Cannabis Cali sería el nombre de la empresa industrial y comercial que tendría la ciudad y cuyo fin sería cultivar, producir y comercializar marihuana para uso medicinal, industrial y recreativo.
La propuesta que en ese sentido le presentará el alcalde de Cali, Jorge Iván Ospina al Concejo Distrital, ha despertado todo tipo de comentarios en la ciudad y poco respaldo, en especial porque aún en el país no está reglamentado el uso recreativo de esta sustancia.
“Hace muchos años existía el monopolio del estado sobre los licores y el tabaco, y por eso nacieron las industria de licores como la del Valle, Antioquia y la de Caldas. Ahora, en tiempos de buscar la legalización de la marihuana para uso medicinal, industrial y aún para uso lúdico, nos proponemos crear en la ciudad de Cali una empresa industrial y comercial del estado que se llame Cannabis Cali”, expresó el alcalde de Cali, Jorge Iván Ospina.
La propuesta del Mandatario se dio luego de que el presidente de Colombia, Gustavo Petro, planteó que se debería ampliar la regulación del cannabis en el país, la cual hasta el momento solo da vía libre a la producción para fines medicinales.
“Esto nos posibilitará tener un control del cannabis para trabajar en las adicciones y el consumo problemático de algún psicoactivo, además nos posibilitará trabajar para tener recursos y que estos puedan ser invertidos en la salud pública de nuestra gente”, agregó Ospina.
Hay otras prioridades
La propuesta del Alcalde, de entrada, generó controversia. El concejal Roberto Ortiz manifestó que está totalmente en desacuerdo con esta iniciativa e invitó al Mandatario a que, en lugar de estar pendiente de abrir esta empresa, se concentre en solucionar otros aspectos más urgentes de la ciudad.
“Ospina está desviando la atención sobre las reales necesidades de la ciudad; un alcalde es elegido para regir los destinos del territorio que gobierna y hacer buen uso de los dineros públicos, no para estar pensando en negocios. Casi el 75 % de Cali es rural, entonces, cuando él habla de sembrar cannabis ¿estaríamos pensando en invadir todos los corregimientos de sembrados de marihuana?, esto empeoraría sin duda la seguridad de nuestra ciudad”, opinó el cabildante.
Asimismo, Ortiz recalcó que las prioridades en Cali son arreglar la malla vial, mejorar las cifras de inseguridad, los puentes peatonales que hoy están abandonados y garantizar el correcto funcionamiento de Emcali.
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los caleños
“Además no hay confianza en las decisiones que toma el Alcalde, no olvidemos que hace rato viene pensando en crear empresas y una de esas era Calinteligente, con la que iba a entregar el 45 % del alumbrado público de Cali a unos socios privados”, recalcó Ortiz.
No obstante, para el también concejal Fernando Tamayo esta es una propuesta que debe estudiarse con detenimiento y habría que escuchar la opinión de expertos en seguridad, salud e incluso de la misma ciudadanía.
“Aquí hay dos posibilidades, la primera es que cuando se quita el estigma de ilegal, se podría generar más control; pero por otro lado, si se legalizan las drogas qué impacto tendría esto en la inseguridad de la ciudad. Por eso, lo primero que debe pasar es que el presidente Petro presente la propuesta al Congreso y, una vez aprobada, ahí sería el momento de que discutamos la creación de esta empresa en Cali”, comentó Tamayo.
Lo cierto es que el cannabis se ha convertido en una opción de negocio legal en el país y puede ser aprovechado de manera positiva para generar conocimientos y recursos, tal como es el caso de la Universidad Santiago de Cali que firmó un convenio, por 10 años, con la empresa Cannabiswell, para la producción de materias primas y el desarrollo de medicinas para que puedan servir en tratamientos de diversas patologías.
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De hecho, esta institución de educación superior está construyendo un edificio que tendrá un laboratorio especializado en la investigación del cannabis.
Sin embargo, el analista económico y asesor empresarial, Carlos Pérez, manifestó que sería más acertado financiar procesos de investigación científica de universidades y centros tecnológicos, debido a que la experiencia de las empresas creadas y administradas por entidades públicas de Colombia han mostrado grandes dificultades para ser competitivas.
“En ese contexto las posibilidades de que una empresa de carácter local sea exitosa son muy bajas. En el caso específico de Cali, sería ideal lograr atraer científicos y equipos especiales para concentrar en la ciudad grupos de investigación y empresarios de todo el país que lleguen atraídos por el conocimiento asimilado y generado sobre esta industria”, expuso el especialista.
El negocio
Según Procolombia, durante el 2020, a pesar de la desaceleración producto de la pandemia, las exportaciones colombianas de cannabis medicinal alcanzaron los US$ 5,2 millones, mientras que al cierre de 2021, la cifra registró los US$ 4,8 millones, según estimaciones del Dane.
En este momento, el monto total de inversión extranjera en el país en la industria de cannabis medicinal alcanza un valor cercano a los US$ 292 millones, siendo Canadá el principal país inversionista, destinando recursos para 9 proyectos.
Para el 2030 esta industria podría exportar alrededor de US$1.733 millones.