El deterioro en la malla vial, el mal funcionamiento de los semáforos, el no respeto a las normas de tránsito, la falta de infraestructura y la poca presencia de agentes en las calles, son algunas de las causas a las que los ciudadanos atribuyen los trancones que se forman en varios lugares de la capital del Valle.

De acuerdo con la subsecretaria de Movilidad Sostenible y Seguridad Vial de Cali, María del Mar Solanilla, se tienen identificados varios puntos críticos de circulación en la ciudad, debido a los altos volúmenes de vehículos en las horas de máxima demanda.

A ello se suma que son zonas en las que, por razones de trabajo o de estudio, las personas se desplazan con mayor frecuencia. Por ejemplo, al día en el Centro se mueven aproximadamente 3337 vehículos; por la terminal de transporte, en la intersección entre la Calle 25 con Avenida 2 Norte, pasan más de 9000 autos, y en el Sur el caos es frecuente, en la Calle 16 y la Carrera 100, por donde transitan en promedio 7400 vehículos.

No obstante, la funcionaria aclara que, a diferencia de años atrás, en la actualidad no hay unos picos de tráfico marcados sino que el comportamiento de congestión empieza muy temprano, sobre las seis de la mañana, y se mantiene así durante todo el día.

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​En un sondeo realizado por El País, a través de sus redes sociales, usuarios como Valentina Bueno, aseguraron que “la movilidad en Cali sigue siendo un gran desafío para las autoridades, los conductores y los mismos pasajeros”, quienes deben ser pacientes para cumplir con sus respectivos recorridos.

La falta de vías alternas que compensen la demanda del nuevo parque automotor y el crecimiento de la ciudad, hace parte de las principales observaciones de los caleños.

Yazmín Galindo, a través de Instagram, asegura que el problema se complica porque “las calles no están demarcadas, las líneas de señalización se borraron, faltan señales de tránsito, hay huecos en toda la ciudad y la Alcaldía no promueve el amor por Cali, que se refleja en la falta de cultura para manejar carros y motos”.

Esteban Rodríguez opina que para mejorar la movilidad es necesario promover una inteligencia vial y el compromiso de parte de los conductores, tanto de carros particulares, como de motocicletas y vehículos del servicio público.

Otros usuarios recomiendan ejercer más control debido a que, desde su perspectiva, la presencia de las autoridades de tránsito sigue siendo muy baja.

Al respecto, el concejal Roberto Rodríguez cuestiona que “los agentes de tránsito hoy no prestan un servicio eficiente porque no están en número adecuado y no tienen garantías para su labor”, al recordar que han sido reiterativas las agresiones en su contra por hechos de intolerancia, en medio de las labores de regulación que hacen en la ciudad. En lo corrido del presente año se han registrado alrededor de 10 hechos de este tipo.

Por su parte, Harvy Mosquera, primer vicepresidente del Concejo de Cali, cree que a lo anterior se suma la falta de semaforización inteligente y de ‘ola verde’, es decir, de la coordinación entre los semáforos que permitan el flujo continuo del tráfico sobre varias intersecciones en una misma dirección.

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Otros puntos críticos

La Calle Quinta es sin duda otro de los ‘dolores de cabeza’ para los conductores y pasajeros, debido al alto flujo vehicular y a situaciones que llevan a que los trancones sean recurrentes. Por ejemplo, “los taxistas, parqueados en Cosmocentro, bloquean el bicicarril y reducen la calle a un solo carril, justo en el semáforo”, denuncia Viviana Cuartas, en su comentario en el Instagram de El País Cali.

También, en la misma red, se mencionan problemas para transitar por la Calle 21 Norte, desde la Primera hasta la Avenida Sexta , y similar panorama se vive en la Avenida Roosevelt.

Más hacia el Sur, son habituales los trancones en la carrera 83 entre la calle 16 y la calle 14; se suman además las quejas por los trancones que se hacen en cercanías con la Universidad Autónoma. También se ha convertido en una odisea pasar el ‘taco de carros’ que se forma en los semáforos de Univalle, Ciudad Jardín y la carrera 80.

Asimismo, ha empeorado la movilidad en la Autopista Simón Bolívar, no solo por las obras de la Troncal Oriental del MÍO que se adelantan en el sector, sino porque en tramos como Puerto Rellena, tras el paro nacional del año anterior, quedó inservible la semaforización. Esto ha llevado a que personas de civil asuman el papel de autoridades de tránsito, hecho que para ciudadanas como Alba Roldán son “una locura”.

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Para mejorar la movilidad en Cali, las autoridades han diseñado estrategias que ya fueron anunciadas, pero que todavía no se ponen en acción.

El día sin carro y sin moto, previsto para el jueves 22 de septiembre, es una de las medidas con las que se espera disminuir el caos vial que se padece en la capital del Valle. Esta congestión no solo se genera por los vehículos que hacen parte del parque automotor de la ciudad, sino de aquellos que llegan a Cali de manera esporádica. Es de recordar que, inicialmente se tenía programado el primer día sin carro del año en Cali para este sábado 23 de julio, no obstante, la fecha se canceló y está pendiente definirse un nuevo día antes de cerrar el 2022.

Otra apuesta para mejorar la movilidad es el cambio en el pico y placa que, según dio a conocer el martes el secretario William Vallejo, se extendería desde las 6:00 de la mañana hasta las 8:00 de la noche, de manera continua de lunes a viernes, para vehículos particulares. El decreto del pico y placa está disponible en la página de la Alcaldía de Cali para comentarios.