La diva de Colombia Amparo Grisales, una de las actrices más reconocidas del país y hoy juez de talentos musicales, ha dejado huella en el espectáculo, no solo por su belleza, sino por el carácter fuerte que le ha permitido mostrarse en el mundo de la farándula.
Para sus seguidores, ella es poseedora de la fórmula de la eterna juventud, pero hay quienes desconocen que detrás de su piel, a la que pocos imitadores logran erizar en el reality de Caracol ‘Yo me llamo’, hay rutinas y secretos de belleza que le ayudan a vivir con la mejor actitud.
Todos los días en la mañana, Amparo busca su conexión con los ángeles y asiste a una cita infaltable con su amigo fiel y ángel favorito, Tobías, en su espacio de reflexión y conexión espiritual personal. Dice que conecta tanto su cuerpo como su alma, y admite que esto la lleva a sentirse en paz y evolucionar cada día.
Son muchas las críticas que recibe la diva de Colombia, a la par con la admiración de otros, por su insistencia en mantenerse con un estado físico saludable, sin importar los años. Para ella, hasta los comentarios destructivos son pruebas de fortaleza y le ayudan a formar el carácter.
Dice que lo más importante es no perder la paz, “son más lo que me quieren y me dicen cosas lindas, que los que llegan desde el odio a juzgar, criticar y a insultar, a veces llegan desde el odio, la envidia y como yo esos sentimientos no los tengo, pues no me dejo juzgar”.
¿Cómo se siente de volver a la presencialidad con ‘Yo me llamo’?
Estoy muy emocionada y muy agradecida con Dios, con el universo, porque estos son regalos de vida. Ser sobrevivientes de un naufragio global como el que vivimos es para darle gracias a Dios y tener salud, creo que ya la magia viene sola. Por eso yo los invito a todos a que se vacunen, porque gracias a la gente que se ha vacunado es que podemos seguir las actividades con más libertad, pero cuidándonos.
A nosotros, por ejemplo, nos hacen test cada semana en ‘Yo me llamo,’ nos cuidan mucho y también hay que cuidar el entorno. Las personas que no se vacunan demuestran falta de solidaridad con la humanidad, porque esto es una pandemia y nadie ha probado las vacunas para que se crean esas historias tan absurdas, por eso promuevo que todos se vacunen.
Nos han vacunado desde niños, esta es una manera de cuidarnos. Aunque la pandemia no ha pasado del todo, volver a reunirse y compartir estos espacios es respiro y volver a sentarnos en este programa que yo amo tanto, porque fui embrión de este que ya tiene ocho temporadas, para mí es lo máximo.
¿Ha visto mucho talento en esta nueva temporada?
Así es, tenemos más talento, personajes únicos. Nosotros decíamos “¿será que sí hay gente para presentarse después de ocho temporadas?”, y sí, podemos decir que esta es la mejor temporada, tenemos todos los géneros, todas las épocas, tenemos gente que en el escenario resucita con un compromiso y con un respeto maravilloso.
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Es una tarea dura para el jurado, porque hay tanta gente tan maravillosa que no sé qué vamos a hacer, pero bueno, para eso tenemos 1200 millones de pesos en premios, van a salir muchos con el sueño cumplido.
Además, los que salen de ‘Yo me llamo’ siguen trabajando y siguen parándose en los escenarios, y ver a todos cumpliendo esas metas que se han propuesto es lo que me hace muy feliz.
¿Qué está buscando esta vez en el doble perfecto?
En esta y en todas las temporadas mis códigos son los mismos, yo busco que me hagan sentir, que me hagan erizar de ver el compromiso que tienen, el respeto por su artista favorito y con la entrega que en esta temporada han llegado va a ser muy difícil.
Es impresionante, no sé si es por la pandemia que dijeron “vamos a prepararnos para ‘Yo me llamo’”, o qué fue, pero llegaron con un profesionalismo que uno dice “no lo puedo creer”, estoy muy emocionada.
Usted ha sido blanco de muchos imitadores en Colombia, pero pareciera que no le gusta que la imiten...
A mí realmente no me gusta que me imiten porque no lo hacen bien, a la única que se lo paso más o menos es a María Auxilio, pero tampoco logra mi voz. Ella de repente me gusta porque se caracteriza, se rasga el ojo, se copia de los movimientos de ‘Yo me llamo’, pero la voz mía no es fácil de imitar, tengo una voz que por más que quieran no pueden con ella, tengo un timbre de voz que no es fácil de imitar.
Tampoco me gusta que se burlen porque lo lindo de ‘Yo me llamo’ es que no es parodia, no le faltan el respeto a nadie, y creo que no tienen por qué imitarme, el programa es para imitar cantantes, no actrices, ni personajes. Que me imiten a mí no es lo que debe ser.
