Ya se va a cumplir un año y medio desde que el Concejo de Cali le autorizó al alcalde Jorge Iván Ospina contratar un crédito por $ 650 mil millones, para financiar proyectos estratégicos del Plan de Desarrollo y atender necesidades por la pandemia.

Hasta ahora, $ 124 mil millones de los recursos del préstamo se encuentran en proceso de contratación y $ 199 mil millones ya fueron contratados. Es decir, apenas el 30 % de los recursos se encuentran en firme para iniciar los proyectos o ya se están ejecutando.

El Municipio suscribió cinco acuerdos con los bancos BBVA, Popular, Occidente, Davivienda y Bancolombia para el préstamo de los $ 625 mil millones. Es un dinero que ya está asegurado. Ahora bien, los recursos que faltan para completar el cupo de crédito ($ 25 mil millones) se conseguirán a través de otro contrato con Bancolombia.

La mayoría de los recursos se destinarán a proyectos relacionados con espacio público, en un 30,8 %. Luego le sigue infraestructura tecnológica
(28,7 %), infraestructura y movilidad (25,9 %) y desarrollo social (14,4 %).

A la fecha hay ocho proyectos contratados. El Corredor Ambiental Cristo Rey, el Bulevar del Oriente y el mejoramiento de las vías de Cali son algunos de los más ambiciosos. Sin embargo, otros que son igual de importantes para la ciudad ni siquiera han iniciado proceso de contratación, como el Fondo Solidario para la reactivación, el Ecoparque Corazón de Pance, la semaforización inteligente y la renovación de la plaza de mercado Alameda.

Esta situación ha encendido las alertas entre algunos analistas y veedores de Cali, puesto que a la actual Administración solo le queda año y medio para entregar estos proyectos, algunos de los cuales apenas cursan las etapas de estudios y diseños.

$ 650 mil millones es el monto total del empréstito que solicitó la Alcaldía de Cali en el 2020.

$ 554 mil millones es la deuda que dejó el alcalde Armitage.

“A eso súmele que en el segundo semestre del 2023 inicia el proceso electoral para escoger el nuevo alcalde de Cali, temporada en la que las administraciones bajan su rendimiento y los contratistas están pendientes de cómo garantizar la continuidad de sus procesos. O sea, solo tenemos un año para entregar esos proyectos”, explicó Daniel López, director de la Unidad de Acción Vallecaucana, UAV.

López también cuestionó que todos los proyectos deben garantizar una tasa de retorno, es decir, intereses que nutran las arcas del Municipio, pero mientras más se demoren los proyectos en ser entregados, menores serán los ingresos que recibirá la ciudad. Y por ende, menor capacidad de acción tendrá para pagar la deuda.

Hace poco la UAV hizo un análisis del Plan de Desarrollo, que tras dos años de ejecución reporta un avance del 44,3 %. Además, aunque hubo una ejecución presupuestal del 90 % durante el 2021, el indicador de cumplimiento de metas se ubicó en 77 %. Esto significa que no se ejecutaron $ 358 mil millones.

El despacho que más ejecución presupuestal tuvo fue la Secretaría de Infraestructura, con un 94 %, pero con apenas un avance físico de sus proyectos del 18,5 %. Y es precisamente a Infraestructura a la que se le asignarán más recursos del empréstito: un total de $ 127 mil millones.

Para Lina Orozco, politóloga de la Universidad Javeriana, también es preocupante que hay un porcentaje del empréstito —menor pero importante— que se está destinando a “proyectos blandos”.

“Por ejemplo, una serie de talleres para fortalecer el tejido social por
$ 4524 millones. Entendemos la situación de la ciudad, pero uno se pregunta si la Alcaldía no tiene otros recursos en caja para invertir en esto y no tener que utilizar los dineros del empréstito, que además tienen un interés asociado hasta el 2030”, se preguntó la politóloga.

Orozco recordó que el manejo de las finanzas que planteaba el actual gobierno ya presentaba dudas desde que se socializó el Plan de Desarrollo en 2020. “Ospina lo presenta primero con una inversión de
$ 24 billones, pero el Concejo se lo aprueba por $ 18 billones, y aun así tenía un déficit de $ 6 billones comparado con el histórico de los planes de Desarrollo. En otras palabras, hay desfinanciación”, afirmó.

$ 193 mil millones es la cantidad asignada al componente de espacio público. Este dinero sale del préstamo que hizo la ciudad.

$ 180 mil millones es el monto destinado a infraestructura tecnológica.

¿Cómo están las finanzas de Cali?

