La Virgen del Carmen, también conocida como la Virgen María o la Madre de Jesús, es una figura que se refiere exactamente al catolicismo, y que, al igual que Jesús, recibe veneración y tiene numerosas advocaciones a nivel mundial.
Una de las advocaciones es la Virgen del Carmen cuya denominación, de acuerdo con la Casa de la Cultura Ecuatoriana, proviene del Monte Carmelo en Israel. Es de este modo, que la Virgen del Carmen, es conocida como la patrona de conductores y marineros, y su celebración tiene por fecha el 16 de julio, día en el que, desde varios sectores colombianos, se le rinde tributo a esa figura católica.
Esta celebración tiene una gran historia y una profunda significancia para los fieles católicos en el país. Es de destacar que la devoción a la Virgen del Carmen tiene sus raíces en el Monte Carmelo, una montaña en Israel asociada con el profeta Elías.
Según la tradición, el profeta Elías fundó una orden religiosa dedicada a la oración y a la vida contemplativa en el Monte Carmelo. Posteriormente, en el siglo XIII, surgieron los Carmelitas, una orden religiosa que adoptó a la Virgen María como su patrona y protectora.
La advocación mariana de la Virgen del Carmen se difundió ampliamente a lo largo de los siglos, especialmente en España y en las colonias españolas en América Latina. La Orden de los Carmelitas, junto con otras órdenes religiosas, jugó un papel importante en la evangelización de América.
En Colombia, la devoción a la Virgen del Carmen se remonta a la época de la colonia. En el siglo XVII, se fundaron numerosas cofradías y hermandades en honor a la Virgen del Carmen en diferentes regiones del país. Estas organizaciones religiosas se dedicaron a promover la devoción y a realizar actos de caridad en nombre de la Virgen.
A propósito, la red católica mundial, Eternal Word Television Network, Ewnt, explica que el respeto de esta virgen radica en que no solo es la madre del hijo de Dios y, en consecuencia, de la Iglesia, sino también de todos los fieles.
A nivel global son millones los devotos que entregan tanto sus peticiones como agradecimientos a María y; de hecho, también se le han atribuido milagros. Tanto en tiempos de adversidad como en situaciones familiares, es uno de los personajes más importantes para los creyentes.
Es por ello, que muchos fieles le hacen plegarias a la Virgen del Carmen, con el fin de que ella les pueda ayudar. Una de las más destacadas es la de protección, con la que sus creyentes le piden amparo en cada una de sus actividades.
Esta es la oración para pedirle protección a la Virgen del Carmen:
Santísima, inmaculada y poderosísima Virgen del Carmen: tú que desde el cielo miras con tus dulces y amables ojos a nosotros, tus amados hijos, que usamos tu bendito escapulario y que pedimos tu protección.
Mírame con piedad y cubre mi alma con tu manto cálido y sagrado símbolo inequívoco de protección maternal; ese que ofreces a tus hijos en los momentos de penuria, enjuga mis ojos y seca mis lágrimas cuando me encuentre en zozobra y desolación.
Protege mi alma y mi vida de todo mal, que tu manto sagrado sea mi escudo protector ante todo peligro y enemigo, así como también me otorgue fortaleza cuando mi ánimo decaiga.
Que con tu poder ilumine mi alma, obra y pensamiento y no consiga ninguna acción nublar mi razón, enriquece mi sabiduría y mi entendimiento para que pueda yo alejarme de cualquier situación de peligro y pueda yo glorificar tu nombre y aumentar mi fe y mi devoción en ti cada día.