En términos económicos, el Paro Nacional y los bloqueos de vías sucedidos hace aproximadamente seis meses, generaron en el país, especialmente en el Valle del Cauca, afectaciones sin precedentes y muchísimos más fuertes incluso, que los producidos por la pandemia en 2020.
A esta conclusión han llegado diferentes voceros gremiales, como Lina Sinisterra, gerente de la Andi, seccional Valle del Cauca, quien señala que, según cálculos del Ministerio de Hacienda, el Paro Nacional le costó a la economía colombiana entre 6 y 10,8 billones de pesos. En el caso del Valle del Cauca, la Cámara de Comercio de Cali estimó que se perdieron unos cien mil millones de pesos diarios. Las pérdidas representaron más o menos el 4 % del PIB de nuestro departamento.
Agregó la ejecutiva que, según la Encuesta Ritmo Empresarial, ERE, realizada por las Cámaras de Comercio de Valle del Cauca y del Cauca, 81,8 % de las empresas reportó que el valor de ventas en abril de 2021 disminuyó frente al mes anterior.
Además, en el mes de mayo, entre las empresas encuestadas, 27 % indicó que no estaban operando; 63 % reportó que operaban parcialmente y solo un 10 % operó de manera normal.
Por sectores económicos, complementa Sinisterra, la construcción
(39,7 %) y la industria (36,4 %) fueron los que tuvieron la mayor cantidad de empresas que no se encontraban operando. En cuanto al empleo, el 41,8 % de las empresas del Valle del Cauca y del Cauca indicó que disminuyó el número de trabajadores en abril, en consecuencia, se evidenció un preocupante aumento de la tasa de desempleo que hoy sigue alta.
Para la empresaria Yitcy Becerra Díaz, socia fundadora de Isikene Inteligencia de Negocios S.A.S., empresa afiliada a Acopi, el Paro Nacional produjo uno de los impactos económicos más grandes que ha tenido el sector de la micro, pequeña y mediana empresa, que tuvo pérdidas cercanas a los seis billones de pesos, cifra que para esta profesional puede ser aún más elevada, pues dice, no se han cuantificado otro tipo de costos, ya que solo se enfocaron “en los temas de brazos caídos en todo el staff laboral, el comercial, de producción, de bodegaje, de inventarios de materias primas”. Pero, manifiesta, luego vinieron situaciones jurídicas por incumplimientos de contratos comerciales que fueron delicadas y que aún algunas empresas están padeciendo.
Evoca Becerra que como consecuencia del Paro y los bloqueos muchas empresas debieron cerrar, enviar a sus empleados a casa, se vieron abocadas a un sinfín de situaciones por temas de seguridad, de destrucción de sus bienes privados, de sus bodegas, por robos, saqueos. Fue delicado también el tema de movilidad de los empleados, que fueron víctimas de peajes ilegales, de sobornos, de extorsiones, eso hizo que no pudieran llegar a sus puestos de trabajo, lo que provocó que se detuviera la economía.
De acuerdo con un informe del Dane, destaca Becerra, en la época del Paro Nacional, “el 55 % del tejido productivo de nuestro departamento se detuvo, eso es para nosotros de lo más impactante” en este hecho, precisa.
Octavio de Jesús Quintero, presidente de la Junta Directiva de Fenalco- Valle afirma que el del comercio fue uno de los sectores más afectados durante el Paro Nacional y los bloqueos.
Durante el Paro, en Buenaventura se represaron más de 350.000 toneladas de alimento para aves que debieron llegar a las plantas de alimento balanceado.
Según una encuesta que hizo la entidad con los empresarios de Cali, el
95 % reportó que sus ventas disminuyeron; el 84 % cerró sus establecimientos, ya sea total o parcialmente; el 72 % presentó problemas de movilidad; el 61 % se vio afectado por inseguridad, vandalismo y saqueos.
“Las pérdidas fueron millonarias para el sector comercio de Cali. Se estiman en cerca de dos billones de pesos”, expresa Quintero, quien agrega que en la capital del Valle 170 establecimientos comerciales sufrieron algún tipo de vandalismo o saqueo, por ejemplo, 93 estaciones de gasolina tuvieron afectaciones en cerca de cien mil millones de pesos y hubo 1050 empleos perdidos en ese sector. Además, 75 oficinas bancarias fueron vandalizadas.
