El olfato es uno de los cinco sentidos fundamentales del ser humano, y uno de los más poderosos que existe, pues es capaz de influir directamente en el cerebro y generar diversas variaciones en las ondas cerebrales.

No obstante, cuando de olfato se trata, hay algunos olores que, específicamente pueden influir en la manera en que se abordan algunos momentos del día. Uno de ellos es el caso de la concentración, la capacidad de enfocar la mente y los esfuerzos en una tarea o actividad específica, sin distracciones, algo que el olfato puede ayudar a agudizar.

Uno de ellos es la menta, que se ha asociado con la estimulación mental y la alerta. El aroma fresco de la menta puede ayudar a despertar los sentidos y mantener la concentración.

Menta | Foto: Copyright 2018 Anand Purohit

Otro aroma clave, es el romero, que según algunos expertos, sugieren que este aroma puede también mejorar la memoria y la concentración. De hecho, algunas personas utilizan aceite esencial de romero o simplemente colocan ramitas de romero en su entorno, cuando se disponen a hacer tareas que impliquen un alto nivel de concentración.

Ahora bien, los olores cítricos, como el limón y la naranja, a menudo se asocian con la revitalización y la energía. Estos olores, también pueden ayudar a despertar los sentidos y mejorar el estado de ánimo, lo que puede contribuir a una mayor concentración.

Aunque todo dependerá de su disposición para hacer las cosas.

La canela tiene efectos antioxidantes. | Foto: Getty Images

Otros olores que facilitan la concentración

  • Lavanda: Aunque la lavanda se asocia más comúnmente con propiedades relajantes, para algunas personas, puede ayudar a reducir el estrés y la ansiedad, creando un ambiente propicio para la concentración.
  • Canela: La canela es otro aroma que algunas personas encuentran estimulante y que puede contribuir a mejorar la concentración.

Es importante tener en cuenta que la respuesta a los olores puede ser subjetiva, y lo que funciona para una persona puede no funcionar para otra. Además, la concentración también está influenciada por factores como el entorno, la calidad del aire y otros elementos externos.

Ahora bien, tengan en cuenta que, además de los olores también hay otras técnicas para mantener la concentración. Una de ellas puede ser definir metas específicas y alcanzables para la tarea que está realizando, esto le puede ayudar a tener objetivos claros le proporciona un sentido de propósito y dirección.

Se recomienda hacer actividades que fortalezcan la concentración. | Foto: Getty Images

Otra opción es tener un espacio de trabajo ordenado y organizado, lo que puede reducir las distracciones y facilitar la concentración. Incluso, utilizar técnicas de gestión del tiempo pueden ayudar en este propósito. Para eso divida el tiempo en bloques y establezca períodos específicos para trabajar en tareas específicas.

Puede probar la técnica Pomodoro, que implica trabajar intensamente durante 25 minutos y luego tomar un breve descanso.

Otro opción es enfocarse en las tareas más importantes y urgentes primero. Esto puede ayudarle a concentrarte en lo esencial antes de abordar otras responsabilidades. Y, por qué no, puede intentar cambiar entre diferentes tipos de tareas, pues hacerlo de esta manera puede ayudar a prevenir la fatiga mental y mantener la concentración a lo largo del día.