El plan para dotar a Cali de una torre única de comunicaciones

En la foto principal de este artículo, Cristo Rey, la imponente estatua de 26 metros que abraza a Cali desde la distancia, se ve opacada por antenas y cables. Visto desde esa perspectiva, una de las figuras más representativas de la ciudad parece como aprisionada en una interminable telaraña que se extiende sobre el cielo.

Alejandro López, guía turístico y residente del sector desde hace treinta años, asegura que, paulatinamente, los alrededores de este cerro tutelar se han ido llenando de torres de telecomunicaciones que afectan la vista panorámica.

La instalación de estos artefactos, en su mayoría de forma irreglamentaria, según el Departamento de Planeación Municipal, no solo va en detrimento de la vista del paisaje caleño, sino también del patrimonio ambiental y la salud de las personas que viven o trabajan en las cercanías.

En el Cerro de las Tres Cruces, otro punto emblemático de Cali ‘invadido’ por estas enormes estructuras, algunos vendedores del sector aseguran que se han sentido perjudicados por la radiación que producen estos elementos.

Ese es el caso de Jessica López, quien desde los cinco años (tiene treinta y uno) ayuda a sus padres con el trabajo en un puesto llamado ‘Jugos Vivi’, donde le venden bebidas naturales y tortas caseras a personas que suben a hacer ejercicio.

—Sufría migraña y, cuando llegaba a la casa le pasaba corriente a mis familiares cuando entraba en contacto con ellos— cuenta Jessica, quien sostiene una ‘piedra de orgonita’, pieza hecha de metales y cuarzos que le recomendaron utilizar para alivianar sus malestares.

De acuerdo con la Uaespm (Unidad Administrativa Especial de Servicios Públicos Municipales), en Cali hay reportadas 686 antenas. De esta cifra, 49 están en los cerros tutelares: 20 en Cristo Rey y 29 en las Tres Cruces.

A la voz de la comunidad (que en su mayoría piden el desmonte de estas estructuras), se le sumó esta semana el fallo del juzgado Trece Administrativo del Circuito de Cali, que después de una demanda interpuesta por la Procuraduría Judicial, Ambiental y Agraria del Valle, le ordenó a la Alcaldía presentar, en noventa días, un plan que permita reubicar las antenas.

Específicamente, la sentencia dice que “se debe dar cumplimiento a lo ordenado en los artículos 81, 82 del Acuerdo Municipal 0373 de 2014 (Plan de Ordenamiento Territorial, POT), en el sentido de ejecutar todas las actividades tendientes a dar continuidad al Plan Maestro de Servicios Públicos y TIC, con la finalidad de reubicar las antenas de comunicación que existen en los cerros tutelares de la ciudad, a saber: el Cerro de la Bandera, Las Tres Cruces y Cristo Rey”.

Frente a este panorama, ¿cuál podría ser una solución viable?

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Víctor Martínez, director de Corpocerros, organización fundada para proteger los cerros tutelares de Cali, indicó que se han realizado estudios para crear una única torre de telecomunicaciones en cada cerro, sin embargo, piensa que las diferentes administraciones municipales “no han tenido la voluntad de hacerlo”.

De acuerdo con Martínez, actualmente hay estructuras que se han construido en esas zonas de manera anárquica y arbitraria, por lo que cree que la solución sería implementar ese modelo que “se ha utilizado en ciudades como Barcelona, España; Toronto, Canadá”.
No obstante, remover las estructuras no parece sencillo, y más aún sí se tiene en cuenta que la mayoría de estas se encuentran ubicadas en propiedad privada.

En el caso del Cerro de Las Tres Cruces, diferentes antenas se erigen dentro de las dos hectáreas de tierra que tiene la Arquidiócesis de Cali, que ha alquilado este espacio a empresas de telecomunicaciones.

De acuerdo con el padre William Ramos, director jurídico de la Arquidiócesis, el fallo del juzgado Trece Administrativo “no tendría ninguna implicación ya que lo que se percibe por cánones de arrendamiento por el predio se reinvierte en el mantenimiento del mismo y en el pago de impuestos respectivos. Los espacios dados en arrendamiento son muy mínimos, gran parte del predio está dado, en calidad de comodato, a la Policía Nacional y otras entidades.

También expresó que: “la Arquidiócesis ve con buenos ojos y desea acompañar, en cuanto le sea posible, la recuperación visual, de la naturaleza y del medio ambiente en los cerros tutelares de Cali”.

Actualmente, esta organización dice tener dos contratos de arrendamiento, uno por un valor de $829.904 mensuales y otro que tiene un canon de $2.865.331, por lo que la Arquidiócesis recibe $3.685.235 mensuales.

Por otro lado, Víctor Martínez denuncia que quienes han puesto antenas de manera irregular, sobre todo de internet, “amenazan con dejar incomunicado al suroccidente colombiano”.

En Cristo Rey, además de las antenas de diferentes medios de comunicación, hay estructuras que le brindan internet a la comunidad.
Adriana Carrillo, dueña de una torre de internet desde hace diez años, afirma que tiene contrato con la Corporación para la Recreación Popular del Valle, dueña de los terrenos del sector, por lo que le parece arbitraria la decisión de reubicar las antenas.

“Nosotros le damos señal a la parte rural donde el cableado no llega, hoy en día las comunicaciones no son un lujo, sino una necesidad. Si vamos a eso, en la ciudad como tal también hay muchas torres, por lo que esa decisión me parece muy arbitraria”, argumentó.

Según lo explicado por la Arquidiócesis a El País, el canon de arrendamiento por instalar antenas es destinado para el mantenimiento de los predios.

Roy Alejandro Barreras, director del Departamento Administrativo de Planeación Municipal, aseguró que se están, precisamente, haciendo las gestiones necesarias para avanzar en la propuesta de la torre única de telecomunicaciones para cada cerro.

“Hemos venido avanzando, incluimos ese proyecto en el Plan de Desarrollo ‘Unidos por la Vida’ y esperamos realizar un convenio con Emcali para ejecutar los estudios necesarios para reemplazar las torres y antenas que existen de manera irreglamentaria”, expresó.

Barreras, además, dejó claro que le gustaría que esas torres únicas “fueran propiedad de Emcali”.

“Hay un inventario de estructuras que están en ambos cerros, ninguna de ellas autorizadas por el POT, como repetidoras de TV y de radio. Muchas están en deshuso pero el costo es mayor al desmontarlas que al dejarlas ahí”, remarcó.

El Concejal Terry Hurtado dijo que se debe llevar hacer un estudio sobre los criterios para montar las antenas, además de las implicaciones que tienen en la salud.