Por otro lado, Fenavi, el gremio de los avicultores, uno de los más golpeados del país, reportó que el Paro Nacional y los bloqueos dejaron como resultado en la avicultura colombiana más de catorce millones de aves muertas; más de 120 millones de aves en riesgo de muerte por falta de alimentos, 30.000 toneladas de pollo y 180 millones de huevos represados que no llegaron a los puntos de distribución. “Más de doce millones de colombianos tuvieron dificultades para abastecerse de alimentos. En lo que respecta al pollo y al huevo, hubo ciudades con el 40 % y 30 % de desabastecimiento, respectivamente”, señaló Fenavi.
Soplan vientos esperanzadores
Han sido diferentes las estrategias que han diseñado los sectores económicos para reactivarse e ir mejorando su panorama después de los estragos que les dejaron las tormentas del Paro Nacional y de los bloqueos. Hoy soplan vientos optimistas para fin de año.
Fenalco Valle, por ejemplo, está liderando la campaña ‘Un empleo más, todos sumamos’, con la que invita a los empresarios de todos los sectores a que brinden nuevas plazas laborales a los jóvenes aprovechando la medida del Gobierno que reconoce a los empleadores un aporte mensual del 25 % del salario mínimo de cada nuevo empleo generado. Esta es una manera de reactivar la economía, expresa Quintero Gómez, porque con estos nuevos empleos se generan más ingresos y mayor consumo, que entran a aportar a la dinámica de la economía.
Los comerciantes también enfilaron baterías para aprovechar las fechas comerciales, los días sin IVA y las temporadas de descuentos de fin de año como estrategia de reactivación.
“Las expectativas para el cierre del 2021 son muy alentadoras. El 72 % de los empresarios tienen expectativas positivas frente al desempeño de su empresa este año, sobre todo, porque las fechas comerciales, la temporada de fin de año y los días sin IVA, el circulante de dinero durante este último semestre, generan una dinámica muy interesante. Las primas, las bonificaciones, el ingreso de remesas del exterior y el ahorro de los compradores para esta temporada, permiten tener una época con una importante dinámica comercial y promete un mejor cierre que en el 2020”, indica Quintero.
En lo corrido de 2021 hemos podido recuperar mucho de lo perdido, señala la gerente de la Andi, seccional Valle del Cauca, Lina Sinisterra. “Podemos decir que por fin estamos avistando la primavera al final de un prolongado invierno. Incluso el FMI modificó el pronóstico del país y lo subió a 7,6 %, no es el único que sigue apostando por un resultado que, de cumplirse, sería histórico, y el Valle, por supuesto, sería protagonista”.
La avicultura es el sector más formal de la agroindustria nacional. Genera más de 350.000 empleos, la mayoría en el campo. Valle lidera la producción de huevos con el 31 %.
No ha sido fácil para el Valle
Carlos Andrés Pérez, director económico y de competitividad de la Cámara de Comercio de Cali, explica que se pueden identificar grandes secuelas del paro y los bloqueos.
En primer lugar, a la fecha el Valle del Cauca reporta un menor dinamismo en su actividad económica siendo, entre los principales departamentos del país, el que mejor crecimiento en las ventas del comercio minorista y producción industrial reporta.
Mientras Antioquia, Santander, Bogotá y Atlántico registran tasas de crecimiento del comercio minorista al mes de agosto superiores al 20% frente al mismo periodo del año anterior, el registro para el Valle languidece con apenas 12,3%.
En el caso de la producción industrial el rezago es peor. Los principales departamentos registran tasas de crecimiento superiores al 20%, pero el Valle apenas 3% al mes de agosto.
Por buen camino
- Según la Encuesta Ritmo Empresarial, ERE, realizada en agosto, las perspectivas de venta de las empresas afiliadas a la Cámara de Comercio de Cali para la segunda mitad de 2021 son positivas.
- El balance entre la proporción de empresas que esperan aumentar el valor de sus ventas y el porcentaje que espera disminuciones para ese periodo fueron de 49,9 % superior al reportado para el segundo semestre de 2020 (13,9 %) y 2019 (46,2%).
- Los sectores de construcción (60,3 %), servicio (51,9 %) e industria (49,3 %) son los más optimistas.