En diferentes partes del mundo como Estados Unidos, países de Centroamérica y algunos de Latinoamérica como Colombia y Brasil, el cielo será protagonista de un nuevo eclipse anular de sol.
Este fenómeno tendrá lugar el sábado 14 de octubre, y aunque son varias las recomendaciones, mitos y leyendas han surgido a partir de este evento astronómico, que se repetirá, hasta dentro de 29 años.
Es importante mencionar que este fenómeno, como ha sido catalogado por los expertos, es una dinámica de la luna, tierra y soles.
“El eclipse es el simple resultado del dinamismo del universo y sus cuerpos celestes, este fenómeno es la obstrucción de la luna, a la luz del sol, permitiendo ver un hermoso anillo solar”, citan los científicos.
Con la llegada de este eclipse, han señalado que las mujeres embarazas podrían verse afectadas si veían este fenómeno. Según una de las leyendas azteca que fue difundida en las redes sociales, si las mujeres que estuvieran en etapa de gestación, se creía que la luna mordía el rostro del bebé.
Sin embargo, pese a estos mitos y leyendas, no hay ninguna evidencia científica de que este fenómeno pueda afectar al bebé.
Es posible, que estas creencias puedan generar algunos miedos entre los eclipses y el embarazo, si embargo, no entre las recomendaciones más populares es que se utilice protección para los ojos. Pero, el embarazo, no presentaría afectaciones con posibles repercusiones que pueda tener en el feto.
Otros mitos del eclipse
Entre los rumores más destacados, se encuentra la creencia de que se puede perder un kilogramo de peso. Este mito es de gran interés para muchas personas, lo cual ha llevado a varios expertos a abordarlo.
Los expertos explican que si imaginamos un objeto con forma de salchicha acercándose a un fenómeno astronómico, experimentaría una fuerza de atracción intensa en el extremo más cercano al agujero. Sin embargo, el extremo opuesto quedaría retrasado.
El resultado de este proceso sería la desintegración del objeto, y sus fragmentos comenzarían a orbitar alrededor del agujero negro.
“Los humanos, en contraste con los 12 mil km de diámetro de la Tierra, somos de dimensiones reducidas. La Tierra sí experimenta una notable diferencia en sus extremos debido a estas fuerzas, pero nosotros no estamos sujetos a esos mismos cambios gravitacionales.
Por ello, no experimentamos alteraciones en nuestro peso de la misma manera que los océanos”, agregó Julieta Fierro Gossman es una investigadora del Instituto de Astronomía de la UNAM, México.
A partir de este fenómeno astronómico nace el mito de que las personas disminuyen su peso.
La creencia general es que es altamente improbable que la Luna ejerza un efecto significativo en los seres humanos. Esto se debe a la escala considerablemente menor de nuestro cuerpo en comparación con la inmensidad de los océanos. Por lo tanto, este es uno de esos mitos que no pueden considerarse veraces, aunque haya personas que insistan en su validez.
Entre las recomendaciones para observar un eclipse solar, la principal es utilizar gafas certificadas o recurrir a métodos indirectos de proyección, como el uso de equipos especiales como telescopios.
Otra opción es construir una caja a la que se le coloca papel de aluminio en la parte superior y se hace un pequeño agujero, proyectando la imagen en una superficie blanca. Los expertos enfatizan que no se debe mirar el eclipse directamente, ya que la radiación ultravioleta puede dañar los ojos.
Además, se aconseja evitar el uso de espejos, radiografías, cámaras y teléfonos celulares, así como evitar mirar el reflejo en el agua o utilizar gafas de sol estándar para proteger los ojos durante el eclipse.