Juan Sebastián Delgado, consultor en comunicación digital política, explica por qué Tik Tok se convirtió en la mejor ‘plaza pública’ del ingeniero Rodolfo Hernández para atraer simpatizantes que voten por él para la Presidencia de la República.
Si bien el experto asegura que el éxito del aspirante por la Liga de Gobernantes Anticorrupción no solo obedece a sus contenidos en redes sociales, dice que es indudable que se ha convertido en un fenómeno político a nivel nacional, luego de sacar casi seis millones de votos en la primera vuelta del pasado 29 de mayo.
Juan Sebastián, en un hilo que usted publicó en Twitter decía que no es cierto que Rodolfo Hernández es el rey del Tik Tok. ¿Por qué?
Más que desmentir que sea el rey del Tik Tok, como él mismo se ha autodenominado o como algunos medios lo han hecho, es clarísimo que Tik Tok es una red importante para él y que es quien tiene allí la comunidad más grande de todos los candidatos presidenciales.
Esta es la primera elección presidencial en Colombia en la que se utiliza Tik Tok o, por lo menos, en la que se vuelve protagonista, porque hace cuatro años no la teníamos en el radar. Entonces, quien lo hiciera bien, obviamente iba a sobresalir frente al resto de candidatos.
Es clarísimo que Tik Tok es una red importante para el ingeniero Hernández y que él es quien tiene allí la comunidad más grande de todos los candidatos”.
¿Por qué él logró que sus contenidos en esa red social calaran más que los de los otros candidatos?
El ingeniero Hernández tuvo unos contenidos que, tanto en forma como en fondo, funcionaron muy bien para esta red social, pero esa no fue la única red en la que sucedió. He leído en diferentes medios que dicen: ‘es que es por Tik Tok que está donde está’, y no. Tik Tok fue, digamos, la piedra angular, en el sentido de que en esa red se mostró más descomplicado, más cercano; entendieron muy bien los formatos y tendencias que Tik Tok utiliza y generaron contenido muy exitoso, que era entretenido y no necesariamente ridículo.
Esta semana, en un noticiero de televisión mostraron a Gustavo Petro tratando de hacer un Tik Tok mientras cocinaba. ¿Cree que a él le funcionará esa estrategia?
Una cosa que hay que decir a ‘calzón quitao’, muy al estilo de Rodolfo Hernández, es que después del primero todos son segundos; y esto quizás suena a frase de cajón, pero finalmente quien hoy está en boca de todo el mundo, y estamos hablando precisamente sobre su uso de Tik Tok, es Rodolfo Hernández. Entonces, de ahí para allá, cualquiera.
En este caso, Gustavo Petro siempre va a quedar en una segunda instancia, pero no es un tema de igualarse, es un tema de entender estratégicamente las redes sociales en estos días que les quedan de campaña y mirar dónde está la comunidad que cada uno de ellos necesita.
Considero que los debates son un tema
de respeto con la democracia, con la ciudadanía, pero principalmente con los medios que abren este tipo de espacios”.
¿Y cuáles serían esas claves para descifrar dónde está esa comunidad y alcanzar los votos que requieren para ganar?
Vemos que Gustavo Petro está pensando que la suya está en Tik Tok y por eso está creando contenidos en esta red social; pero tal vez el ingeniero Hernández, que ya tiene allí una comunidad construida, esté entendiendo que ya Tik Tok está bien, que lo va a dejar así, aunque sigue subiendo contenidos para fidelizar a la comunidad, y fortalecerá otras que tal vez son más efectivas en la transmisión rápida de mensajes, como las que tiene en los diferentes grupos de WhatsApp, por ejemplo.
Volviendo a Hernández, el día de las elecciones llamó la atención que su discurso de paso a la segunda vuelta lo dio, vía Facebbok, desde la cocina de su casa...
Hay básicamente tres cosas para tener en cuenta: lo primero es que Rodolfo Hernández, desde comienzos de su campaña, dijo que él iba a ser un candidato digital, que no iba a invertir tantos recursos en otros escenarios, ni siquiera en medios tradicionales de comunicación: prensa, radio o televisión.
Por ende, tenía que continuar con esa narrativa de ‘soy un candidato digital’ y ser coherente con ese discurso. Segundo, aunque para algunos Facebook está muerta, es la red política número uno del país, entre otras cosas por dos elementos: uno es la red que tiene mayor grupo etario que interactúa y comparte contenidos, porque hay otras, como Twitter, que muchos ven, pero no comparten contenidos, así como el mismo Tik Tok.
En cambio, en Facebook hay algunos grupos que son activos, es decir, no solo consumen el contenido sino que también lo comparten. Además, este es un país rural y Facebook llega mucho a la ruralidad y a municipios de baja categoría donde no usan tanto otras redes sociales.
Finalmente, Hernández tenía que seguir con su marca, con su identidad de ser un poco descomplicado en el discurso, mucho más cercano, y la red social siempre será mucho más cercana que un medio de comunicación tradicional, entre otras por el mismo formato que maneja.
“Las redes sociales políticas no deberían ser un tema de campaña, sino de vida, porque la marca no se construye en tres meses, sino a través del resto de la vida”.
