Sí, es posible reinfectarse del virus que causa el covid-19, incluso con el esquema de vacunación completo o con los respectivos refuerzos. La razón, comenta el doctor Carlos Trillos, epidemiólogo y profesor de la Facultad de Medicina y Ciencias de la Salud de la Universidad del Rosario, es el comportamiento del SARS-CoV-2, “que va mutando”.
– Las mutaciones son el motivo por el cuál no adquirimos una inmunidad permanente con la enfermedad o las vacunas, como sí sucede con el sarampión.
Lyda Osorio, epidemióloga de la Universidad del Valle, lo explica así:
– El virus que causa el covid tiene una ‘cara’ que le muestra al cuerpo. El cuerpo responde contra esa cara, no contra el virus completo. Sin embargo, las mutaciones hacen que esa cara cambie, por lo que el cuerpo ya no la identifica. Es lo que pasa con la variante Ómicron: tiene más de 30 mutaciones en su cara, así sea el mismo virus. Por eso se presentan esas reinfecciones y, en algunos casos, podrían ser severas. El Ómicron es lo que se denomina en ciencia una variante de escape inmunológico: tiene la capacidad de escapar, eludir, la respuesta inmune de infecciones previas, por sus mutaciones.
El doctor Trillos recuerda que en el Reino Unido, donde Ómicron afectó a un gran número de personas y reemplazó a la variante Delta, investigaciones como la del Imperial College de Londres mostraron que el riesgo de reinfección por Ómicron es 5,4 veces más alto que Delta y la protección por la infección previa se redujo al 19%, mientras que el estudio SIREN, en trabajadores de la salud, mostraba que las infecciones previas daban una protección del 85% por 6 meses.
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– La dinámica de transmisión de Ómicron se ha documentado con estudios de grupos del Reino Unido y Sudáfrica, que han demostrado como las infecciones se duplicaron cada dos días. El estudio REACT (Real-time Assessment of Community Transmission) en Inglaterra, con pruebas de hisopado, mostró un alto riesgo de reinfección por Ómicron, en el que encontraron que de las personas con prueba positiva, el 64,6% confirmaron haber tenido una infección previa, con la advertencia de que puede haber una sobre estimación en los resultados. Si bien estos son una aproximación en una región específica, muestran el riesgo de reinfectarse con esta nueva variante.
Ahora, una reinfección por el virus que causa el covid se ha definido como los episodios de síntomas que se presentan tres meses después de haber tenido un episodio previo de la enfermedad. Y lo que se ha demostrado hasta el momento es que es improbable volverse a reinfectar de la misma variante que ingresó al cuerpo por primera vez. Esto también sucede por las mutaciones. Como el virus cambia, las anteriores variantes dejan de circular.
Según Observadores Colombia, el promedio diario de contagios del virus que causa el covid en enero en el Valle fue de 3.595, es decir un aumento de 8,3 veces.
En todo caso, se cual sea la variante con la que nos infectemos por primera vez, los científicos han demostrado que haber superado un episodio inicial de covid deja algo de protección ante nuevas variantes, por lo que se reducen las probabilidades de tener una reinfección grave, que implique hospitalización o muerte, aunque ello no se descarta. El problema es que tras dos años de la pandemia, aún se desconoce con precisión cuánto dura la ‘protección natural’ por una infección previa.
– Por eso es tan importante la vacunación y sus refuerzos, para ir estimulando esa respuesta inmune y que cada vez sea más madura. Las reinfecciones también se presentan porque se va perdiendo con el tiempo la protección contra el virus, a lo que se suma las mutaciones, que escapan a la respuesta inmune del cuerpo – dice la epidemióloga Lyda Osorio.
Aunque es menos probable que una reinfección sea más severa, esto podría ocurrir, debido a que la respuesta inmune de cada persona es heterogénea. Además, se debe considerar si la persona que se reinfecta es adulta mayor, o tiene comorbilidades como diabetes, obesidad, hipertensión. El riesgo de complicarse por una reinfección depende de persona a persona.
