Contrario a lo que muchos piensan, bajar la presión arterial no se limita a levantar pesas o realizar rutinas de ejercicio extenuantes. De hecho, existen opciones más accesibles y de bajo impacto que pueden ser igual de efectivas para controlar este problema de salud tan común.

Ejercicios aeróbicos de intensidad moderada:

Caminar, trotar, nadar o montar en bicicleta durante al menos 30 minutos la mayoría de los días de la semana son excelentes opciones para mejorar la salud cardiovascular y reducir la presión arterial. La clave está en encontrar una actividad que disfrute y pueda realizar de manera constante.

Explore las opciones de ejercicio que pueden ser beneficiosas para regular la presión arterial.

Ejercicios de fuerza isométricos:

Estos ejercicios involucran la contracción de los músculos sin movimiento, como sostener una plancha o realizar sentadillas contra la pared. Son una excelente manera de aumentar la fuerza muscular sin aumentar la presión arterial.

Ejercicios de respiración:

La respiración profunda y controlada puede ayudar a reducir el estrés, uno de los principales factores que contribuyen a la hipertensión. Existen diferentes técnicas de respiración, como la respiración diafragmática o la respiración en caja, que puede practicar en casa o con la ayuda de un profesional.

Conozca los ejercicios que pueden contribuir positivamente al manejo de la presión arterial.

Incorporar estos ejercicios a la rutina diaria

No es necesario dedicar horas a la semana para obtener los beneficios de estos ejercicios. Incluso pequeñas cantidades de actividad física regular pueden tener un impacto positivo en su salud cardiovascular. Comience poco a poco y aumente gradualmente la intensidad y la duración de sus entrenamientos a medida que se sienta más cómodo. Recuerde consultar con su médico antes de iniciar cualquier programa de ejercicio, especialmente si tiene alguna condición médica preexistente.

Más allá del ejercicio:

Si bien la actividad física es fundamental para controlar la presión arterial, también es importante adoptar otros hábitos saludables, como:

Encuentre cómo ciertos ejercicios pueden ser aliados clave en el control de la presión arterial. | Foto: Pexels
  • Mantener una dieta balanceada y baja en sodio.
  • Limitar el consumo de alcohol y tabaco.
  • Controlar su peso.
  • Manejar el estrés de manera efectiva.

Tenga en cuenta que la hipertensión es una condición crónica que requiere un manejo constante. Al combinar una rutina de ejercicio regular con un estilo de vida saludable, puede controlar su presión arterial y reducir el riesgo de complicaciones graves para la salud.

*Este artículo fue creado con ayuda de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano, y curado por un periodista especializado de El País.