Cali cerró el primer mes del año con 82 homicidios, lo que significa un aumento del 11% si se compara con el mismo periodo del año anterior, cuando se registraron 74 casos.

Según cifras del Observatorio de Seguridad, el 94% de las víctimas (77) fueron hombres y el 6% (5) mujeres. Además, los días donde más se presentaron homicidios en enero fueron los domingos, con 24 casos, seguido de los martes, con 11 reportes.

El comportamiento de los crímenes sigue siendo igual al registrado en años anteriores, pues las comunas 13,14 y 15, al oriente de la ciudad, siguen siendo las más violentas.

Por ejemplo, en la Comuna 15, donde están ubicados barrios como El Vallado, Ciudad Córdoba, Llano Verde, Mojica, entre otros, en los primeros 31 días del año asesinaron a 15 personas, por lo que es la más violenta de Cali.

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En los reportes de las autoridades el único sector de la ciudad en donde hasta el momento no se han presentado asesinatos en la Comuna 7.
“Como terminamos con un aumento de homicidios en el primer mes del año, se generará una estrategia de contención del homicidio en febrero. El reto es que en este mes que inicia se eviten muertes y las cifras no suban”, explicó Jimmy Dranguet, secretario de Seguridad de Cali.

El funcionario añadió que como en el primer mes del año se logró consolidar una estrategia muy importante en el Distrito de Aguablanca para reducir los crímenes, desde febrero se replicará en otras comunas de la ciudad, como la 20, 18, y 6.

Según el reporte del Observatorio, el 80% de los homicidios en Cali se cometieron con arma de fuego, es decir 66 casos; mientras que el 17% se produjo utilizando un arma blanca, lo que se traduce en 14 reportes. Finalmente, el 2% se realiza con otras armas sin identificar.

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“Da la sensación de que enero es un mes que siempre le ha generado problemas a Cali. Sin embargo, al mirarlo con una perspectiva de largo plazo, sigue siendo un mes relativamente menos violento que el mismo periodo en la década anterior. Aún así, es inquietante que iniciemos con más homicidios que en 2022 por dos motivos: venimos de registrar como éxito que tuviésemos menos de 1000 homicidios en un año, y segundo, porque aquí no se perciben aún los efectos de la política de paz total del Gobierno Nacional”, comentó Andrés Galindo, experto en temas de seguridad.

Si se analiza la problemática por barrios, los más afectados son: Mojica y Ciudad Córdoba, cada uno con 4 homicidios; Comuneros I, Sucre y Alto Jordán siguen en la lista con tres asesinatos en cada barrio.

“Probablemente este año el efecto inflacionario ha generado una mayor presión para el aumento de actividades ilegales que ponen en riesgo a la población. Esto se ha visto también en otros países, donde la presión inflacionaria esta muy relacionada con comportamientos violentos”, explicó Adalberto Sánchez, director del Instituto de Investigación y Desarrollo en Prevención de la Violencia y Promoción de la Convivencia Social, Cisalva, de la Univalle.

Sobre por qué siguen siendo las mismas zonas de la ciudad las más afectadas por el homicidio, Sánchez dice que esto es el reflejo de que las intervenciones en estas zonas calientes no han sido efectivas y que se han tomado decisiones de política pública que no han tenido el impacto esperado. “Generalmente estos son lugares de alta exclusión e inequidad en donde acciones de vigilancia y control no son efectivas y se necesita una transformación socioeconómica que impulse desarrollo y bienestar”.

Al preguntarle a Andrés Galindo sobre si los 82 homicidios de enero ponen en riesgo la meta de tener menos de 800 al finalizar el año, explicó que todavía es un poco apresurado dar un diagnóstico, pero “un primer impulso dice que, desde luego, no conviene este indicador de enero. Hay que esperar la tendencia del año”.