Cuando el Concejo aprobó el empréstito de $ 650 mil millones, en octubre del 2020, también le dio el visto bueno a la Alcaldía para que reperfilara la deuda que dejó la administración Armitage por $ 554 mil millones y así pagara por cuotas hasta el 2030, misma fecha límite para cancelar la totalidad del nuevo crédito. Es por esto que en los próximos ocho años Cali deberá pagar $ 1,7 billones a los bancos que le prestaron.

¿Pero esto cómo afectará las finanzas de las próximas dos administraciones? Según el Marco Fiscal de Mediano Plazo, puede haber un importante descenso en la capacidad de inversión. Por ejemplo, en el primer año del siguiente Alcalde, o sea el 2024, apenas se contaría con $ 2,9 billones, cuando usualmente cada año se cuenta con $ 3,6 billones. Y Cali tendrá que esperar hasta el 2028 para normalizar su presupuesto.

Esto ocurre, precisamente, por las cuotas que el Municipio está obligado a pagar a los bancos. En estos momentos, no se está consignando, porque el empréstito ofrece dos años de gracia, pero a partir del 2023 se deberá a empezar a pagar montos que oscilan entre los $ 131 mil millones y $ 257 mil millones cada año hasta quedar a paz y salvo en octubre del 2030.

De acuerdo con la concejal Diana Rojas, “la capacidad de pago de Cali se conserva en semáforo verde, incluso con el nivel actual de endeudamiento. La ciudad puede seguir respondiendo a sus obligaciones, porque el recaudo tributario es aceptable y está recuperándose luego de la crisis del covid. Desde hace ocho años los ingresos tributarios vienen creciendo en promedio al 3 % y eso sin duda da garantías”.

Sin embargo, señaló que el panorama a futuro no es tan prometedor, pues “el próximo Alcalde va a tener que pagar de servicio a la deuda cerca de un billón de pesos en su cuatrienio y eso sin duda reduce su margen de acción, sobre todo porque se disminuye su disponibilidad de recursos de libre destinación”.

Por su parte, el cabildante Juan Martín Bravo dijo que “el Municipio va a quedar restringido al pago de la deuda. Y si el próximo Alcalde quiere mostrar gestión, tendrá que renegociar con los bancos, por lo que puede que aplace el pago de la deuda, entonces los intereses crecerán nuevamente”.

Es por esto que el escenario ideal, según Bravo, es dedicarse a sanear las finanzas de la ciudad, mientras busca herramientas para aumentar el recaudo de los impuestos.

“Puesto que el empréstito quedó sujeto al Plan de Desarrollo, hay algunos proyectos que no son a largo plazo, como las becas de ‘Todos y todas a estudiar’, recursos que pudieron invertirse en la universidad distrital de la que hablaba el Alcalde”, comentó el concejal.

A esto se suma que el total de pasivos que Cali acumulaba con corte a enero del 2022 eran $ 4,4 billones, casi $ 209 mil millones más que hace un año. Ese indicador no solo comprende los préstamos que ha solicitado el Municipio ($ 2,9 billones), sino también cuentas por pagar, beneficios a los empleados, provisiones y otros pasivos.

Para resolver estas inquietudes El País consultó al Departamento de Hacienda de Cali, pero no tuvo respuesta.

Los 21 proyectos

Así es como quedaron asignados los $ 625 mil millones suscritos hasta ahora:

Renovación de la malla vial por $ 97 mil millones.

Ecoparque Corazón de Pance por $ 60 mil millones.

Construcción de estructura física asociada al MÍO por $ 30 mil millones.

Fondo Solidario por $ 20 mil millones.

Área de Desarrollo Naranja (ADN) Parque San Fernando por $ 60 mil millones.

(ADN) Parque Pacífico por $ 30 mil millones.

Bulevar del Oriente por $ 30 mil millones.

Parque Cristo Rey por $ 29 mil millones.

Corredor Ambiental Cristo Rey por $ 24 mil millones.

Viviendas de interés prioritario e interés social por $ 20 mil millones.

Semáforos inteligentes por $ 55 mil millones.

Catastro multipropósito por $ 41 mil millones

Plaza Alameda por $ 20 mil millones.

Centro de Control para Cali Inteligente por $ 15 mil millones.

Sede IPC en Coltabaco por $ 15 mil millones.

Estrategias de acceso a educación para trabajo y educación superior por $ 14 mil millones.

Talleres por el tejido social $ 10 mil millones.

Comedores comunitarios por $ 4100 millones.

Plan Talentos para estudiantes de grados 10 y 11 por $ 5950 millones.

Metodologías flexibles para atención educativa por $ 2114 millones.

Articulación de niveles educativos por $ 3403 millones.