El trasporte aéreo es considerado uno de los más seguros en el mundo, ya que existe una probabilidad mayor de estar en un accidente vehicular que en un siniestro aéreo. No obstante, hay muchas personas que prefieren viajar de por tierra y demorarse más tiempo con tal de no sentir las turbulencias normales que se dan en medio de un vuelo.

Este efecto es totalmente normal en vuelos, así sea de corta distancia y se deben a la fuerza con la que las corrientes de viento chocan con las partes del avión, en especial en los alerones que permiten direccionar la nave y dar su estabilidad.

Las turbulencias son corrientes de aires que chocan contra el avión. | Foto: Libre de derechos

En pocas palabras, una turbulencia es una corriente de aire inestable que se desplaza de manera inesperada, que se generan en condiciones climáticas hostiles, como en una tormenta.

Sin embargo, una turbulencia se puede sentir en cualquier momento, así el día esté soleado y no hay manera de anticiparla.

En este punto hay que tener en cuenta que una de las turbulencias más comunes es la denominada ‘corriente de chorros’, la cual se da por el encuentro de dos corrientes de vientos que tienen velocidades distintas.

Las turbulencias en los aviones pueden ser producto del clima. Getty Images. | Foto: cookelma

“Cuando se produce una fuerte cizalladura del viento cerca de la corriente en chorro, el aire puede desbordarse. Y eso crea estos movimientos caóticos en el aire”, le dijo al medio ‘Voz de América’, Thomas Guinn, presidente del departamento de ciencias aeronáuticas aplicadas de la Universidad Aeronáutica Embry-Riddle de Daytona Beach, Florida.

Lo cierto es que el experto asegura que los pilotos cuentan con dispositivos tecnológicos para medir la temperatura del viento y prever de cierta manera en que momento pueden chocar aire con temperatura diferente, como cuando se está haciendo un recorrido en el que la aeronave pasa sobre el océano pacífico y luego sobre aguas frías del Atlántico.