El ingreso promedio por persona en un hogar caleño fue 15,8 % mayor en el 2021 respecto al año inmediatamente anterior; 24 de cada 100 jóvenes estaban desempleados y 19 de cada 100 menores, entre los 5 y 16 años, se quedaron por fuera del sistema educativo.

Estos son algunos de los indicadores más importantes que presentó el más reciente informe de ‘Calidad de Vida’ del programa Cali Cómo Vamos, que en su primera entrega abordó los temas de educación, salud, mercado laboral, seguridad, finanzas públicas, entorno macroeconómico y dinámica empresarial.

Precisamente, lo más destacado en la ciudad ha sido la recuperación económica, mientras que los retos siguen siendo la educación y la seguridad.

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Llama la atención que en 2021 hubo una reducción del 2,9 % en la matrícula de cursos de básica y media, al pasar de 362.941 niños y adolescentes en el 2020 a un total de 352.422 el año pasado. Esto estuvo impulsado por una caída del 9,6 % en la matrícula de colegios privados. Asimismo, 5 de cada 100 menores que cursaban primaria y secundaria no volvieron a estudiar.

Para Marvin Mendoza, coordinador de Cali Cómo Vamos, “es claro que la pandemia tuvo sus efectos sobre la cobertura educativa, así como en la calidad, según las Pruebas Saber 11. Por ejemplo, en Matemáticas, el puntaje promedio fue 49,3, menor al registrado por los estudiantes de Bogotá, Barranquilla y Medellín”.

Otro aspecto crítico es la seguridad, “el talón de Aquiles de la ciudad”, según Mendoza. En 2021, la tasa de homicidios fue de 54 casos por cada 100 mil habitantes. “Para que nos hagamos una idea, la tasa en Medellín está en los 25 casos y la de Bogotá, en 17”, enfatizó.

La situación de seguridad también se vio reflejada en las denuncias por el hurto a personas, que subieron 45 % respecto al 2020, pasando de 13.119 a 19.016. Los robos al comercio también subieron 6,5 % y el de motos, en un 20,8 %.

Respecto al mercado laboral, se registró una tasa de desempleo en Cali y Yumbo del 14 %, aunque se destaca una reducción del 3 % frente al 2020. “Es estructural que la tasa de desocupación en jóvenes siempre sea más alta que la general, ubicándose en 25 %”, señaló el coordinador de Cali Cómo Vamos.

Esas condiciones también inciden en la brecha de género, pues mientras 63 de cada 100 hombres, con edad para trabajar, estaban empleados, esto solo ocurría en 41 de cada 100 mujeres. A esto se suma que 49 de cada 100 caleños estaban empleados de manera informal.

Sin embargo, un resultado positivo del documento es que la pobreza monetaria se redujo 7 puntos porcentuales. Además, los ingresos de la ciudad crecieron 12 % en el 2021 y eso se reflejó en un mayor gasto y en un impulso a la economía local, que habría tenido un repunte del 5,1 %, de acuerdo con las estimaciones del IMAE (Índice Mensual de Actividad Económica.

Asimismo, el año pasado aumentó 6,6 % el número de negocios creados respecto a las cifras del 2020, comportamiento que se ha mantenido este año. Hasta mayo, el incremento fue del 9,1 %, según la Cámara de Comercio de Cali.

¿Avances en salud?

Este este aspecto el informe de Calidad de Vida indica que hay una cobertura en salud del 100 % en la capital vallecaucana, con el 67,2 % de la población afiliada al régimen contributivo. “Sobresale que en 2021 se presentaron 894 defunciones por cada 100 mil habitantes, dato superior a las cifras del año anterior, que fueron de 772. La mayor causa de muerte fueron las enfermedades infecciosas, entre las que se encuentra el covid”, dijo investigador.

Agregó que se presentaron en la ciudad 9,1 defunciones en menores de 1 año y 10,7 en menores de 5 años por cada 1000 nacidos vivos en 2021. “Uno creería que muertes por desnutrición en menores ocurre en las zonas más apartadas de Colombia, pero vemos que pasa dentro de la misma Cali”, anotó Mendoza.

De hecho, 10 de cada 100 nacimientos en Cali registraron bajo peso, o sea menos de 2500 gramos. Pero también hay inconvenientes en la contraparte: 19 de cada 100 niños en transición y primaria presentaban sobrepeso y 17 de cada 100 sufrían de obesidad.

Igualmente, bajó la tasa de fecundidad infantil por cada 1000 niñas, ubicándose en 0,8 , 0,1 puntos por debajo de las cifras registradas en el 2020. Y la tasa en adolescentes fue de 28,5 por cada mil, por debajo del promedio nacional, que fue de 52,8.

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Para Lina Martínez, directora del Instituto Polis de la Universidad Icesi, “claramente, empeoró la calidad de vida de los caleños. Aparte de que los homicidios se han disparado de una manera importante, el desempleo y la informalidad siguen altos”.

De acuerdo con la analista, la inseguridad provoca desconfianza generalizada en la población, que decide no salir a la calle, no invertir

y gastar menos por temor a lo que les pueda pasar.

“Con una calidad educativa más baja, la acumulación de capital humano en el largo plazo se va a disminuir, por lo que tendremos menos personas cualificadas. La desnutrición infantil también incide, porque esto lleva a menor rendimiento académico, tal como lo han demostrado múltiples investigaciones. Es por eso que la educación y seguridad deben ser aspectos en los que debe enfocarse el Distrito”, exhortó Martínez.