¿Qué ha pasado con el Plan Jarillón?, encienden alertas por temporada de lluvias

A paso lento pero seguro, así podría decirse que avanza el Plan Jarillón del río Cauca, que por estos días, por la ola invernal preocupa a las autoridades porque aunque hoy no se tiene un riesgo inminente de que el río llegue a la altura del dique y sobrepase e inunde la ciudad, provocando un desabastecimiento de agua potable en el 75 % de Cali, y afecte a 900.000 ciudadanos, la probabilidad está, baja, pero está.

A la fecha, de los 26.1 km que tiene el jarillón se han contratado 25,3 km, 19 km ya se reforzaron (73,8% de avance). El año pasado se alcanzó a ejecutar 4.8 km y en este primer trimestre del 2021 se han adelantado trabajos en 1 kilómetro. Esto, teniendo en cuenta que desde 2015 -cuando arrancó el Plan Jarillón- hasta el 2019 se ejecutaron 13.1 kilómetros. Se espera que en el 2022 se culminen todas las obras de reforzamiento del dique.

Así, de esta forma se logre mitigar el riesgo de inundaciones y en una ola invernal, como la que actualmente se está viviendo, no se tenga tanto temor.

Como lo expresa el gerente del Plan Jarillón, Eli Shnaider, a pesar de que “hemos avanzado como nunca en el Jarillón todavía nos hace falta 7 kilómetros aproximadamente. Hasta que no esté el 100 % del dique, Cali tiene gran vulnerabilidad”.

Para María Isabel Ulloa, directora ejecutiva de ProPacifico, el reforzamiento que ha tenido el jarillón ha sido importante, “no estamos completamente protegidos porque faltan kilómetros, pero de alguna manera el riesgo ha ido bajando. Como ciudad tenemos que sentirnos tranquilos y de alguna manera aliviados de que eso está pasando, la situación de hoy es muy diferente a la del 2010 cuando justamente se vio la necesidad de reforzar el jarillón”.

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Y es que si la obra hubiera avanzado a buen ritmo, incluso terminado en el 2019 como se había proyectado, “esta ola invernal nos cogería con menos preocupación, pero la verdad es que estamos pegados del techo. Estamos en emergencia ambiental”, dice Shnaider.

La preocupación no es para menos, aún faltan cerca de 40 días del fenómeno de la Niña, y en días anteriores el río Cauca llegó a estar a 80 cm de su zona inundable.

En este sentido, el Gerente del Plan Jarillón precisa: “Es probable que el Cauca logre sobrepasar la altura del dique pero es muy baja, existe una mayor probabilidad de que crezca a sus zonas inundables y afecte 2500 hogares que todavía están en la cara húmeda, estamos en alerta máxima por ellos; estamos preocupados por avanzar en la obra”.

Pero no ha sido fácil, pues asegura que el gran problema de los atrasos del Plan Jarillón es que no se tenía, o no se tiene aún, la suficiente oferta de vivienda para reasentar a las familias, y además, “la existencia de las casas en la zona imposibilitaba adelantar obras”.

Es por esto que, aunque la pandemia también retrasó los planes de obra, el equipo del Plan Jarillón tuvo que buscar nuevas estrategias para acelerar el reforzamiento, y no solo por la necesidad de avanzar sino también porque los contratistas a cargo de los tramos -contratado por el Fondo de Adaptación y la CVC- estaban pidiendo suspender contratos e incluso hasta demandar porque “no podían avanzar un metro, ahí decidimos recorrer los 26 km, y entendimos que la obra nos cabía por la corona del dique, por todo el centro de la vía”.

Y entonces se optó por la concertación y el diálogo con la comunidad “lo que nos ha permitido avanzar”.

Y es que como lo señala Marco Suárez, director de la CVC, lo más difícil de la ejecución de obras ha sido la concertación con la comunidad que se encuentra asentada sobre la corona, en lo que se denomina la franja de obra.

En el 2020 no se continuó con la estrategia de restitución, ya que es un operativo bastante traumático para la comunidad y también para el Estado, y “eso nos ha bajado la atención con la población porque no llegamos con la fuerza estatal, sino de forma más amable y empática”.

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Así entonces se dejó de trabajar por franja de obra liberada, -tumbar los techos para que la obra lleguen- sino que se trabajó por franja de obra habilitada, a través del diálogo con la comunidad, aún viviendo en la zona, se podría habilitar para que se pudiera avanzar la obra.

Para este año se deben redoblar esfuerzos para continuar con obras especialmente de los tramos IV, V y VII que están en ejecución y el tramo VI que arranca en agosto (ver básico) porque “si no actuamos ahora y construimos las obras de reforzamiento para mitigar el riesgo de inundación, podríamos vernos abocados a situaciones devastadoras, dolorosas y muy complejas de superar. Se ha estimado que, en caso de suceder un evento catastrófico de gran magnitud, Cali podría tardar más de 25 años en recuperarse”, anota Suárez.

Además, la planta de agua potable de Puerto Mallarino -que abastece el 75% de agua de la ciudad-, la planta de tratamiento de aguas residuales de Cañaveralejo -que trata el 70% de las aguas residuales que se generan en la ciudad- y el sistema de drenaje o alcantarillado del oriente también podrían colapsar.

