“Es muy difícil construir en Cali y en Colombia, en general. Yo estuve construyendo en Nariño y los ‘Elenos’ (ELN) me tenían seco; en Guachené, hace cuatro semanas me le pegaron un tiro a un trabajador, y hace cuatro meses me secuestraron un tío, entonces si te vas para el monte te cogen los grupos ilegales, y si te quedas aquí te come la sociedad”.
La afirmación la hizo el ingeniero Jorge Amézquita, director general del grupo empresarial Amézquita Naranjo Ingeniería, que en este momento está liderando las obras más importantes que se construyen en Cali para mejorar la infraestructura vial, como es el caso de la ampliación de la vía Cali – Jamundí, el nuevo Puente de Juanchito y el mejoramiento del acceso a Pance.
El contratista, quien explicó porqué todos los proyectos viales que se ejecutan actualmente han tenido retrasos, también se refirió a la reciente polémica que generó la extracción de piedra en el río Pance, otra actividad en la que está involucrado, a través de su empresa Pétreos de Occidente.
En video: ¿cómo quedaron las obras del Corredor Verde en Cali?
Hace tres semanas hubo un revuelo por la extracción de piedra en Pance, explíquenos realmente qué impacto le están generando al río.
El impacto es positivo, en el sentido que evitamos que en las épocas de invierno el río inunde. Si no lo dragamos, la CVC se vería obligada a gastar unos cuantiosos recursos como lo hace en el río Frayle, en La Vieja, inclusive en el río Cauca, porque no tiene esta licencia de explotación.
Sin embargo, la misma CVC suspendió las actividades y habló de un impacto paisajístico y unas correcciones que se debían hacer…
El impacto del que hablan fue por un carreteable (vía por donde transitan las volquetas) que pareciera que estuviera en la mitad del cauce, pero lo que pasa es que el río se ha secado por el verano, entonces parece como si el carreteable estuviera dentro.
La CVC pidió una suspensión preventiva para poder hacer de una manera coordinada la explotación del río y nosotros somos conscientes que tenemos que hacerlo así para que el tema no genere las incomodidades que puede generar.
Usted dice que el impacto que generan es positivo, pero la Procuraduría Ambiental también se ha pronunciado sobre el tema y ha dicho que hay impactos negativos...
Hubo una sentencia en un tribunal donde le dieron la razón a la CVC, se estaba haciendo una operación legal, nosotros en ese momento no éramos los dueños de la licencia, nosotros adquirimos Pétreos de Occidente en enero de este año... el fallo salió favorable a la CVC en los términos que le digo y es que el dragado hay que hacerlo para evitar las inundaciones en ola invernal.
¿Cuándo van a reactivar la actividad de extracción?
Depende de que cumplamos con los requerimientos de CVC, eso no tiene un tiempo determinado, esperamos que ellos nos den instrucciones.
Hablemos de Pétreos de Occidente, ¿quiénes son?
Pétreos de Occidente es una empresa del grupo de Amézquita Naranjo Ingeniería, nosotros la compramos en enero porque Amézquita Naranjo Ingeniería tiene una división exclusiva de mezclas asfálticas, la planta de asfalto nuestra y la planta de concreto están en Jamundí y necesitábamos la materia prima para el desarrollo de las mezclas, tuvimos la oportunidad de negociar con los dueños de Pétreos de Occidente y pudimos comprarle las acciones de la compañía.
Esta actividad minera genera mucha molestia en la comunidad, ¿cómo garantizar que lo hacen de una manera responsable?
La licencia de explotación está basada en un criterio técnico, el cual dice que debemos mantener los niveles de las piedras en un nivel determinado. La actividad se hace de lunes a viernes, de 7:00 a.m. a 5:00 p.m., solo van carros de nuestra compañía y pueden ir máximo cinco carros, disponemos de cinco volquetas que hacen la extracción y una sola excavadora, nosotros no le vendemos a terceros, lo que surja de la extracción lo llevamos a nuestra planta, ahí lo trituramos y es con lo que producimos el asfalto para la Cali – Jamundí, para el puente de Juanchito, y las otras obras.
Precisamente, aparte de la extracción de piedras ustedes participan en varios de los proyectos viales e importantes que se están desarrollando en Cali, como la ampliación de la vía Cali – Jamundí, ¿cómo va esta obra?
Como en todas las obras del Municipio, tiene algunas dificultades pero no por falta de gestión de la Alcaldía, hay un divorcio entre las autoridades ambientales de Bogotá y el Municipio de Cali, a nosotros nos exigen los permisos de intervención de cauce sobre el río Lili, el aprovechamiento forestal de todos los árboles que tenemos a lo largo de la vía nos los dé la Anla (Autoridad Nacional de Licencias Ambientales) y la Anla se ha tomado seis meses y a hoy no los tenemos.
Entonces, ¿cómo avanza la obra?
Hemos podido intervenir sectores donde los permisos no son necesarios, estamos trabajando la Carrera 122 hasta Piedra Grande; ya estamos haciendo los pilotes para el puente de la 122, una empresa caleña está haciendo la estructura metálica de los puentes, el problema es que no vamos a poder levantarlo porque no nos han salido los permisos de aprovechamiento forestal.
Inicialmente la Alcaldía había dicho que en diciembre entregaba esta obra, ¿entonces esa fecha ya no es posible?
No, es claro que no. A diciembre podremos tener el tercer carril del costado oriental, entre la Avenida Cañasgordas y la 127, quisiera que tuviéramos el puente de la 122, pero siendo sincero no veo rápida la gestión de la Anla.
¿Cuándo estará lista la ampliación de la vía Cali - Jamundi?
