Joaquín Jaramillo vendió su Renault Duster, modelo 2018, para montarse en la ‘cero kilómetros’, versión 4x4, pero en el concesionario le dijeron que no había inventario, que debía esperar aproximadamente un mes.
No le creyó a la ejecutiva de ventas y se fue para otro concesionario, pero allí le dijeron lo mismo. Pensó en cambiar de marca y se acercó a un concesionario de Mazda. Allí también le informaron que el modelo que quería se le demoraba en llegar unos seis meses.
Lo mismo está pasando con otras marcas en el país. Sin embargo, vale la pena precisar que la caída en el stock automotor ocurre con ciertos modelos, especialmente con los importados.
El efecto que ha provocado esa reducción de los inventarios, a la que se suma la volatilidad del dólar, es que los precios de los nuevos muestran un incremento notorio.
Andemos, el gremio de la movilidad sostenible, y directores comerciales de vitrinas de autos lo confirman.
El asunto es que el alza en los precios de los ‘cero kilómetros’ contagia a los usados, no solamente en nuestro país, sino en el mundo entero, comentó Oliverio García, presidente de la organización.
Los problemas en la cadena logística a escala mundial aún no se han solucionado del todo, por cuenta del covid que sigue con fuerza en ciudades de China.
Por lo pronto no hay mucho qué hacer. Lo único es llenarse de paciencia, separar el vehículo con algo de dinero y esperar a que el ejecutivo se contacte con el cliente para informarle que ya le llegó el vehículo.
El tema es que hay ciertas líneas y modelos de autos que superan los seis meses en llegar a Colombia. Algunos ejecutivos coincidieron en señalar que pueden tardar más de diez meses.
Lea aquí: ¿Por qué el precio del huevo subió casi 35% en el último año?, esto dicen los expertos
Una de las recientes encuestas que realizó Andemos con líderes del sector indicó que el ciento por ciento de los sondeados expresó que tenía bajos inventarios.
¿A qué se debe la demora?
Lo primero que se debe precisar es que el atraso en las fábricas de producción y en las ensambladoras es un asunto que ocurre a escala mundial y está relacionado con la escasez de algunos componentes, entre ellos semiconductores y microprocesadores que permiten el correcto funcionamiento de los autos, así como el aumento de los costos en la cadena logística del transporte internacional por la escasez de contenedores.
¿Cómo se llegó a esa situación? La problemática se originó en plena pandemia del covid, finalizando el primer trimestre del año 2020, que obligó a los gobiernos de todo el mundo a establecer cierres de fronteras (cuarentenas).
En otras palabras, el mundo se detuvo y, por ende, la producción de bienes, aunque con algunas excepciones. Lo cierto es que entre los meses de marzo y agosto del 2020 se produjeron cuarentenas transitorias que frenaron la economía.
8,4 por ciento crecieron las matrículas de autos nuevos en el país en el mes de abril de 2022, según cifras del Runt.
Cuando empezó a retornar la normalidad, millones de personas en el planeta aumentaron los pedidos de vehículos para evitar el uso del transporte público y hacerle el quite al coronavirus.
Colombia no fue ajena a esa situación y la compra de autos empezó a acelerarse. La producción de carros nuevos se atrasó y a ella se sumó el tiempo de transporte marítimo de los ‘cero kilómetros’, que varía de acuerdo con el país de origen del vehículo.
La economista Esperanza Ramírez informó que la demanda de microprocesadores aumentó de forma significativa en pandemia y un año después, en el 2021, alcanzó niveles altos en respuesta al aumento en la venta de aparatos electrónicos, así como de celulares, computadores y televisores, entre otros equipos.
“Las compañías fabricantes de microprocesadores y componentes de tecnología respondieron a esa demanda para atender el mercado de equipos móviles, computadores y televisores, entre otros, mientras volvía a prender motores la venta en el sector automotor”, explicó.
En el caso colombiano, la gran demanda de celulares y otros aparatos electrónicos se aceleró por las jornadas de los días sin IVA.
En el 2021 la venta de esos bienes creció más del 40 %, recordó Fenalco, el gremio de los comerciantes.
Lea también: "El 2022 está siendo un gran año para la construcción": Susana Correa, ministra de Vivienda
En consecuencia, se presentó una escasez de procesadores y microprocesadores para la industria automotriz a escala mundial, que se sumó a la baja producción y demoras en las entregas de vehículos nuevos.
En este 2022 los fabricantes de microprocesadores para el sector automotor trabajan a marchas forzadas para responder a la demanda de vehículos nuevos, que sigue creciendo y enfrentada la escasez de contenedores, que todavía no se soluciona del todo.
La inflación, la volatilidad del dólar y la escasez de microprocesadores y de producción de autos nuevos generó alza en los precios de los vehículos nuevos. Los usados también han subido.
Ese problema debió haberse resuelto hace varios meses, “pero como se ha presentado un rebrote de covid en algunas ciudades de China, que ha provocado cuarentenas parciales, la solución definitiva sigue en veremos. Por ahora nadie sabe decir cuándo se le dirá adiós al virus”, sostuvo Munir Jalil, economista jefe del banco BTG Pactual.
A pesar de ello, las ganas de muchos usuarios por tener carro nuevo es intensa y prefieren comprar ahora y estrenar después. Los altos precios tampoco frenan las ventas.
Los ‘cero kilómetros’ reportan un incremento en precios por cuenta de la inflación y de la tasa de cambio entre un 20 % y un 25 %. Los autos usados no se quedan atrás y hoy se consiguen hasta en un 30 % más alto que hace cuatro años (depende de la marca).
En abril se vendieron 20.637 carros nuevos en el país, lo que mostró un crecimiento de 8,4 % frente al mismo mes del 2021, según el Registro Único Nacional de Tránsito (Runt) y Andemos. Con las cifras de abril, el acumulado de nuevas matrículas llegó a 78.091 en los primeros cuatro meses del 2022.
En el caso de Cali se matricularon 1449 automóviles nuevos en abril, 21,2% más que en igual mes del año pasado y ocupó el cuarto lugar después de Bogotá, con 4073 registros nuevos; Funza, con 1789 y Medellín, con 1585.
Más híbridos
Los autos híbridos y eléctricos siguen ganando terreno en el mercado colombiano.
Este año se vendieron 2881 unidades en abril y en lo corrido del año 8520.
Los eléctricos mantienen la mayor tasa de crecimiento del mercado en lo corrido de este año, con 1336 unidades y un crecimiento de 261,10 % frente al 2021, señaló Andemos.
Las marcas líderes del mercado en materia de ventas son las nacionales Chevrolet y Renault, de acuerdo con cifras del Runt.