¿En qué van las grandes obras de infraestructura que necesita el Valle?

Los grandes proyectos de infraestructura que ha venido reclamando el Valle del Cauca siguen en veremos y en este 2020 pocas obras se verán en la región.

Esto por cuenta de que iniciativas como la malla vial del Valle, la terminación de la doble calzada Buga-Buenaventura o el dragado del canal de acceso a ese municipio, siguen en proceso de estructuración.

Y pese a que la Nación tiene el compromiso de buscar los recursos que se requieren para dar marcha a los proyectos, las iniciativas no avanzan al ritmo que quiere la región.

“Por ahora esperamos que el Gobierno mantenga el compromiso de que la licitación de malla vial logre salir en estos primeros meses del año y que no pasemos del 2020 para el inicio de licitación de Buga-Buenaventura. Se requiere el cierre financiero”, explicó María Isabel Alvarado, directora de la Cámara Colombiana de la Infraestructura, CCI en el Valle, quien hizo un llamado para que las fuerzas vivas de la ciudad, gremios y sector público sigan trabajando en conjunto para buscar estrategias que lleven a destrabar los proyectos y que estos no sigan dilatándose en el tiempo.

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Al respecto, la Agencia Nacional de Infraestructura, ANI, que estructura la dos licitaciones (malla vial del departamento y la terminación de la doble calzada a Buenaventura), informó que “estamos finalizando el trámite en Hacienda, esperamos contar con esta aprobación y continuar el trámite con el DNP. Nuestro cronograma está dependiendo de estas aprobaciones, esperaríamos salir a licitar finalizando febrero”, aseguraron voceros de la entidad.

Esto, refiriéndose al caso de las obras de lo que será la nueva malla vial del Valle, en las que se incluyen intervenciones en cinco corredores entre los que están: avenida Ciudad de Cali; Jamundí- Villarrica; Sameco-Yumbo, Cali-Candelaria y obras en Palmira.

Adicionalmente, la única obra de Cuarta Generación que tendrá el Valle del Cauca, la carretera de 31 kilómetros entre Mulaló y Loboguerro, aún no arranca. Esto porque no se ha logrado la licencia ambiental.

La Agencia Nacional de Licencias Ambientales, Anla, solicitó nuevos estudios al concesionario lo que demorará aún más el inicio de los trabajos. Este proyecto fue adjudicado hace cinco años y todo indica que en este 2020 tampoco arrancarán las obras.

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Lo único que ha avanzado es el arreglo de la caída de la banca en el kilómetro 89 de la vía Loboguerrero-Buga. Invías se comprometió a dejar lista esa obra en febrero de este año.

Así las cosas, las ejecuciones de obras de infraestructura vial que se verán este año en la región son las que están siendo lideradas por el municipio y por la Gobernación (ampliación Cali-Jamundí, Cali-Candelaria, Cali-Yumbo, entre otros proyectos que se ejecutan en el sur de la ciudad).

El profesor de economía de la Universidad Javeriana Cali, Pavel Vidal, estima que las obras civiles pesan alrededor de un 3,0 % del Producto Interno Bruto, PIB, del Valle del Cauca. Por tanto, “si las obras civiles se estancan en 2020 podrían restarle hasta dos décimas al crecimiento de la economía regional”.

Por ejemplo, “si proyectamos para este año un repunte del PIB departamental de alrededor de 3,2%, pues este bajaría a 3,0%”, sino hay un buena dinámica de las obras civiles.

El año pasado el Invías informó que invertirá en la doble calzada a Buenaventura $250.000 millones, pero aún no se sabe en qué ni cuándo saldrá la licitación para la obras.

Aún con las restricciones en las vías, Milciades Carrero, directivo de la Asociación Colombiana de Camioneros, dice que hoy en día hay una mejor movilidad por el corredor Buga-Buenaventura, “pero esperamos algún día ver toda la doble calzada terminada”.

Alrededor de $4 billones se necesitan para ejecutar las obras de malla vial del Valle y terminar la doble calzada a Buenaventura. El Gobierno busca los recursos para garantizar la ejecución.