No podemos entregar un cronograma si no tenemos los permisos, de todos modos teníamos un contrato inicial de diez meses, que ha tenido ejecución del 20 %. Todo el año entrante vamos a estar trabajando en ese tema, puede que la entidad quiera entregarla en junio, pero tenemos que contar con los permisos.
La construcción del nuevo puente de Juanchito es otra obra que lleva tres años en ejecución, ¿qué ha pasado y cuándo va a estar lista?
Esta obra me tiene muy contento porque hoy vamos llegando al 50 % de ejecución presupuestal con la llegada de los aisladores sísmicos (elementos traídos desde Estados Unidos que hacen que el puente sea sismorresistente). Esta obra tuvo dificultades por cambios en diseños, actividades de gestión predial y unos problemas, que finalmente se resolvieron, porque la gente se estaba quejando que las vibraciones estaban afectando sus viviendas.
La obra también tuvo problemas con un cimiento que fue demolido, después de estar listo...
Sí, todavía lo estamos demoliendo, fue un error de calidad, pero para eso es el control y esas pérdidas las asumimos nosotros como contratista.
Y sobre la fecha de entrega de la obra...
Vamos en $15.000 millones de facturación, sobre un contrato inicial de $28.000 millones. Con eso nosotros quedamos muy cerca de la meta de este año que era llegar al 75 % de ejecución... llevamos dos años haciendo la parte de abajo, la cimentación, y ahora vamos a comenzar la parte de arriba. En abril del 2019 tenemos que entregar la superestructura del puente.
Usted también tiene a cargo la ampliación de la vía a Pance, que ha tenido un retraso importante y lleva más de tres meses suspendida...
La obra ya se reactivó, el Alcalde nos logró entregar 300 metros de vía adicionales para trabajar, pero de estos 300, 150 metros requieren permiso de la Anla. A la fecha se han ejecutado 1,5 kilómetros y con el presupuesto que tenemos ($20.000 millones) alcanzamos a hacer un kilómetro más, la idea es que queden 3,5 kilómetros.
¿Para cuándo estará la ampliación de la antigua vía a Yumbo?
Nosotros teníamos un compromiso de pavimentar hasta la Calle 36 el mes pasado, ese compromiso se cumplió en las dos calzadas, también teníamos que trasladar las redes y ya se hizo. El 50 % de nuestro proyecto está concentrado en un predio que se conoce como el predio de las Velasco, que se fue por expropiación y nos lo entregaron hace dos meses, y los permisos hace un mes y comenzamos a trabajar, en este momento estamos trabajando ahí y estamos trabajando en la vía. La gobernadora (Dilian Francisca Toro) me ha pedido que termine en diciembre.
Si uno ve el balance de todas estas obras, predominan los retrasos y la percepción de la comunidad es que los contratistas se roban los recursos, ¿cuál es la realidad?
Es un problema estructural de la sociedad colombiana, nosotros nos gastamos seis meses haciendo unos estudios y diseños como entidad y las obras se demoran dos años, lo que debería ser es que nos gastáramos dos años haciendo estudios y diseños y seis meses en las obras, entonces uno entra a una obra y no tiene permisos, no tiene predios, en los diseños tienen que hacerse los ajustes y en ese devenir de cosas es que las obras se alargan.
¿Cómo hace Amézquita Naranjo para ganarse el desarrollo de las obras más importantes para Cali?
Hay que licitar, yo soy juicioso en las licitaciones, y me he ganado obras importantes gracias a Dios, porque me presento a las obras importantes. Ahora, ¿qué por qué gano?, en temas de construcción de vías uno tiene que tener respaldo y nosotros tenemos una planta de asfalto, creo que eso es una fortaleza importante. También he hecho asociaciones con gente que ha sido exitosa licitando aquí.
¿A cuál gente se refiere?
Por ejemplo Fernando Castro es un contratista viejo de la Alcaldía que sabe cómo licitar con la Alcaldía de Cali; Jaime Puerta en la Gobernación del Valle, generalmente son ese tipo de consorcios que hay que manejar, y ahora con ese aprendizaje estamos trabajando con Latco.
Desde el Concejo Municipal se ha cuestionado el tema que las licitaciones siempre se las ganan los mismos, ¿hay algún tipo de favorecimiento en esto?
No, todo el mundo puede criticar, pero el tema es que nosotros como Amézquita tenemos tres contratos con la Alcaldía y dos con la Gobernación, lo que pasa es que son grandes.
Yo solo contrato lo que sé hacer, que son vías, no crea que ha sido fácil, también he quedado de segundo, de tercero, de cuarto muchísimas veces, pero eso uno no lo cuenta, uno cuenta lo que se gana.
“Hay desconfianza en los contratistas”
¿Qué es lo más difícil de construir obras en Cali?
La sociedad. Nosotros tenemos un exceso de normas y la gente no lo conoce, entonces al conocerlo acaban con el que esté haciendo bien las cosas, hagas lo que hagas siempre lo vas a hacer mal, entonces si vas a mover un árbol que por qué lo mueves; si vas a cortar, que por qué cortar; si la vía es de tres carriles que por qué no la hicieron de cuatro; hay una desconfianza total en los contratistas y en las instituciones... Es muy difícil construir en Cali y en Colombia en general, yo estuve -construyendo en Nariño y los ‘Elenos’ (ELN) me tenían seco, en Guachené hace cuatro semanas me le pegaron un tiro a un trabajador y hace cuatro meses me secuestraron un tío, entonces si te vas para el monte te cogen los grupos ilegales y si te quedas aquí te come la sociedad, es muy difícil.