El imaginario colectivo sugiere siempre que las vías son extensas y planas; sin embargo, en la mayoría de las ciudades de Colombia las pendientes son más una regla que una excepción. La mayoría de barrios y lugares turísticos tienen encumbradas pendientes que ponen en aprietos incluso al conductor más experimentado, es por eso que a la hora de estacionar no es bueno que la confianza genere una mala pasada, y sobre todo pueda ocasionar un accidente con graves consecuencias.
La costumbre indica que al momento de estacionar el vehículo, sea en un lugar con pendiente o en una vía plana, es necesario activar el llamado freno de estacionamiento, o freno de mano, la palanca que se encuentra en el lado derecho del conductor con un botón en la punta, o en los carros de último modelo, un botón que está en el panel central del vehículo.
Sin embargo, los expertos recomiendan que para estacionar es necesario que el conductor, antes de salir del vehículo, lo deje con el cambio contrario a la inclinación de la pendiente. Es decir, si el vehículo está estacionado en la pendiente con dirección hacia arriba, el conductor debe embragarlo en primera velocidad, lo que en caso de rodada ayudará a detenerlo. Si, por el contrario, el vehículo está estacionado hacia abajo, lo aconsejable sería embragarlo en reversa, aunque la primera velocidad también serviría.
Cabe anotar que estas indicaciones aplican únicamente en un vehículo mecánico. En el caso de los vehículos con transmisión automática el conductor debe poner el vehículo en neutro al terminar de dar reversa, colocar el freno de mano y soltar el pedal que cumple la misma función, poner la palanca de marcha en ‘P’ de parqueo y apagar el carro sin ningún problema.
Por otro lado, los expertos aconsejan que a la hora de estacionar el vehículo siempre debe tener las llantas en contra del andén. Es decir, que los neumáticos se conviertan en una protección adicional en caso de que la gravedad supere las resistencias del vehículo. En caso de que no haya andén, la sugerencia es que las llantas estén dirigidas a que en caso de un accidente el vehículo ocasione el menor daño posible.