“No es incentivar el consumo, es pelear con el narcotráfico; quitarle el combustible al mercado ilegal, abaratar costos y permitir que se adquiera en tiendas vigiladas por el Estado, la Policía y la Fiscalía”.
De esta manera, Alejandro Ocampo, representante a la Cámara por el Pacto Histórico y uno de los ponentes de la iniciativa, defendió la regulación del cannabis para uso recreativo que fue aprobada en segundo debate por la plenaria de la Cámara el pasado martes en la noche.
De manera específica, el proyecto de ley busca eliminar las restricciones para el uso recreativo de la marihuana en mayores de 18 años y precisa que protegerá a los niños restringiendo su manipulación en entornos escolares.
Le puede interesar: Los puntos más polémicos que tiene la reforma a la Ley de Orden Público
“En Colombia se permite fumar y sembrar marihuana, pero no se puede adquirir de forma legal, y esta es la puerta para que se pueda hacer”, explicó el congresista.
Sin embargo, el representante a la Cámara por el Centro Democrático Christian Garcés rechazó el avance de la iniciativa legislativa.
“La legalización del cannabis promoverá el aumento del consumo de drogas en nuestro país; por un lado, se aumentará el consumo, no solo en mayores de 18 años, sino también en menores de edad; por el otro lado, se incrementará el consumo de otras drogas más duras, como la cocaína o la heroína”, aseguró.
Al respecto, Ocampo aclara que el proyecto no busca incentivar el consumo, sino “regular y hacer control. Por ejemplo, hoy un niño puede conseguir marihuana en cualquier parte; lo que aprobamos el martes solo permitiría al Gobierno hacer que se adquiera legalmente”.
Le puede interesar: 'Iván Márquez' está "consciente" y "lúcido", según reveló el comisionado de Paz, Danilo Rueda
“Lo que queremos implementar en el futuro el senador Gustavo Bolívar y yo es que, quien quiera consumir cannabis, lo adquiera en un sitio legal que tenga pancartas con los peligros de consumir. Además no se podrá promocionar”, añadió el ponente.
A su vez, Garcés reitera que “somos un país que no tiene capacidad de control a la reglamentación. Por eso es mejor prohibir; por eso en naciones como Alemania, Francia y España, que tienen grandes recursos para seguridad y salud pública, no legalizan”.
De su lado, el exrepresentante a la Cámara Juan Fernando Reyes Kuri, quien fue autor y ponente de la iniciativa en el cuatrienio pasado, considera que “si de lo que se trata es de proteger a quienes consumen, se debería prohibir el alcohol y el tabaco. La manera de combatir lo que puede hacerle daño al ser humano no es prohibiendo, es regulando y dando la información adecuada con evidencias científica”.
No obstante, Garcés añade “que en países como Canadá o Uruguay, donde se legalizó completamente, el Estado solo logra manejar entre el 25 % y el 30% del mercado; es decir que los narcotraficantes seguirán actuando”.
Y agrega que “esperamos que en los seis debates que faltan se hunda este proyecto de acto legislativo. De lo contrario, tocará trabajar en la reglamentación para evitar que nuestros jóvenes caigan en las drogas”.
De su lado, Ocampo anota que, de aprobarse el proyecto de ley, “se obligaría al Estado a prestar todos los servicios de salud en atención y prevención”.
Cambiar la política
Reyes Kuri plantea que “el país debe avanzar en cambiar la política prohibicionista, que no ha dado resultados y ha sido un total fracaso”.
En su opinión, se debe construir una política que aproveche el desarrollo económico que genera la marihuana en el mundo.
Le puede interesar: Alcaldes de ciudades capitales cuestionan a los gobernadores por el manejo de regalías
“No es posible que Colombia tenga una historia y un potencial en la industria del cannabis y no seamos capaces de aprovecharlas”, indicó.
Según el ponente del proyecto que fue respaldado con 105 votos a favor y 33 en contra en la plenaria del pasado martes, una encuesta del Departamento Nacional de Planeación evidenció que casi cinco millones de personas en Colombia son consumidoras de marihuana y que alrededor de doce millones la han probado alguna vez.
También expuso que, después de hacerle pruebas a una planta de cannabis, encontraron “fungicidas, glifosato, herbicidas, metales pesados y desechos de animales”.
En ese sentido, Ocampo aseguró que “0 le damos a la gente la seguridad de un buen producto, de adquirirla legalmente, y comenzamos una nueva política de drogas donde quebremos el narcotráfico, o el país no va a avanzar”.