¿Cuáles serían algunas de las ventajas de estos nuevos formatos versus los tradicionales, como las ruedas de prensa?
Una rueda de prensa tradicional es una persona sentada frente a una mesa o un atril y con un montón de cámaras al frente y la gente en su cerebro diciendo ‘esto es muy institucional’, distinto a lo que está haciendo el ingeniero Hernández en este momento, que puede ser más tipo conversación, más cercano, donde la gente puede preguntarle en tiempo real o ver el espacio en el que se encuentra, como por ejemplo el 29 de mayo, que estaba en la cocina de su casa. Esto genera cercanía, lo muestra como un ciudadano común y corriente, no como un político tradicional.
En esa medida, ¿cómo se transformarán a partir de ahora las campañas políticas?
Es una pregunta muy interesante, porque el tema digital viene en ascenso desde hace varios años. Incluso, podríamos remontarnos en el 2010, a la campaña de (Antanas) Mockus, y de ahí para acá todo ha ido transformándose.
Creo que la transformación de las próximas campañas van a ser alrededor, más que del uso de muchos canales, probablemente saldrá uno que otro el año entrante, pero las redes bases serán las mismas.
La estrategia será cómo entender lo que la ciudadanía está sintiendo, lo que llamamos el humor social; cómo entender estos sentires, esas expectativas de la ciudadanía y esa información llevarla a contenidos que la gente pueda consumir de forma clara, corta y sencilla. Eso es lo que nos gusta en redes sociales, algo que nos entretenga, que nos pueda llegar a educar, pero también donde podamos generar conversación.
Esa es parte de la ‘transformación’ digital de las elecciones para el año entrante. Tik Tok seguramente cogerá más fuerza, especialmente en grupos de jóvenes votantes y ahí les va a tocar innovar a los candidatos, que tendrán que pensar cuáles son los contenidos, qué está de tendencia, cuáles son los formatos, etc, pero además el uso de los datos, lo que llamamos el big data, el social linstening (la escucha social), coger toda esta información y cruzarla con lo que se está viendo en la calle.
“No se puede pensar una campaña política solo con lo digital, que es una parte dentro de un gran engranaje de acciones que llevan a construir la victoria”.
¿Y cómo analiza que Gustavo Petro haya dicho que “la corrupción no se combate con frases de Tik Tok”, en una especie de indirecta al principal tema de campaña de Hernández?
Cabe decir que aunque las redes sociales fueron significativas dentro de la campaña de Rodolfo Hernández, no han sido el único elemento. Por eso he dicho que no se puede pensar una campaña política solo con lo digital, que es una parte dentro de un gran engranaje de acciones que llevan a construir un resultado positivo, que es la victoria. Las redes políticas, si alguien quiere construir marca, no deberían ser un tema de campaña, sino de vida, porque la marca no se construye en tres meses, se construye a través del resto de la vida.
Es unir estratégicamente acciones fuera de la red con contenidos, acciones y elementos que metemos en la red, pero no desligarlos, sino que deben ir de la mano.
¿Todos los temas deben tratarse a través de lo digital o hay algunos que requieren mayor ‘formalidad’?
Voy a cambiar la palabra formalidad por institucionalidad, porque se puede ser un poquito informal, incluso en eventos institucionales, pero diría que sí hay unas acciones que ameritan, por la condición, por el contexto y el mismo protocolo que tienen, una formalidad y una institucionalidad como tal, y otras que pueden romper un poco ese imaginario tan cuadriculado, pese a que no sea necesariamente tan digital.
¿Y qué piensa de la decisión anunciada por la campaña del santandereano en el sentido de que no asistirá a debates en esta segunda parte de la carrera por la Presidencia?
Creo que el tema de los debates, más que generarle nuevos votantes, que probablemente no le va a generar muchos, es más un tema de agradecimiento, de respeto con los medios de comunicación que abren este tipo de espacios para que la ciudadanía conozcan a los dos candidatos. Porque no es un tema siquiera de conseguir o de atraer gente, porque es claro que Rodolfo Hernández tiene que atraer los millones que le faltan para ser presidente, al igual que Gustavo Petro.
Entonces, este es un ejercicio de atracción y lo mismo que dije hace un momento: ¿dónde están los posibles votantes de Rodolfo Hernández? Probablemente una parte esté en redes sociales, quizás otra esté en la calle y, en menor medida, en los debates, pero sí considero que es un tema de respeto con la democracia, con la ciudadanía, pero principalmente con los medios.
En el comunicado sobre el tema dice que seguirá dando entrevistas a los medios y que hará transmisiones en vivo, como lo viene haciendo desde que era Alcalde de Bucaramanga...
Continúa con la misma narrativa desde que era Alcalde, no es algo nuevo; para citarle un ejemplo, mientras se realizaba el último debate a nivel nacional, él, al mismo tiempo, aunque no era un debate porque era solo, se dedicó a interactuar con la ciudadanía, lo que le ayuda a atraer gente nueva. Sin embargo, un debate le puede servir para llegar a ese grupo que todavía no sabe quién es el ingeniero Rodolfo Hernández.