Los gatos pueden dañar las plantas por varias razones, ya sea por instinto, curiosidad o necesidad. Algunas de las principales razones son:

Exploración y juego

Los gatos son curiosos por naturaleza y les gusta explorar su entorno. Pueden morder, rascar o volcar macetas simplemente por diversión.

Instinto de caza

Necesidad de fibra

Algunos gatos mastican plantas porque necesitan fibra en su dieta o porque tienen malestar estomacal y buscan purgarse.

Uso de la tierra como arenero

Si la tierra de las macetas está accesible, algunos gatos la usan como si fuera su caja de arena, cavando y ensuciando el área.

Estos animales pueden afectar las plantas por instinto o curiosidad. | Foto: Getty Images

Marcaje de territorio

Repelentes naturales

Ante esta situación, existen repelentes naturales que ayudan a evitar que los gatos dañen las plantas:

1. Cáscaras de cítricos

A los gatos no les gusta el olor de la naranja, el limón o la toronja. Coloca cáscaras frescas alrededor de tus plantas o rocía un poco de aceite esencial diluido en agua.

2. Pimienta y especias

La pimienta negra, la pimienta de cayena o el curry pueden ser buenos repelentes. Espolvorea un poco en la tierra para disuadirlos.

3. Café molido usado

Además de ser un buen fertilizante, el café tiene un olor fuerte que a los gatos no les agrada.

Estos animales pueden afectar las plantas por instinto o curiosidad. | Foto: Getty Images

4. Plantas repelentes

Algunas plantas como el romero, la lavanda, la ruda o la citronela son desagradables para los gatos y pueden proteger tu jardín.

5. Vinagre diluido

Rocía una mezcla de agua con un poco de vinagre en los bordes de las macetas o en el suelo.

6. Cáscaras de ajo y cebolla

Estos olores también resultan desagradables para los gatos y pueden ayudar a mantenerlos alejados.

Cuidados que hay que tener con los gatos

1. Alimentación adecuada

  • Proporcionar un alimento balanceado de buena calidad, ya sea seco o húmedo.
  • Asegurar que siempre tenga agua fresca y limpia.
  • Evitar alimentos tóxicos como chocolate, cebolla, ajo y huesos.

2. Higiene y aseo

  • Cepillar regularmente, especialmente si tiene el pelo largo, para evitar nudos y reducir la caída de pelo.
  • Aunque los gatos se acicalan solos, en algunos casos puede ser necesario un baño con productos específicos para felinos.
  • Limpiar el arenero todos los días y cambiar la arena completamente con frecuencia.

3. Atención veterinaria

  • Realizar chequeos regulares y aplicar las vacunas necesarias.
  • Desparasitar interna y externamente según las indicaciones del veterinario.
  • Esterilizar para evitar camadas no deseadas y mejorar su salud.

4. Ambiente seguro y enriquecimiento

  • Proporcionar juguetes y rascadores para evitar daños en los muebles.
  • Asegurar que tenga un lugar cómodo y tranquilo para descansar.
  • Mantener productos tóxicos, cables y objetos peligrosos fuera de su alcance.