La relevancia que tiene el norte del Cauca para que grupos armados ilegales puedan mantener el control sobre el narcotráfico, la minería ilegal y las demás economías ilícitas, tiene disparada la violencia y la criminalidad en esta zona del país.
Una disputa entre organizaciones armadas ilegales que entienden, de acuerdo con analistas consultados, que no es solo garantizar el acceso a la región del Naya, sino tener las llaves de los corredores estratégicos hacia el océano Pacífico para el movimiento de armas y drogas.
El hecho más reciente se registró en la madrugada de ayer, cuando se presentaron enfrentamientos en zona rural del municipio de Suárez (Cauca) entre tropas del Ejército y la estructura Jaime Martínez, perteneciente a las disidencias de las Farc en el sector conocido como ‘La Vuelta del Diablo’, junto a la represa de La Salvajina.
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Los combates se extendieron por cerca de dos horas, en las que la población civil quedó en medio del fuego cruzado; y aunque no se reportaron víctimas mortales, las autoridades tienen conocimiento de que en las últimas horas han muerto 19 personas en distintos hechos violentos y más de mil personas han debido salir desplazadas en las últimas semanas.
Incluidos los asesinatos de dos líderes sociales y ambientales en hechos aislados en los municipios de La Vega, donde en el corregimiento de Santa Bárbara hombres de la columna Carlos Patiño de las disidencias de las Farc asesinaron al líder social y exgobernador indígena Luis Alfonso Narváez. Entre tanto en el municipio de Argelia fue ultimado el también dirigente social Efrén España por un grupo armado.
Unas horas antes también en Argelia, en el corregimiento de Sinaí, fueron hallados los cuerpos de dos jóvenes quienes, al parecer, pretendían huir de las filas de las disidencias de las Farc y fueron ejecutados por este mismo grupos armado ilegal.
Corredores más violentos
Juan Manuel Torres, coordinador de la Oficina Pacífico de la Fundación Paz y Reconciliación (Pares), explica que el pasado fin de semana fue el más violento del año en el Cauca.
Las subregiones con las situaciones más complejas, según el analista, son el cañón del Micay, en el municipio de Argelia, donde se han presentado quince eventos de desplazamiento en lo corrido del año. Igualmente, el corredor que conecta por el río Cauca los municipios de Morales, Buenos Aires, Suárez y Jamundí, que es el corredor principal de la Jaime Martínez de las disidencias de las Farc.
“Ya es un hecho que en el Cauca se incubó un nuevo ciclo de violencia, que cada rato presenta unos picos como los del pasado fin de semana porque tenemos uno de los departamentos más militarizados, pero sin una estrategia de seguridad clara”, asegura Torres.
El secretario de gobierno del departamento del Cauca, Luis Cornelio Angulo, señaló recientemente que se están coordinando “con la fuerza pública acciones que permitan que la seguridad vuelva a los territorios” y pidió mayor inversión social de parte del Gobierno Nacional en la región.
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A esta situación se suman los combates armados que libran la estructura de las disidencias de las Farc Carlos Patiño, el grupo Diómer Cortés de la Segunda Marquetalia y el frente José María Becerra del ELN, entre otros, en zonas rurales del departamento.
“Aquí los grupos delincuenciales, llámese disidencias, ELN, grupos paramilitares u otros, están cumpliendo con sus amenazas y están asesinando líderes sociales. Estas organizaciones no tienen garantías en el Cauca y no hay respuestas reales o certeras de parte de la Gobernación”, agrega el coordinador de la Fundación Pares.
En lo corrido del año la Defensoría del Pueblo ha hecho alertas tempranas sobre casi la mitad de los municipios del Cauca que han sido generadas en los dos últimos años pero que poco atendidas por las autoridades.
Después de esas advertencias se han presentado asesinatos selectivos, masacres, desplazamientos masivos, asesinatos de líderes sociales y combates que llenan de zozobra esta región, por donde se sigue expandiendo sin control toda la espiral de violencia.
Familias huyendo
Hace algunas semanas que varias familias campesinas de la zona rural de Argelia tuvieron que salir de sus hogares por cuenta de los combates que sostienen los disidentes de la columna Carlos Patiño de las Farc, ELN y la Segunda Marquetalia.
Así lo informó el personero de Argelia, Daniel Imbachí, quien aseguró que iba en aumento el número de personas que llegaban al corregimiento de El Plateado, tras salir de las veredas El Pinche y Las Vegas, las cuales son el escenario de los fuertes combates.