La directora de la CCI en el Valle del Cauca, María Isabel Alvarado, planteó que la región requiere un cambio en la forma de estructurar proyectos.

Considera que dichos cambios deben tomar en cuenta los siguientes puntos:

- Priorización de los proyectos
- Dedicar tiempo a las fases de diseño para obtener ingeniería de detalle (licencias, consultas, levamiento predial) y tener cronogramas ejecutables.
-Crear bancos de proyectos de región de largo plazo.
-Mayor articulación interinstitucional.
- Y buscar nuevas fuentes de financiación.

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“La necesidad de inyectar recursos no es solo local es nacional y hay alternativas como las regalías o las APP (Iniciativas Público Privadas)”.

Agregó Alvarado que las APP se vuelven un mecanismo para vincular el capital privado al desarrollo de la infraestructura muy valioso porque el esfuerzo fiscal que, en estos casos, hacen las administraciones es menor.

“Son un vehículo para atraer capital privado a los proyectos de infraestructura y adicionalmente tiene una visión más integral de la ejecución de los proyectos”.

Actualmente en el Valle del Cauca hay dos propuestas de iniciativa de APP, la del dragado del canal de acceso a Buenaventura y la de los aeropuertos para Cali y Buenaventura.

Otra de las iniciativas privadas de APP que está en marcha en la región es la del manejo de los aeropuertos del Suroccidente del país, incluido Cali y Buenaventura. Se espera que esté lista este año.

Guillermo Toro, director Técnico de Invías, explicó que en febrero de 2020 quedará lista la obra de recuperación de la banca, en el km 89 en la vía entre Loboguerrero y Buga. Como se recordará en marzo del 2019 esa vía colapsó por un deslizamiento.

En este sitio, lo primero que se hizo fue construir un muro de pilotes para evitar que la calzada que quedó operando se afectara por la erosión del terreno; posteriormente se construyó un muro de contención del perímetro para luego realizar un relleno aligerado con geobloques (un material similar al icopor de alta densidad que no se deforma).

“Eso permitió tener mejor rendimiento de la ejecución de la obra. Estamos en el 97 % de avance y esperamos terminar la atención de la emergencia al final de enero. La vía quedará en un nivel de afirmado”, explicó Toro.

La obra será concluida por el contratista que se encarga del mantenimiento integral de las carreteras del Valle, el cual realizará en febrero la pavimentación de los 150 metros de calzada. El Invías calcula que a finales de febrero se pueda habilitar el paso en las dos calzadas de la vía a Buenaventura. En esta obra, que tardó casi un año, la Nación invirtió $7.750 millones. Se espera que la restauración sea definitiva.

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Actualmente hay una propuesta de APP de iniciativa privada para ejecutar el dragado del canal de acceso a la bahía de Buenaventura. Este requiere una mayor profundidad (más de 16 metros) para permitir el ingreso de buques de gran tamaño.

Esto quiere decir que un privado sería el que realice las inversiones, pero tendría que crear un peaje. Esta alternativa ha sido avalada por algunos sectores, pero cuestionada por otros, pues se teme que el puerto pierda competitividad.

Para las directivas de la Sociedad Portuaria Regional de Buenaventura, “es urgente hacer esta obra. Estamos en una situación que cada vez es más difícil de remediar. Por la falta de profundidad en el canal, Buenaventura dejó de ser un centro de trasbordo, lo que incidió en menor conectividad y mayores tiempos de tránsito para las exportaciones colombianas”.

Sin embargo, aseguraron que no están de acuerdo con que se implemente un peaje. “Hemos sido enfáticos en el duro golpe que recibiría la operación portuaria y la competitividad de Buenaventura como Puerto, en caso de materializar la propuesta del cobro de un peaje”.

Desde el Puerto gremios y empresarios le han enviado al Gobierno propuestas de financiación para evitar el peaje y siguen buscando fórmulas, según dijo Alexander Micolta, presidente de la Cámara de Comercio de Buenaventura. Pero hasta ahora no hay una solución definitiva para la obra.