Tinturarse el cabello es muy común en mujeres y hombres que quieren cambiar su aspecto, pero es importante tener presentes algunas recomendaciones para no maltratar el cabello, como, por ejemplo:
1. Después de aplicar el tinte, lo recomendado es lavar el cabello de 24 a 48 horas después de realizar el proceso, pues durante este tiempo, el tinte se fija, y así se evita que el color se caiga rápidamente.
2. Pasado el tiempo, es importante enjuagar el cabello con agua fría o tibia que no supere los 36 °C, pues si se baña con agua muy caliente, se pueden abrir las cutículas del cabello, y esto podría ocasionar que se desvanezca el color más rápido.
3. Hay que utilizar los productos adecuados, porque de esta forma se mantiene el color y la salud del cabello.
4. Durante el enjuague del cabello, es clave que no se frote, porque lo maltrata, y puede ocasionar que se rompa, y por ello es que se pueden presentar puntas abiertas y resecas. Asimismo, se pueden realizar masajes capilares, porque pueden estimular la circulación sanguínea y promover el crecimiento del cabello.
5. Es importante que se enjuague bien el cabello para que no queden residuos de champú, ya que esto podría ocasionar que el cabello se ensucie más rápido.
6. Hay que proteger el cabello de la luz del sol y de otras fuentes de luz ultravioleta, porque así se evitan los daños ocasionados por el calor.
7. Al momento de secar el cabello, es mejor utilizar una toalla de microfibra, y lo que se debe hacer es envolver el cabello, sin generar fuerza o presión. No obstante, si se utiliza elementos como el secador, lo ideal es que la temperatura no sea tan alta.
8. Al momento de desenredar, hay que hacerlo con delicadeza, y se puede utilizar un peine de dientes anchos, pues así se podrían evitar los tirones del cabello.
Por su parte, para evitar que el cabello no se dañe, se pueden consumir vitaminas que ayuden con su cuidado, y el portal portugués de salud, nutrición y bienestar, Tua Saúde, reveló que las vitaminas que ayudan con el crecimiento del cabello son:
1. Vitamina A: Ingerir alimentos como zanahorias, tomate, melón, papaya, pimentón, remolacha, acelga, espinacas, duraznos son importantes para un crecimiento saludable del cabello. Además de esto, como la vitamina A es un potente antioxidante, cuida los folículos pilosos del daño causado por los radicales libres.
2. Vitamina C: El consumo de alimentos ricos en vitamina C como la naranja, la mandarina, la piña, las fresas, el limón y el kiwi son necesarios para la producción de colágeno, una proteína que forma parte importante de la estructura del cabello. Además de esto, la vitamina C es un potente antioxidante y ayuda a que el organismo absorba hierro a nivel intestinal, que es necesario para el crecimiento del cabello.
3. Vitamina B7: Esta vitamina se puede encontrar naturalmente en los alimentos como almendras, avellanas y cereales integrales y conserva la salud de la piel y el cabello, garantiza la energía en las células y mantiene la producción de proteínas.
4. Vitamina B12: está presente en la carne de aves, de vaca y de pescado, y los lácteos y tiene un papel esencial en la formación glóbulos rojos, el metabolismo celular, la función nerviosa y la producción de ADN, según Mayo Clinic.
5. Vitamina B6: ayuda a metabolizar las proteínas de la queratina que son las responsables del brillo del cabello y se encuentra en el atún y el salmón, el banano, las legumbres (fríjoles secos), la carne de res y de cerdo, las nueces, la carne de aves, los granos enteros y los cereales fortificados y los garbanzos.