Una de las sensaciones más desagradables que puede existir es que la toalla de la cocina tenga grasa acumulada, que puede sentirse de forma viscosa y pegajosa al tacto.
Esto sucede cuando se han limpiado diferentes residuos orgánicos como grasas, aceite, y líquidos. Sin embargo, hay un truco casero que sirve para limpiar toda suciedad del limpión de la cocina.
De hecho, un trapo de cocina se encuentra entre los objetos del hogar que contienen más bacterias.
En estos casos, existe un truco casero para lograr arrancar toda la suciedad de este utensilio del hogar. Se trata del amoníaco, el vinagre blanco de limpieza y el percarbonato de sodio.
Estos elementos son excelentes productos para desengrasar y desinfectar los trapos, paños y toalla de cocina.
Utilizar amoníaco para dejar los trapos como nuevos es eficiente, ya que si tienen manchas de grasa muy adheridas las va a remover. Sin embargo, es un producto que no dañará las fibras ni el color de los trapos.
Lo primero que debe hacer es poner cinco litros de agua tibia en un tarro y luego agregar dos tapas de amoníaco líquido, mezcle e introduzca las toallas durante, mínimo, media hora, hasta los 60 minutos.
Recuerde que en este proceso es fundamental usar guantes de protección para que la piel no tenga contacto con el amoniaco o ningún otro químico.