Crece debate por referendo que busca tumbar la JEP, estos son los puntos clave

Desde la semana pasada el comité de ciudadanos que lidera un referendo para revocar la Jurisdicción Especial de Paz (JEP) y reformar las altas cortes empezó la recolección de firmas para avanzar en su llamado a las urnas.

El grupo ‘Libertad y Orden’ tiene como una de sus cabezas visibles al periodista Herbin Hoyos, quien ha sido duro crítico del Acuerdo de Paz entre la extinta guerrilla de las Farc y el Estado. Su iniciativa ya ha recibido el apoyo público de miembros del Centro Democrático, el partido del presidente Iván Duque.

El senador y expresidente Álvaro Uribe fue uno de los primeros en dar su espaldarazo al referendo, alegando que existen altos niveles de impunidad en la justicia colombiana, y trajo como ejemplo el caso de las objeciones a la Ley Estatutaria de la JEP.

Otros miembros del Centro Democrático sumaron su apoyo al referendo que revocaría la JEP, por lo que la pregunta que queda en el aire es si el Jefe de Estado le caminará a esta propuesta o se mantendrá al margen.

Para el analista político Ancízar Marroquín, a Duque no le quedan muchas alternativas, por lo que ve probable que respalde el referendo, pero que el compromiso público sea asumido por su partido, el Centro Democrático.

“No sabemos, dice Marroquín, si esta iniciativa fue espontánea de Herbin Hoyos y un grupo de ciudadanos y que luego el Centro Democrático apoyó, o si ocurrió lo contrario y existía un trabajo previo, organizado desde el propio partido. Lo cierto es que en ambos casos termina por beneficiar a Duque y Uribe porque si el referendo avanza y se aprueba, ganan, porque ellos quieren modificar la JEP y esa fue una promesa de campaña. Pero si se cae y no pasa nada, no se ven afectados porque la cabeza visible es Hoyos”.

Sin embargo, Marroquín está convencido de que el hecho de que prospere una iniciativa contra la JEP es más un golpe de suerte (bien aprovechado) que otra cosa.

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“Hay varios temas que ayudaron: El de las objeciones, la llegada de ‘Jesús Santrich’ al Congreso, que ni ‘Iván Márquez’ ni ‘El Paisa’ están haciendo presencia en la JEP, todo eso permitió que haya ambiente para un referendo porque se volvieron temas de coyuntura, calientes. Y ese ambiente no puede llegar en mejor momento para Duque y su partido porque se acercan las elecciones regionales y el Centro Democrático necesita una bandera que lo lleve al triunfo en las urnas”.

Una postura similar tiene el abogado Fernando Gómez, quien cree que Duque y su partido llegan muy debilitados a las elecciones de alcaldes y gobernadores de octubre próximo, lo que lo obliga a estar de lado del referendo que busca revocar la JEP.

“Esa fue una de sus banderas de campaña, la llamada paz sin impunidad, pero lo cierto es que se le ha hecho agua. No ha podido avanzar y esta coyuntura es una forma de darle aire a su Presidencia y lograr buenos números en las elecciones regionales. Lo cierto es que en el Centro Democrático no tienen muchos resultados qué mostrar y al volver a tomar estas banderas de una paz mejor se reencauchan, como ocurrió con la campaña del No, en el referendo de 2016”, dijo Gómez.

Por otro lado, Juan Manuel Charry, experto constitucionalista, dice que no cree que el Presidente vaya a acompañar la iniciativa.

“Duque ha sido muy claro en cuanto a lo que quiere con la implementación del Acuerdo de Paz. Él ya aceptó que ese acuerdo existe y que debe sacarse adelante y tiene una idea clara de qué tipo de implementación hay que llevar a cabo. De allí que haya devuelto el texto de la ley con las seis objeciones, todas muy puntuales. Creo que él seguirá pegado a la institucionalidad, trabajando desde el Ejecutivo y de la mano con el Congreso”.

Charry dice que lo complejo de la situación de Duque es que no tiene mayorías en el Congreso y que planteó mal su relación con los legisladores al inicio de su gobierno: “Siento que en la Casa de Nariño se dejaron presionar por la oposición y se intentó formar un gabinete muy técnico que no supo relacionarse bien con el Congreso. Duque debe revisar eso y mejorar su relación con senadores y representantes para poder tener mayor gobernabilidad y así hacer los ajustes que él considera”.

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Por el momento, desde Europa donde adelanta una visita oficial, el Jefe de Estado dijo que “las iniciativas que son ciudadanas se respetan, y como tal son procesos que tendrán que surtirse conforme lo establece la Constitución”.

El 14 de diciembre será la fecha límite para recoger las firmas equivalentes al 5 % de las 37.061.658 personas habilitadas para votar, según la Registraduría.

El último referendo en el país lo promovió el expresidente Álvaro Uribe y buscaba, entre otras cosas, que los colombianos avalaran la reelección.

Una vez la Registraduría revise la recolección de firmas, la propuesta pasa al Congreso de la República, como un proyecto de ley se deben realizar cuatro debates, dos plenarias y dos comisiones en Senado y Cámara de Representantes.

Allí se le deben hacer las modificaciones que correspondan al proyecto de ley y finalmente (si así lo estima conveniente) promulgar una ley que convoque al pueblo a un referendo constitucional.

Esa ley tendrá un control en la Corte Constitucional en caso de ser aprobada y solo así, posteriormente, se hará la convocatoria a las elecciones.

¿Para qué es el referendo que está convocando el periodista Herbin Hoyos y el grupo significativo de ciudadanos ‘Libertad y Orden’?

La iniciativa pretende que los colombianos, a través de una votación, decidan la derogación de la Jurisdicción Especial de Paz (JEP). También revocar los actuales magistrados de las diferentes cortes y al Congreso.
El pasado jueves la Registraduría Nacional del Estado Civil mediante la resolución 5824 del 7 de junio de 2019 informó que el movimiento Libertad y Orden había cumplido con todos los requisitos para constituirse como comité promotor del referendo, el cual está integrado por nueve personas. Aceptó la solicitud y dio vía libre para que se recauden las firmas.

¿Cuántas firmas se necesitan para que se apruebe la convocatoria al referendo?

En total son 1.853.083 firmas válidas que deben ser entregadas a la Registraduría para poder aprobar la iniciativa. Sin embargo, Herbin Hoyos asegura que buscará recoger un total de diez millones de rúbricas.

¿Cuánto tiempo tiene el movimiento ciudadano para recaudar el total de firmas?

Son seis meses, contados a partir del momento en que la Registraduría dio la aprobación. Se debe usar un formato que tiene cuatro casillas: fecha en la que se consigna la firma, nombres, apellidos y cédula (de quien firma). Este formato debe ser diligenciado de manera legible por cada una de las personas que haga su respaldo al referendo.

Después de que se recojan las firmas, ¿cuál es el paso a seguir?

La Registraduría tendrá un plazo de 45 días calendario para certificar el número de respaldos válidos y nulos y si se ha cumplido con los requisitos constitucionales y legales exigidos. El referendo constitucional debe tener un número de apoyos equivalente al 5 % del censo electoral. El referendo deberá realizarse dentro de los seis meses siguientes a la presentación de la solicitud y la votación no podrá coincidir con ningún acto electoral o sumarse con otro referendo para el mismo día.