Se casó de manera ficticia con Yeison Jiménez, su compañero de jurado, para las promociones del programa, ¿cuál es la mejor anécdota de dicho episodio?
La anécdota es el peso del vestido, hermoso, de Pronovias, pero yo te digo una cosa, si desde que te casas el matrimonio pesa como me pesó ese vestido, mejor no te cases. O bueno, sí me caso en la playa con un vestido que me vuele con la brisa, que sea muy liviano, transparente, hermoso. Pero este, ustedes no saben lo que pesaba el vestido, eso sí, muy divino. Me dio mucha risa porque hubo gente que pensó que sí me iba a casar.
Me llamaron unos amigos del exterior y me decían que “cómo no las había invitado”, que “cómo no les había contado que me iba a casar”, que “¿con quién me iba a casar?”, todo fue muy chistoso. Hasta hubo quienes empezaron a criticar que “¿cómo me iba a casar con un vestido blanco?” y todas esas cosas, pero nada, me caso con un vestido blanco porque quiero. Porque quiero, puedo y me queda divino.
Contra corriente
La diva de Colombia, así como es amada por muchos, también es criticada por otros. Durante su carrera artística se ha visto involucrada en desacuerdos bastante polémicos.
‘Yo me Llamo’ inició su octava temporada y los comentarios de Grisales ya prendieron la hoguera, pues después de la eliminación de una concursante trans, por no cumplir con las especificaciones del concurso, los jurados realizaron comentarios sobre la identidad sexual de la participante, y un escrutinio con lupa de su cuerpo, lo cual ha enfurecido a muchos.
Durante el año 2018 la actriz Alejandra Borrero y Amparo fueron invitadas como panelistas a un conversatorio en el cual se habló de temas como feminismo, violencia sexual, piropos y hombres.
En diversas ocasiones el conversatorio se puso tenso por la gigantesca brecha entre las opiniones de las dos mujeres, pues Borrero ha demostrado ser una defensora del feminismo.
Las grandes diferencias de pensamiento llevaron a Borrero a retirarse del escenario, pues no lograron llegar a un acuerdo o, por lo menos, a entenderse entre ellas.
Otro de los ‘encontrones’ de la jurado de ‘Yo me Llamo’ fue con la modelo y presentadora Jéssica Cediel en 2017, pues durante la emisión del programa ‘Yo Me Llamo’ los televidentes evidenciaron las diferencias entre la jurado y la presentadora.
El desacuerdo se dio por un corte de cabello: la ‘diva’, le sugirió a un participante que imitaba a Maluma que se cortara el pelo. Sin embargo, Cediel dio su opinión contraria a la de Grisales y eso desencadenó un desacuerdo en televisión que, aunque no pasó a mayores, sigue siendo clave del rating.
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Al reality
Amparo es una mujer a la que los años no parecen afectar como a otros, lo cual no deja de ser objeto de sorpresa y gracia, pero sobre todo admiración.
Hace poco, el 19 de septiembre, celebró otro año de vida y de reconocimiento en la farándula colombiana.
‘Amparito’, como la llaman algunos, participó en la pantalla chica del país en telenovelas colombianas como ‘En cuerpo ajeno’, del guionista Julio Jiménez; en la novela ‘Dos mujeres’, donde compartió set con María Cecilia Botero y Carlos Mata. Y cómo olvidar ‘La sombra del deseo’, con el mexicano Ómar Fierro.
Por la misma época la actriz incursionó en el mundo de la música, y lanzó un disco en el año 1994.
Durante la década del 2000 inició en un camino que la ha hecho resaltar más entre los colombianos, pues empezó a participar como invitada en los realities: ‘Protagonistas de novela 3: El juicio final’ y ‘Gran hermano’, en 2004.
Su personalidad directa y sin reservas le permitió ganarse un puesto en la farándula colombiana. En el año 2007 obtuvo el papel protagónico en la novela Madre Luna, escrita especialmente para ella por el escritor colombiano Julio Jiménez. En el año 2009 marcó tendencia con su papel de Lucrecia en la serie Las Muñecas de la Mafia, una de las más vistas en la televisión colombiana durante ese año.
En diciembre de 2010, Amparo Grisales se destacó como embajadora de buena voluntad por la ONU, representando a la Institución Intergubernamental para la utilización de la microalga spirulina para corregir la malnutrición.
Y desde el año 2011, la actriz se ha ganado el amor y disgusto de todos los colombianos por su particular actitud como jurado en el concurso de talento ‘Yo me Llamo’, el cual se encuentra en su octava temporada.