Las tareas pendientes de Colombia dentro de la Ocde

La semana que acaba de terminar se puede calificar como muy positiva para el país y en especial para el Gobierno Nacional. La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos, Ocde, destacó el buen desempeño de la economía y dijo que un crecimiento del PIB sobre el 3,4 % es muy importante en medio de un panorama gris para los demás países de la región.

El secretario de esa organización, Ángel Gurría, estuvo tres días en Bogotá donde analizó el comportamiento del país en términos económicos, pero también planteó las tareas que debe emprender ahora que ya hace parte de ese grupo de países organizados, donde están los más ricos.

Colombia es el país número 37 de la Ocde y después de Chile y México es el tercero en llegar a la organización en la región latinoamericana.

Las tareas no son fáciles, como tampoco ha sido sencillo el camino que tuvo que recorrer el país para ingresar.

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La historia se remonta al año 2011, cuando el entonces presidente Juan Manuel Santos expresó en la organización su interés por adherir a la misma.

Pasaron siete años y la evaluación de 22 comités para que en mayo de 2018 el Comité de Asuntos Comerciales de la organización diera su aval para la admisión del país.

A pesar de que ya somos los nuevos ‘afiliados’ a ese “club de las buenas prácticas”, hay académicos que opinan que aún no estamos preparados para pertenecer a la Ocde. Otros piensan que hay grandes retos, pero aún así lo ven con buenos ojos.

El profesor de economía de la Universidad del Rosario, Iván Jaramillo, sostiene que pertenecer a la Ocde le da a Colombia oportunidades de crecer en materia económica porque le permite relacionarse con actores importantes en las dinámicas financieras y económicas internacionales.

“Significa que está en un espacio de interrelación comercial, de mayor diálogo con los países miembros para fortalecer relaciones y acuerdos en materia de exportaciones e importaciones”, añade.

El también profesor de la Universidad Javeriana César Ferrari dice que esta integración le permite a Colombia “tener acceso a las recomendaciones que hace la organización y, sobre todo, compararse con los países desarrollados”.

Sin embargo, la economista caleña Esperanza Ramírez piensa que eso no es suficiente para garantizar que a Colombia le va a ir bien.

“Este país no ha logrado reducir el nivel de desempleo, sigue por encima del 10%, y la informalidad no baja del 47%. Además, las exportaciones no repuntan y tampoco son diversificadas. En agosto pasado sumaron US$3.257 millones, que al compararlas con las del mismo mes del año 2018 muestran una reducción cercana al 12%. Creo que tenemos muchos retos por superar”, explica.

En relación con los productos de exportación, no pocos analistas piensan que nuestra canasta exportable no es diversificada.

En ese sentido el presidente de Analdex, el gremio que agrupa a los exportadores, Javier Díaz, ha dicho en varias oportunidades que “ese debe ser un propósito porque no tenemos una canasta exportadora diversificada. Creo que llegar con más productos a Europa y al Asia es un objetivo que debe ser fundamental en la estrategia de alcanzar más mercados internacionales”.

Pero no solo los compromisos del país están relacionados con actividades de comercio exterior. Las tareas representan grandes desafíos.

En cuanto a las recomendaciones de la Ocde para el país se destacan las siguientes:

• Aumentar la edad de jubilación. Según el organismo internacional, el país requiere con urgencia una reforma pensional que tenga como fundamento ese punto. Al respecto Fedesarrollo dice que se debe aumentar la edad de pensión e igualarla en 65 años para hombres y mujeres, pero el Presidente de la República ha dicho que no.

• La Ocde propuso también que se adopte una política de salarios mínimos diferenciales, que se facilite la contratación por horas, que se reduzcan los costos de contratación para las empresas y que se reevalúen las cajas de compensación.

Para la organización “reducir la informalidad e impulsar el trabajo de calidad extenderá los beneficios del crecimiento a todos los colombianos, lo que redundará en apoyo económico y político para la reforma”.

Además, la Ocde solicitó la aprobación del proyecto de ley radicado por el Ministerio de Hacienda como reformulación de la Ley de Financiamiento, declarada inexequible por la Corte Constitucional hace unos días. La entidad asegura que dicho proyecto es garantía de “confianza al futuro y de tranquilidad para los agentes económicos”.

Con todo ello, las tareas implicarán un desafío para el Gobierno.

Este año, la economía colombiana tiene proyecciones de crecimiento por encima del 3 %, cuando América Latina apenas tiene previsto crecer entre el 0,5 % y el 0,6 % (según datos de la Cepal).

Los sectores que más se destacaron fueron los de comercio y servicios, con un crecimiento del 4,8%. El consumo de los hogares ha sido clave para el repunte de la economía nacional.

El turismo, en términos generales, presentó también un balance positivo y se reportó con un repunte de 4,8 %.

Por su parte, el sector de la construcción sigue en proceso de reactivación y tuvo un incremento de 0,6 %.