Justamente las estadísticas recientes le dan la razón a la Organización Mundial de la Salud, que advirtió que aunque la variante ómicron es menos letal, “no se debe subestimar”. El miércoles de esta semana, por ejemplo, Colombia reportó 282 fallecidos por covid, una cifra similar a la última semana de julio de 2021, durante el tercer pico de la pandemia.
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El problema con Ómicron es que es la variante del virus más transmisible que se conoce. La curva de los contagios en realidad es una vertical. La velocidad de transmisión y el número de infectados es tan alto, que inevitablemente se genera congestiones en los servicios de salud, baja la capacidad de respuesta de los mismos, y a su vez el virus tarde o temprano encuentra personas susceptibles a desarrollar una enfermedad grave o muerte bien sea por sus comorbilidades, o porque no están vacunadas.
Según la empresa de análisis de datos Observadores Políticos y Económicos de Colombia, que utiliza herramientas de big data para generar alertas tempranas sobre el covid en Colombia, Ómicron ha aumentado los contagios en el Valle en un 828% en enero de este 2022, comparando los datos de diciembre de 2021.
Por otra parte, aún se estudia por qué hay personas propensas a complicarse con una reinfección aunque ya les haya dado covid antes. Puede obedecer a factores genéticos. Por ahora es una de las hipótesis de los científicos.
– Incluso jóvenes sin comorbilidades fallecen en una segunda infección. La respuesta inmune de ellos hace que sea más severa. Es menos frecuente, pero sucede y todavía no se conoce la razón – advierte la epidemióloga de la Universidad del Valle, Lyda Osorio.
Desde la mitad de diciembre de 2021, informó la Secretaría de Salud, en Cali
se evidencia un incremento en los casos positivos y el inicio del cuarto pico de contagios
Además, también hay personas que podrían reinfectarse del virus que causa el covid en más de dos ocasiones, como ya le sucedió a la exgobernadora del Valle, Dilian Francisca Toro, o la Vicepresidenta y Canciller de Colombia, Marta Lucía Ramírez.
Lo que se sabe hasta el momento es que obedece a que son personas cuya respuesta inmune es menor. Ello tiene que ver con la edad, con las comorbilidades como la diabetes, o a que se tomen medicamentos para tratar alguna enfermedad que hacen que bajen las defensas, como las personas que han tenido trasplantes de órganos o quienes tienen cáncer. Y a lo anterior se suma lo ya mencionado: no solo es baja la respuesta inmune del cuerpo, sino que el virus muta, la evade.
Los científicos insisten en que tras dos años de pandemia, la humanidad debe aprender a convivir con el SARS-CoV-2, que será endémico a futuro, es decir que se presentará cada cierto tiempo, como el dengue. Espaciar en el tiempo esos brotes del virus dependerá sobre todo de las lecciones aprendidas: lavarse la manos con frecuencia, lo que implica tener acceso a agua y jabón en las escuelas, las oficinas, los lugares públicos, si se tiene gripa ponerse un tapaboca para no contagiar a los demás, y si es posible aislarse en casa, mantener los edificios, las oficinas, los hospitales debidamente ventilados de forma natural, lo que también supone un reto para los arquitectos.
– La pandemia actual debe dejarnos todo ese aprendizaje, porque entre otras cosas no será la última pandemia que enfrente el mundo en los próximos años – dice la epidemióloga Lyda Osorio.
Mortalidad en Cali
La distribución de la mortalidad por sitio de residencia en Cali, evidencia que la comuna 17 es la que más casos presenta con 474 fallecimientos por covid, y de la misma manera, las comunas de las zonas del centro y ladera se ubican como las que más casos de mortalidad en la ciudad.
De cada 100 muertes 22,5 y 22,8 vivían en estas zonas, respectivamente; según la tasa de mortalidad la comuna 2 es la que presenta la tasa más alta con 2115,0 defunciones x100.000 habitantes.