Después de tres meses de estar secuestrado, el reconocido ganadero Juan Manuel Domínguez Ochoa, de 50 años, fue liberado el martes pasado con la ayuda del Gaula de la Policía Valle en el corregimiento de Barragán, zona rural de Tuluá, a tres horas del casco urbano de este municipio.
“El trabajo de investigación criminal e inteligencia nos permitió identificar a una banda delincuencial que estaba detrás del plagio y que exigía una alta suma de dinero a cambio de la liberación del ganadero. Desconocemos si la familia canceló alguna recompensa”, informó ayer el general Fernando Murillo, director del Gaula de la Policía Nacional.
En este caso el plagiado habría sido liberado por sus captores, según fuentes consultadas por este diario, y luego de identificarse ante las autoridades locales, fue llevado junto con sus parientes, quienes residen en Palmira.
Cabe recordar que fue en la zona rural de ese municipio en donde lo secuestraron el pasado 26 de noviembre del 2019.
En ese entonces se conoció que hombres armados llegaron a la finca Fuente La Peña, en el corregimiento de Combia, en donde raptaron al hombre de 50 años, quien perdió todo contacto con su familia a las 2:00 de la tarde.
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“Hoy nos corresponde como grupo especial antisecuestro que estaba atendiendo el caso, dar con la captura de los responsables”, afirmó Murillo, quien no precisó cuál fue el grupo que estuvo detrás del secuestro.
Al parecer, Domínguez todavía no ha comentado detalles de su caso a las autoridades y, según se ha podido conocer, también se negó a que distribuyeran imágenes de su plagio.
Contando el secuestro del ganadero, el año pasado se registraron 11 casos en el departamento, según indicadores de la Policía, institución que señaló que a nivel nacional hubo 88 secuestros en total, que además de presentar una reducción de 85 casos respecto al 2018, fue el año con menos hechos desde la década de los 80.
Pero el caso del ganadero vallecaucano no es el primero de su tipo en la familia, dado que en 1985 también fue secuestrado Abraham Domínguez, el padre de Juan Manuel. Según testimonios suyos en ese entonces, sus captores eran jóvenes sin corte político, al parecer, delincuentes comunes.
Estuvo siete meses en cautivero luego de que fuera liberado -al igual que su hijo años más adelante- por sus secuestradores luego de pagar, presuntamente, 30 millones de pesos.
La familia Domínguez Ochoa es reconocida en el departamento en el país por criar toros de lidia, tradición que conservan desde el año de 1995 en la finca Fuente La Peña, la misma en donde se cometió el secuestro del ganadero.
Ahora, tras la liberación de Domínguez, solo queda un cautivo en el suroccidente colombiano: un agricultor que fue secuestrado el año pasado en el municipio de Córdoba, Nariño, cuya familia ha preferido reservar cualquier información de la víctima por seguridad y mientras avanzan las investigaciones para dar con su paradero.
También está la retención de cuatro personas en el corregimiento de Calle Larga, en Guapi, Cauca, por parte de presuntos miembros del ELN, pero se trata de un episodio que el CTI de la Fiscalía investiga como desaparición forzada.
Y a propósito de dicha guerrilla, la columna del ‘Che Guevara’ del Frente de Guerra Occidental ‘Ómar Gómez’ tiene en su poder a Freddy Arlendy Rangel, vallecaucano oriundo de Cartago y quien fue plagiado el pasado 24 de julio del año pasado en el municipio de Medio San Juan, Chocó. Se trata de un hombre de 41 años que trabajaba como conductor de una pequeña empresa compradora de oro en Pereira, Risaralda, y que tiene un hijo de 7 años.
La región más afectada por el secuestro en 2019 fue Norte de Santander, que registró 18 casos en total. También sobresale el departamento del Cauca, con 10 hechos, y Arauca, con un total de siete.