El café, más allá de su rol como bebida, ofrece soluciones inesperadas para combatir los malos olores en el hogar. Cuando se combina con otros ingredientes comunes, el café puede desempeñar un papel efectivo en la creación de un ambiente más fresco y agradable. A continuación se presentan tres trucos caseros que aprovechan las propiedades del café junto con otros componentes.
Desodorizar el refrigerador con café y bicarbonato
El refrigerador es un área propensa a acumular olores debido a la mezcla de alimentos almacenados. Para neutralizar estos olores, se recomienda combinar café con bicarbonato de sodio. La mezcla de partes iguales de posos de café usados y bicarbonato de sodio en un recipiente abierto es una solución efectiva. Este recipiente debe colocarse en una esquina del refrigerador.
El café actúa absorbiendo los olores, mientras que el bicarbonato de sodio potencia este efecto al ayudar a eliminar los aromas indeseables. Este método resulta especialmente útil para combatir olores persistentes, como los de pescados o comidas fuertes. Se sugiere cambiar la mezcla cada 2 a 3 semanas para mantener la eficacia.
Purificar el aire con café y aceite esencial
Para refrescar el aire en diversas áreas del hogar, se puede combinar café con aceites esenciales. Se recomienda llenar pequeños frascos con granos de café y añadir unas gotas del aceite esencial preferido, como lavanda, menta o cítricos. Los aceites esenciales aportan un aroma agradable, mientras que los granos de café absorben los olores.
Estos frascos deben colocarse en las áreas donde se desea neutralizar olores, como la sala de estar o el dormitorio. La combinación de café y aceite esencial no solo elimina olores, sino que también proporciona un aroma fresco y personalizado en el hogar. Este truco también mejora la calidad del aire en espacios pequeños.
Combatir olores en alfombras con café y vinagre
Las alfombras y tapetes pueden retener olores con facilidad, pero se pueden tratar de manera efectiva con una mezcla de café y vinagre. Primero, se debe espolvorear café molido sobre la superficie de la alfombra. El café debe dejarse reposar durante 10 a 15 minutos para que absorba los olores.
Posteriormente, se recomienda mezclar partes iguales de vinagre blanco y agua en una botella pulverizadora. Esta solución debe rociarse sobre la alfombra, asegurándose de cubrir las áreas donde se ha esparcido el café. Después de aplicar la mezcla, se debe permitir que la alfombra se seque completamente antes de aspirar el café. El vinagre ayuda a desinfectar y neutralizar olores, mientras que el café continúa absorbiendo los malos olores.
*Este artículo fue creado con ayuda de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano, y curado por un periodista especializado de El País.