Si se desata una guerra entre Rusia y Ucrania el mundo entero no se salvaría del impacto de un conflicto de esa naturaleza. Colombia, aunque a muchos les parezca que está lejos de ese impacto, se verá afectada y mucho.

Las repercusiones en la economía mundial y por ende la colombiana serían grandes.

Por ejemplo habría un mayor aumento en el valor de los productos (con una inflación más alta a la que ya existe) y una subida más pronunciada de los precios del petróleo, dicen conocedores de la economía internacional.

Algo que evidenció la pandemia es que el mundo está interconectado y todo lo que pasa en el mercado, principalmente con potencias como Estados Unidos, Europa y Rusia termina repercutiendo en todos los mercados internacionales.

La actual crisis sobre Ucrania entre Rusia y la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), que involucra directamente a los Estados Unidos y a la Unión Europea, no es la excepción.

El dólar aún mantiene un rango de precio entre los $3.900 y los $3.940. Analistas dicen que puede aumentar si hay conflicto en Ucrania.

Rusia es uno de los principales productores de petróleo y solo con la tensión que ha provocado el tema el precio del crudo se trepó a US$96 el barril, un nivel que no se había visto desde el 2014.

Aunque eso podría ser positivo para países petroleros como Colombia, que podrían aprovechar para agrandar el mercado, tras el riesgo en la cadena de suministro de Rusia por una eventual guerra, el mercado del petróleo también desprende repercusiones en la devaluación de la moneda y por consiguiente en el aumento de los precios (inflación).

En consecuencia, los precios subirían en nuestro país por la escasez de productos y el aumento en las cotizaciones de aquellos bienes que importamos.

“El impacto negativo tiene que ver con una depreciación de la tasa de cambio, fortalecimiento del dólar, y un aumento eventual de la inflación, que golpearía aún más el poder adquisitivo de los hogares”, afirmó Luis Fernando Mejía, director ejecutivo de Fedesarrollo.

Otros analistas opinan que una crisis internacional de la cadena de suministros no permitiría aprovechar completamente el alto precio del petróleo.

10,6 por ciento creció la economía colombiana en el 2021 En este 2022 el PIB será más moderado.

Y hay más. El profesor de Economía de la Universidad Piloto Oscar Loaiza Pava señaló que la subida de los precios del petróleo elevaría también los precios de la gasolina a nivel mundial y Colombia es importador de gasolina.

Agregó que los alimentos se encarecerían más de lo que ya están. “Se agravaría más porque la economía de Colombia no produce siquiera la mitad de los alimentos que consume”.

4,7 por ciento podrá crecer el PIB de Colombia este año, estima el Gobierno Nacional.

“Nosotros ya tenemos un problema de inflación externa y ese lío ya es bastante grave. El Gobierno está obligando a tomar decisiones, como por ejemplo bajarle el arancel a ciertos alimentos”, explicó.

A todo eso se sumaría un incremento de las tasas de interés para tratar de controlar la inflación, pero un incremento mayor en la tasa de interés impacta las decisiones de inversión de las empresas, encarecería los créditos de consumo, las tarjetas de crédito, la compra de vivienda y de vehículos, entre otros.

Camilo Durán, economista senior de Credicorp Capital, dijo que si los precios del petróleo superan los US$100 por barril y siguen derecho por el escalamiento del conflicto en Ucrania, lo que el país va a presentar es una economía enfrentando más presión inflacionaria sobre una materia prima importante y eso, en medio de una fragilidad económica, puede ser más recesivo.

96 dólares fue el precio al que alcanzó a subir el barril de petróleo Brent la semana anterior.

“Ahora estamos ante un escenario económico de desaceleración en el ritmo de crecimiento en Estados Unidos. Si esa desaceleración se materializa muy fuerte en esa Nación y además se le imprime mayor presión a la actividad económica por la vía de un conflicto escalado entre Rusia y Ucrania y por consiguiente en los aliados de occidente, la desaceleración causaría más presiones sobre el dólar”, precisó.

En pocas palabras la recuperación económica en nuestro país se frenaría.