Las copas de cristal representan elegancia y sofisticación en cualquier mesa, pero mantenerlas en perfecto estado puede ser un reto. Las manchas, las huellas dactilares y los residuos de bebidas suelen opacar su brillo natural, afectando su apariencia. Existe, sin embargo, un truco casero poco conocido, este método, además de dejar las copas impecables, elimina olores y bacterias de manera eficiente. A continuación, se detalla cómo llevar a cabo este proceso en tres sencillos pasos.

Preparación: Materiales necesarios

Para aplicar este truco, se requiere únicamente ginebra, un paño de microfibra, agua tibia y, opcionalmente, un detergente suave para platos. La ginebra, gracias a su alto contenido de alcohol, es un excelente limpiador para el cristal. Su capacidad para disolver grasa y eliminar manchas difíciles la hace ideal para combatir los residuos de vino y las marcas de dedos.

Antes de iniciar la limpieza, es importante asegurarse de que las copas estén a temperatura ambiente. El cristal puede volverse frágil con los cambios bruscos de temperatura, lo que podría provocar grietas o roturas. Además, se recomienda realizar el proceso en una superficie limpia y estable para evitar accidentes.

Limpieza paso a paso

Un sencillo truco casero puede convertirse en el mejor aliado para mantener las copas de cristal relucientes. | Foto: Getty Images
  1. Remojo Inicial: En un recipiente grande, se debe preparar una mezcla de agua tibia con una pequeña cantidad de detergente suave, si se desea. Las copas de cristal se sumergen en esta mezcla durante unos minutos para aflojar cualquier residuo adherido. Este paso es opcional, pero facilita el proceso de limpieza.
  1. Aplicación de Ginebra: A continuación, se vierte un poco de ginebra directamente sobre un paño de microfibra limpio. Con este paño, se frota suavemente cada copa, poniendo especial atención en las zonas con manchas persistentes. El alcohol presente en la ginebra es eficaz para descomponer los residuos, asegurando que no quede ningún olor extraño en el cristal.
  1. En caso de que las manchas sean especialmente difíciles, se puede aplicar ginebra directamente sobre la mancha y dejar que actúe durante un minuto antes de frotar nuevamente. La ginebra no solo limpia, sino que también desinfecta las copas, eliminando bacterias que puedan haberse adherido.
  1. Enjuague y Secado: Tras limpiar las copas con ginebra, se procede a enjuagarlas con agua tibia para eliminar cualquier residuo de alcohol. Es crucial enjuagar bien para asegurarse de que no queden restos que puedan afectar el sabor de las bebidas que se sirvan en las copas más adelante.
  1. Finalmente, se secan las copas con un paño de microfibra limpio. Este tipo de paño es ideal porque no deja pelusas y ayuda a pulir el cristal, devolviéndole su brillo original. Al secar, es recomendable hacerlo con suavidad para evitar cualquier riesgo de rotura.
Un método casero sorprendentemente efectivo para devolver el brillo a las copas de cristal utiliza ingredientes comunes disponibles en el hogar. | Foto: Getty Images/iStockphoto

Consejos adicionales para el cuidado de las copas de cristal

Para mantener las copas de cristal en óptimas condiciones, se recomienda seguir algunos cuidados adicionales. Siempre que sea posible, se debe optar por lavar las copas a mano en lugar de utilizar el lavavajillas, ya que el calor y los detergentes agresivos pueden dañar el cristal con el tiempo. Si se usa el lavavajillas, es fundamental que el ciclo sea suave y que las copas estén bien aseguradas para evitar golpes entre ellas.

Asimismo, es importante evitar exponer las copas a cambios bruscos de temperatura, ya que esto puede causar grietas. Se aconseja guardarlas en un lugar limpio y seco, preferiblemente en una vitrina o estante cerrado para evitar la acumulación de polvo.

Para un brillo adicional, se puede pulir las copas con un paño de microfibra ligeramente humedecido en agua tibia después de cada uso. Este paso ayudará a mantenerlas libres de huellas dactilares y pequeñas manchas entre limpiezas profundas.

*Este artículo fue creado con ayuda de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano, y curado por un periodista especializado de El País.