En tiempos de coronavirus es importante tener autocuidado y este debe ser mucho más riguroso en personas que tienen enfermedades de base como el cáncer. Sobre todo, por las dudas que se presentan cuando se inicia o se está en un tratamiento contra esta enfermedad durante la pandemia.
Yolanda Posso hace parte de este grupo de personas. A sus 48 años de edad lleva 6 años luchando contra el cáncer. La enfermedad empezó en un seno y ahora está en varias partes del cuerpo. Y en tiempos como estos, la batalla se duplicó contra dos enfermedades que generan temor.
Esta mujer, como otras personas, tienen mayor riesgo de complicarse si contraen covid-19, sobre todo, si se encuentran en tratamiento activo de quimioterapia, radioterapia, braquiterapia, terapia inmune y cirugía oncológica.
Yolanda únicamente salía a realizarse sus quimioterapias: “Iba de pies a cabeza bien tapada, con una toallita de papel tocaba las manijas metálicas y después la botaba. Me da temor, pero estoy confiada en Dios y soy positiva de que todo estará bien”. Es consciente de que debe tener el alma fuerte frente a la situación y sus cuidados deben de ser muy rigurosos. Hoy solo sale a sus radioterapias.
Como lo explica el médico internista y subespecialista en oncología Juan Fernando Ricardo Morales, los pacientes con cáncer inmunocomprometidos, deben cuidarse y ser responsables porque “la enfermedad disminuye el número de neutrófilos y linfocitos y la capacidad del sistema inmunológico para reaccionar ante una infección que puede producir una patología como el covid -19. Puede aumentar la mortalidad del paciente que está en tratamiento de quimioterapia”.
También, porque “el covid-19 es una infección viral, dada por un virus RNA, que actúa y altera las células de defensa afectando específicamente los linfocitos”, así lo explica el epidemiólogo salubrista Carlos Alberto Robledo. Es decir, que la disminución de linfocitos se daría por el tratamiento oncológico y el covid lo agravaría.
Por eso, cuando un paciente oncológico se contagia de coronavirus el tratamiento se detiene dependiendo del proceso y la etapa en el que se encuentre. Morales comenta que con quimioterapia se suspende inmediatamente y si está en tratamiento oral puede continuarlo, es decir, con Tamoxifeno o Leuprolide, siempre y cuando él se encuentre estable.
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Si se da el caso que una persona deba iniciar un tratamiento oncológico habiendo presentado covid-19, esta debe presentar un examen de PCR negativo, “la infección no puede estar en el cuerpo para comenzar la lucha contra el cáncer”, afirma Morales.
Por otro lado, iniciar un tratamiento puede generar incertidumbres por temor a contagiarse, pero en ocasiones no se puede esperar debido a que el cáncer puede avanzar.
María Martínez siente esa incertidumbre. Al inicio de los contagios del covid-19, esta mujer, a sus 60 años, recibió la noticia que debía iniciar un tratamiento contra el cáncer. A pesar del limbo de miedo y esperanza que le genera esa noticia en el contexto actual, expresa que va a luchar, “porque quiero poder contarles la historia de esta etapa de mi vida a mis nietos”.
El tratamiento no debe posponerse porque es una oportunidad de vida. Y por eso, las instituciones de salud en las diferentes áreas promueven las medidas y protocolos de bioseguridad: distanciamiento social, lavado de manos constante, uso obligatorio del tapabocas y desinfección de zonas y superficies.
Por el temor al contagio, los procesos administrativos cambiaron. El oncólogo Morales comenta que “cada institución hizo lo mejor que pudo basada en la experiencia y los lineamientos del Gobierno”. En la Clínica Rey David, de Cali, por ejemplo, al inicio de la pandemia a “los pacientes que estaban en tratamiento y en seguimiento se les brindó teleconsulta para darles la tranquilidad que necesitaban”.
Además, agrega el doctor Morales, se implementa un “círculo muy cerrado”. Cuando ingresan los pacientes oncológicos en la clínica tienen una ruta establecida para que no se crucen con otros tipos de pacientes, para así evitar el contacto.
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Ahora que se levantó el aislamiento obligatorio, las citas en las instituciones de salud se retoman paulatinamente, con un tiempo de atención de 35 minutos y en algunas ocasiones, para los pacientes estas pueden ser una mejor opción. Aunque para otros, no tanto. “Una llamada por teléfono es muy cortante y rápido, es mejor que lo revisen a uno y lo examinen físicamente”, argumenta Yolanda.
A pesar de que los procesos con la EPS de Yolanda tuvieron demora, por situaciones de pandemia, ahora va a someterse a una radioterapia. El amor y la fuerza son su motor porque quiere tener más vivencias con su hija y esposo. Y seguirá con sus cuidados como lo son “lavar la ropa y los zapatos, ducharme al llegar de la clínica, constantemente limpiar las superficies metálicas de mi casa y aplicarme gel antibacterial durante el día”.
Ganar la batalla contra la enfermedad, eso desean Yolanda, María, los pacientes oncológicos y sus familias. Y por eso, buscan que el miedo no se apodere de ellos, sino que sea una herramienta de precaución.
Cabe mencionar que, cuando el paciente ya no presenta la enfermedad y se encuentra en seguimiento, el antecedente de haber tenido cáncer no aumenta el riesgo de sufrir complicaciones de salud por el covid-19. Al menos que “quedara con alguna secuela pulmonar, renal y hepática, se aumenta el riesgo de mortalidad”, asegura el oncólogo Morales.
Se aconseja la Gerson, una dieta a base de frutas, vegetales y cereales integrales orgánicos que brindan al cuerpo minerales, enzimas y otros nutrientes.
Tenga en cuenta
Para tener un sistema inmune fuerte los expertos aconsejan el consumo de verduras, legumbres y frutas, practicar ejercicio e ir a los chequeos médicos.
Se aconseja consumir frutas que sean cítricas como el lulo, la maracuyá, la naranja y el limón, que sean ricas en vitamina C.
El epidemiólogo salubrista Robledo recomienda que es importante tener una vida saludable marcada en la alimentación antiinflamatoria y antioxidante, como los vegetales verdes que contienen vitamina E, los cereales integrales que cuentan con vitamina C reactiva y los frutos rojos.
Datos claves
Según datos de la Cuenta de Alto Costo (CAC), en Colombia hay 275.348 personas diagnosticadas con cáncer para el último periodo analizado entre enero del 2017 - 2018.
Ahora, en el 2020 se estima que anualmente en el país se presentan 101.893 nuevos casos, según el Ministerio de Salud. De esa cifra, 54.017 son mujeres que desarrollan cáncer cada año frente a 47.876 hombres, según las estimaciones.
En el género femenino los de mayor afectación son: seno (24%), colon y recto (8,8%), tiroides (7,9%), cérvix (7,9%) y estómago (5,3%). En los hombres, el cáncer de próstata (26%), estómago (9,6%), colon y recto (9,2%) y pulmón (6,8%).