A pesar de que el invierno le ha pasado factura a la producción de caña de azúcar en el Valle Geográfico del río Cauca, el precio internacional del granulado ha contribuido a solventar la situación y a mejorar las inversiones en los programas sociales.

Alrededor de 2.000 hectáreas se perdieron por la temporada de lluvias, dijo la directora de Procaña, Martha Betancourt, en diálogo con El País.

Este jueves, durante la asamblea que realizará el gremio de los productores de caña, se hablará del impacto que han causado las lluvias y el futuro de esta agroindustria.

Lea aquí: ¿Bajarán los precios y mejorará el servicio? Las inquietudes del acuerdo entre Avianca y Viva Air

El clima le ha jugado una mala pasada a la producción de la caña de azúcar. ¿Qué balance puede hacer?

Desde enero estamos sufriendo problemas de inundaciones, ese mes tuvimos el desbordamiento del río cañas, en Miranda. En Florida se perdieron unas hectáreas de caña y como ha venido lloviendo permanentemente, sube el nivel freático.

Creemos que no se van a recuperar 2.000 hectáreas y eso representa pérdidas del orden de $28.000 millones, más los sobrecostos que generan las motobombas, los tractores y toda la maquinaria para mover las palizadas y hacer obras de contención.

¿Pero eso afectará los empleos?

No, se mantienen todos. Esta agroindustria genera 286.000 empleos en el Valle geográfico, que va desde el norte del Cauca hasta Caldas. Esos 286.000 empleos benefician a 1.200.000 personas porque en el clúster están los productores de caña, ingenios, empresas agrícolas que proveen bienes y servicios, los almacenes de insumos, el taller del municipio que repara el tractor, es decir, es un encadenamiento virtuoso e integral.

¿En cuanto a los precios internacionales del azúcar, el panorama es positivo?

Sí, veníamos de casi cuatro años de precios deprimidos internacionales, pero empezó a reaccionar por la reactivación del comercio mundial y luego por la crisis logística.

Hemos registrado un aumento promedio del 35% en la cotización internacional, lo que nos permite solventar el aumento de los precios de los insumos y obviamente todos los programas sociales que estamos financiando.

¿Este año cuánto se producirá en caña?

El año pasado en Colombia producimos alrededor de 21 millones de toneladas de caña, de las cuales salen aproximadamente 1.900.000 toneladas de azúcar. El 60% se destina al mercado internacional y el 40% restante al consumo interno.

¿Esa cifra será mayor o menor a la del año pasado?

Bajará por el impacto de las lluvias.

Nosotros creemos que la cantidad de agua que hemos recibido, más la que se recibirá hasta junio, generará un impacto en el mediano y largo plazos, pero es incierto saber cuánto porque no se sabe cuánto volumen de agua seguirá cayendo.

¿Aun así, la producción de caña de azúcar, que es clave en el Valle del Cauca y en el país, va a seguir siendo protagonista este año?

Por supuesto que sí, el año pasado inmediatamente se levantaron los bloqueos después de ese paro tan duro, teníamos caña represada para el corte y en razón a ello tuvimos un mejoramiento en las toneladas de caña por hectárea.

La caña se mide por la cantidad, es decir, toneladas por edad de corte. A todo ello contribuyó que los ingenios pusieron toda su estrategia para poderla moler.

El sector azucarero puso en marcha la campaña social Compromiso Rural después del paro del 2021, ¿cómo va y qué resultados arroja hasta el momento?

Compromiso Rural es una apuesta que lleva 10 meses. Fue creada para brindar capacitación y generar empleo en la agroindustria de la caña.
Estamos trabajando de la mano con Asocaña, Cenicaña, que es nuestro centro de investigación, el Sena y el ICBF.

El objetivo es buscar personas de los municipios del área de influencia de la caña que quieran trabajar en el sector. Se les brinda capacitación a través del Sena y luego tienen la posibilidad de laborar en los ingenios, en diferentes áreas, como agrícola, administrativa y mercadeo, entre otras.

A la fecha se han conectado alrededor de 800 personas, tanto en los ingenios como en el gremio de los productores.

Nosotros tenemos un gran reto y es que los productor es de caña vinculen a más productores. Creemos que es una apuesta importante, sobre todo en materia de educación y empleo, que es lo que más piden los muchachos.

¿Cuántos municipios están vinculados a la campaña?

Las poblaciones que tenemos vinculadas al sector son 39 en el Valle del Cauca, más los del norte del Cauca y los municipios de los otros 3 departamentos. Esta es una apuesta integral en toda la región del suroccidente colombiano.

¿Para usted, 2022 será un buen año para el sector?

Nosotros somos muy optimistas. Este año será muy bueno porque estamos consolidando programas como el Fondo Social, que es el primero en Colombia en el que los productores e ingenios aportan de manera voluntaria para invertir, principalmente en labores sociales, en infraestructura y en actividades económicas.

En 2019, 2020 y 2021 invertimos en mejoramiento de vías terciarias en la zona media y alta de los municipios.

Lo hacemos allá porque queremos que los productores de alimentos de esas zonas puedan bajar y garantizar el suministro de alimentos en las ciudades. Hemos subsidiado vías en Florida y Guacarí.

Inversión en el campo

Procaña ha invertido $1.500 millones en programas sociales y de infraestructura. A eso se suma el apoyo de la Gobernación del Valle, que en total ha invertido $3.500 millones.

Es importante el aporte porque la Gobernación sabe que reactiva el agro, más el empleo que se genera con el tema de infraestructura y los planes de bienestar social.