el brillo: Una vez que las sillas estén limpias y secas, se puede aplicar un poco de aceite de oliva o de coco con un paño suave. Este paso no solo devuelve el brillo al plástico, sino que también crea una capa protectora que facilita la limpieza futura. Es importante utilizar el aceite con moderación para evitar que el plástico quede resbaladizo.

Mantenimiento y prevención

Para mantener las sillas de plástico en buen estado, se recomienda realizar una limpieza ligera y rápida de manera regular. Además, es aconsejable evitar exponerlas a la luz solar directa durante períodos prolongados, ya que esto puede hacer que el plástico se vuelva quebradizo y se decolore. Guardar las sillas en un lugar cubierto durante el invierno o las estaciones húmedas también ayudará a protegerlas de la intemperie.

*Este artículo fue creado con ayuda de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano, y curado por un periodista especializado de El País.