¿Le conviene a Emcali comprar electrificadoras? Estos son los pros y contras

Emcali reafirmó su intención de comprarle al Gobierno Nacional sus acciones mayoritarias en cinco electrificadoras del país, lo que llevaría a la empresa caleña a convertirse en una de las distribuidoras de energía más importantes a nivel nacional.

Se trata de las centrales eléctricas de Nariño, Caquetá, Cauca, Meta y Huila, sobre las cuales la Nación tiene el mayor porcentaje de participación en acciones.

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“Es la oportunidad que tenemos de convertirnos en un jugador importantísimo en el sector de la generación, comercialización y distribución de energía. Por eso, consideramos clave realizar este negocio”, comentó el gerente de Energía de Emcali, Marino del Río Uribe.

El Gobierno Nacional estaría dispuesto a vender su participación en estas compañías por medio del Plan de Enajenación de Activos, con el cual se busca generar mayores ingresos para el desarrollo de diferentes proyectos.

De concretarse este negocio, Empresas Municipales de Cali —Emcali— se convertiría en el tercer distribuidor de energía del país, solo por detrás de EPM y GEB, y pasaría de tener de 4,8 % al 15,3 % de participación en el mercado.

“Hemos venido trabajando en cómo hacer que esta empresa crezca. La única forma de lograrlo actualmente es saliendo a conquistar otros mercados y con el nuevo Gobierno estamos esperando la oportunidad de contarles cómo va el proceso y cómo Emcali podría ser un socio estratégico para esta adquisición”, sostuvo Carolina Serna, gerente financiera de las Empresas Municipales.

Según las estimaciones de Emcali, la compra de estas acciones tendría un valor cercano al billón de pesos, para lo cual se estaría trabajando en la propuesta de un convenio interadministrativo con otra compañía, en el cual Emcali pondría el 51 % de la inversión, mientras el privado el otro
49 % restante.

Esta posibilidad ya ha generado polémica entre quienes no confían en Emcali para un proyecto de esta magnitud y quienes son optimistas al respecto.

Julio César Alonso, director del Centro de Investigación en Economía y Finanzas —Cienfi— de la Universidad Icesi, manifestó que “esta es una de las últimas oportunidades que tiene Emcali para alcanzar a sus pares en Medellín y Bogotá, para convertirse en un grupo empresarial como estas”.

El director del Cienfi agregó que, en la medida en que todo se haga con transparencia, este es un proyecto que debería materializarse.

Desde Emcali afirmaron que lo que se busca es hacer a la empresa más competitiva. “Se nos ha encomendado la labor de buscar otros negocios y generar mayores ingresos; esta es una oportunidad única. Además, también se mejoraría la calidad de los servicios en las comunidades que se surten de la energía de estas distribuidoras”, puntualizó la Gerente Financiera de Emcali.

Los principales cuestionamientos al proyecto se enfocan en la intención de aliarse con una empresa del sector privado para concretar la oferta de compra ante el Gobierno Nacional.

Una de las contradictoras es la exconcejal Diana Rojas, quien viene denunciando desde hace varios meses los negocios que la empresa de servicios públicos realiza, mediante convenios interadministrativos, para favorecer a empresas privadas.

A su vez, el concejal Roberto Ortiz comentó que la actual Administración de Emcali y de la ciudad no dan la suficiente confianza para ver de forma positiva el proyecto.

Además, “con todas las deficiencias y el mal manejo que ha tenido la empresa, ¿será que puede competir con otras más fuertes en la puja por esas electrificadoras? No creo”, dijo.

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Sin embargo, no todos ven en la posibilidad del convenio un motivo para no finiquitar la compra de los activos.

Esteban Piedrahita, economista y rector de la Universidad Icesi, declaró que otras empresas públicas de diferentes regiones también han usado este mecanismo, sin que esto signifique algún tipo de irregularidad.

Por el contrario, según comentó, esto haría que el proceso de adquisición fuera menos engorroso y “le exige a Emcali una disciplina y una rendición de cuentas mayor, para con el socio y la ciudadanía. Este es un proyecto de gran escala”.

Pese a la críticas por temas de contratación en Emcali, la empresa ha mostrado un mejor panorama económico. En 2021 reportó una utilidad operacional de $254.000 millones.

Asimismo, mejoró recientemente su calificación financiera, pasando de un rango BBB a A-, lo que le permite a la empresa acceder a una mayor variedad de fuentes de financiación y tener una percepción positiva frente a otras organizaciones.

El balance positivo le permitió a Emcali devolverle a la ciudad $ 117 mil millones, traslado de recursos que no sucedía desde hacía 25 años.