Luego de que a mediados de septiembre se empezaran a implementar en Cali las investigaciones ‘exprés’, procesos que buscan atacar las estructuras delincuenciales con la obtención de resultados en máximo dos meses, por ahora se ha logrado la captura de seis miembros de la banda Los Misisipi.

Se trataba de un grupo dedicado a actividades de microtráfico que operaba en la Comuna 21 y a la que le atribuían tres homicidios, aparte de 20 desplazamientos forzados por extorsiones a comerciantes del sector.

Precisamente, el hurto y el homicidio son los dos grandes blancos a atacar por las autoridades en estas investigaciones adelantadas de manera articulada entre la Policía Metropolitana y el CTI de la Fiscalía.
“No es que sean más rápidas porque sean menos rigurosas, eso hay que dejarlo claro, sino porque son mejor coordinadas y se les va a poner plazos más estrictos a los investigadores para presentar los escritos de acusación ante los jueces”, explicó en su momento Andrés Villamizar, secretario de Seguridad de Cali.

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Por el momento, los esfuerzos de las autoridades están focalizándose en las comunas 4, 9 y 15, en el oriente de la capital vallecaucana. Además, para lo que resta del año se tienen proyectadas cuatro investigaciones ‘exprés’ contra bandas criminales que operan en la ciudad.

De acuerdo con un investigador de la Sijín de la Policía de Cali, “uno de los puntos más importantes para abrir una investigación ‘exprés’ es que si hay un foco de delincuencia álgido en determinada zona, no se puede esperar por mucho tiempo a que ese crezca, por lo que se necesita de resultados rápidos. Es algo que se estudia con nuestro Centro de Investigaciones Criminológicas y el CTI de la Fiscalía”.

“Ya cuando uno ve que la banda que se busca desarticular es más grande, con líneas delictivas amplias (un brazo dedicado al hurto, otro al microtráfico, uno al sicariato, etc.), se adelantan investigaciones de más largo aliento. Es algo que se va confirmado en el transcurso de la investigación”, agregó el agente.

Este recordó que, tal como se dijo en el lanzamiento de las operaciones ‘exprés’, estas se articulan con el fortalecimiento de la vigilancia por cuadrantes en las zonas más conflictivas de la ciudad, con el propósito de hacer más visible la Policía para los caleños.

También expresó que el hecho de que la investigaciones no pueden tomar más de dos meses no implica una mayor carga para las autoridades ni que el esclarecimiento de los hechos vaya a ser menos riguroso, “sino que solo se están optimizando los mismos recursos y equipo de trabajo en menos tiempo”.

“Si un juez emite una orden de captura es porque ya se logró recolectar suficiente material probatorio en la investigación ‘exprés’ para llevar a los implicados a juicio. Con esto, el aparato judicial va a fluir de manera más constante y articulada”, aseveró.

Entre el 1 de enero y el 16 de octubre hubo 23.469 hurtos, 2855 denuncias más que en el mismo periodo del 2018, según el Observatorio de Seguridad. De los casos del 2019, 4399 fueron de celulares.

Sin embargo, para un investigador de la Fiscalía, que prefirió poner su nombre bajo reserva: “Hay compañeros que tienen 80, 150 órdenes de trabajo. Y son 430 investigadores del CTI en Cali y el Valle, en promedio. Algunos, por ejemplo, están adelantando unas diez grandes investigaciones para desmantelar estructuras criminales organizadas”.

Anotó que con la orden de realizar este tipo de procesos, las grandes investigaciones pasarían a un segundo plano para cumplir las exigencias de superiores. “Se están priorizando las capturas en flagrancia. Pero en flagrancia casi nunca caen las cabezas de las bandas”, aseguró.

Por su parte, Andrés Preciado, experto en seguridad, explicó que las investigaciones ‘exprés’ no parecen nada distinto a lo que normalmente se exige en los consejos de seguridad de Cali.

“O sea, lo que pide evidentemente un Alcalde es que las operaciones sean lo más rápidas posibles, sin que esto vaya en detrimento de la calidad investigativa. Pero lo cierto es que se trata de acciones con más riesgos que fortalezas, por ejemplo, que la posibilidad de mantener en la cadena judicial estos procesos es muy baja. Lo que se debe buscar con más ahínco en Cali son las órdenes de capturas expedidas por un juez y en menor medida, las detenciones en flagrancia”, afirmó Preciado.

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