El aeropuerto Alfonso Bonilla Aragón busca volar más alto en el 2019 y por ello se proyecta el aterrizaje de nuevas aerolíneas para atender la creciente demanda de viajeros hacia y desde el exterior. Y de paso fortalecer el cubrimiento de otros itinerarios nacionales.
Esta nueva expansión comenzó a darse desde finales del año pasado cuando llegaron a ese complejo las aerolíneas de bajo costo Spirit Airlines (de EE.UU), y Avior de Venezuela, tras la apertura de sus vuelos de ida y vuelta a Fort Lauderdale (Florida) y Caracas, respectivamente.
De paso, Latam reactivó sus itinerarios directos a Lima desde el pasado 3 de enero, mejorando mediante seis vuelos semanales la conectividad con ese importante destino turístico, comercial y de negocios.
Hoy, desde el aeródromo se realizan 414 frecuencias nacionales semanales y 98 de carácter internacional, operadas por diez aerolíneas, entre las que figuran Avianca, Latam, Satena, Tame, Wingo, American, Spirit Airlines, Copa, Avior y Easyfly.
El gerente de Aerocali, Ricardo Lenis, indicó que la meta es superar de lejos la cifra de cinco millones de pasajeros que en el último año volaron hacia y desde el Bonilla Aragón en diferentes rutas.
Cabe recordar que Iberia y KLM que volaban a Cali (desde Madrid y Amsterdam) optaron por cerrar hace algunos años sus operaciones por asuntos de costos e igual hizo la aerolínea, Viva Colombia. Hay conversaciones para que regresen.
Por el lado nacional las perspectivas son positivas, luego de que Easyfly abriera el año pasado sus rutas desde Cali hacia Neiva, Quibdó y Puerto Asís, y en el 2019 busca hacerlo a Pasto y Tumaco, operando aeronaves de mayor capacidad.
Avianca también se sumó en las últimas semanas al mejoramiento de la conectividad con el relanzamiento de la ruta a Santa Marta con dos frecuencias diarias.
Lo que viene
Según Lenis, la demanda de pasajeros que aporta Cali es suficiente para que se establezcan vuelos directos desde el Bonilla a Nueva York, sin tener que hacer escala en Rionegro.
De igual manera, existe el potencial suficiente para que haya también vuelos directos a Cancún, México D.F. y Santiago de Chile, destinos hoy muy apetecidos por los caleños.
Se espera que por fin este año despegue la aerolínea Gran Colombia de Aviación (de inversionistas venezolanos) la cual adelanta la quinta fase de su proceso de certificación.
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Esta empresa, una vez reciba los permisos respectivos, proyecta operar vuelos directos de Cali a Bucaramanga, Cúcuta y Cartagena.
Y por el lado internacional, la gobernadora Dilian Francisca Toro, adelantó hace poco en Madrid las primeras conversaciones para el arribo de la aerolínea española de bajo costo Plus Ultra a Cali. De igual manera, se busca que la empresa de bajo costo Viva Colombia restablezca sus vuelos desde el Bonilla, suspendidos en 2017.
“Con una mayor oferta de aerolíneas en Cali la competencia redundará en beneficio de tarifas más bajas para los usuarios al no depender de un operador dominante”, recalcó por su parte, Harold Lozada, empresario y expresidente seccional de la Asociación de Agencias de Viajes, Anato.
“Queremos que el Bonilla Aragón se convierta en otro motor del progreso regional y de la competitividad. Resalto los esfuerzos de Aerocali para traer más aerolíneas y por eso vemos en la nueva concesión un foco de desarrollo”, señaló por su parte, María Isabel Ulloa, directora de ProPacífico.
Anotó que dentro de la futura estrategia es clave definir si el aeropuerto podría convertirse en el mediano plazo en un HUB (centro de conexiones) de una empresa líder o en un destino de bajo costo operado por aerolíneas locales y extranjeras.
Esas fortalezas las confirma Jorge Añez, presidente del Grupo Avior, quien dijo hace poco que “Cali sobresale por su oferta turística para atraer no solo a viajeros venezolanos, sino del resto de América Latina”.
Esas perspectivas serán analizadas el viernes de la próxima semana en Cali durante un foro convocado por ProPacífico.
Se alista nueva concesión
El 1 de septiembre del 2020 vencerá el contrato de concesión del aeropuerto que está a cargo de Aerocali desde el año 2001.
Y como una forma de seguir reforzando la conectividad aérea regional, habrá una nueva concesión, ya que la actual no fue prorrogada por la Agencia Nacional de Infraestructura, ANI. En ella podrán participar otros oferentes interesados en administrar ese complejo, ubicado en Palmira.
Aerocali ya está estructurando una iniciativa privada, que incluirá a los aeropuertos de Neiva y Armenia al igual que los de Buenaventura e Ibagué.
Ricardo Lenis, gerente de Aerocali, informó que ya se está adelantando un estudio de prefactibillidad que cobijará todos esos aeródromos, más el Bonilla Aragón.
El mayor obstáculo ha sido con Buenaventura debido a los problemas que hay con comunidades que se han asentado cerca de la pista del aeropuerto, lo que hace difícil su ampliación para operar un mayor número de vuelos.
El próximo 24 de febrero Aerocali presentará a la ANI y a la Aerocivil sus estudios para optar por el despegue de la nueva concesión el año entrante.
Una vez hechos los análisis y observaciones se elaborarán los pliegos de la licitación pública.
Al respecto, el director del Comité Intergremial y Empresarial del Valle, Juan Felipe Vallejo, indicó que “lo importante es que la próxima concesión quede bien estructurada para los próximos 20 ó 30 años, ya que de eso dependerá el futuro de la conectividad aérea regional”.
Resaltó que para ello “es indispensable que se otorguen unos incentivos que faciliten la llegada de más aerolíneas”.