Para evitar lo anterior, Emcali ha desarrollado varios proyectos, por ejemplo, hizo la recuperación hidráulica de la Laguna del Pondaje y Charco Azul. “Aspiramos a llegar a un total de recuperación de la Laguna de 30 hectáreas, hemos recuperado 23 hectáreas, nos quedan 7, que es la inversión que se está proyectando en los próximos 3 a 4 años, se necesitan alrededor de $30.000 millones”, cuenta Jorge Ospinal, jefe de la Unidad de Interventoría de Acueducto y Alcantarillado de Emcali.

En la estación de bombeo de paso de comercio, añade el también supervisor del convenio Plan Jarillón, ya se instaló dos compuertas para evitar que la planta se inunde y que el canal oriental se rebose y afecte a las comunidades aledañas. Aún se necesita repotenciación de las cuatro bombas y para ello se requieren cerca de $130.000 millones.

En la planta de Puerto Mallarino se hicieron obras de protección a la bocatoma.

$608 mil 224 millones aporta el Fondo de Adaptación al Plan Jarillón.
$135 mil 500 millones aporta Alcaldía de Cali.
$120 mil 500 millones aporta la CVC.
$60 mil 300 millones pone Emcali.

Las viviendas que deben ser entregadas a personas retiradas del jarillón no están listas, según indica el gerente Eli Shnaider. De hecho, dice que en el 2020 se debían entregar cerca de 900 apartamentos y solo se hizo entrega de 260 en los proyectos Río Cauca II y Torres de Alamadina.

Es por esto que anota que en el Plan Jarillón “no todo está bien. Estamos desfinanciados en materia de vivienda, nos hace falta recursos para atender algunas personas que están verificadas, y el gran problema es que entre el 2013 y 2019 llegaron más habitantes a la zona, y hoy no se pueden atender con las compensaciones del Jarillón”.

Además, hay familias que llevan entre 2 y 5 años esperando por vivienda propia, como es el caso de Jackeline Ariza, quien afirma: “Nos sacaron hace cinco años y hasta ahora no tenemos vivienda, han aparecido ‘familias fantasmas’, personas que no estaban en el Jarillón pero ya tiene su casa. Estamos en proceso con abogado”, comenta.

Entre tanto, el concejal Fernando Tamayo indica que no se está haciendo el debido control a contratistas de las viviendas. “Eso hace que se revienten los procesos y comiencen los retrasos”.

Por su parte, el gerente del Fondo Adaptación, Édgar Ortiz, asegura que el plan jarillón “está completamente financiado”. Y precisa: “El total de población a atender son 4825 soluciones de vivienda, de esas hemos entregado 3050. Este año tenemos en ejecución 820 viviendas más. Nos quedarían un poco más de 800 viviendas que las estamos contratando este año”.

Además, aclara: “No está desfinanciado el plan de vivienda, los recursos están listos, lo que tiene que haber es un compromiso del Gobierno local con un lote que prometió el Alcalde -en el Pondaje donde se pueden hacer 600 viviendas-, y un aporte de 4 salarios mínimos, nosotros 70 salarios mínimos y con eso tendríamos cerrado el proyecto de vivienda; si la Alcaldía no aporta ese lote ahí sí tendríamos un proyecto desfinanciado”.

Entre tanto, el cabildante Rodrigo Rodríguez considera que se debe formular el debate para buscar más recursos, ya que “el plan inicial -en la alcaldía de Rodrigo Guerrero- comprendía 1.3 billones, de esos, pero en el camino no sé por qué le quitaron $300 millones; hoy tenemos cerca de 7 asentamientos que no fueron censados -con 300 familias- y no hay cómo reubicarlos”.

Causa preocupación que después de terminar el reforzamiento del jarillón vuelva a ser invadido por nuevos asentamientos, es por esto que el concejal Fernando Tamayo dice que “se debe generar un parque que garantice que no va a volver a ser invadido porque sino se va a perder la inversión que se ha hecho durante este tiempo”.

En esto justamente se trabaja. De acuerdo con el Gerente del Plan Jarillón, en este año se inician los diseños del Parque Lineal “que es todo lo que va a quedar encima del Jarillón una vez terminemos las obras del reforzamiento, un gran parque de 26 kilómetros para el Oriente de Cali para dignificar al río Cauca, tener un gran muelle, malecón, bulevar, que nos permite interactuar con el Cauca. Puede tener un desarrollo comercial aledaño”.

La meta es dejar 13 km de parque diseñados y ejecutados al 2023, y para ello se requieren cerca de $20.000 millones, por lo que se va a buscar financiación de varias entidades, afirma Eli Shnaider.

Tramo I: Inició obras en diciembre del 2015 y en noviembre del 2017 se finalizó.

Tramo II: 2.5 km. Inicio de obras en junio de 2017 y terminó en agosto de 2020. Inversión: $37.904 millones

Tramo III: 2.5 km. Obras empezaron en enero de 2018 y finalizaron en marzo de 2020. Inversión: $23.188 millones

Subtramos IV-1, V-1, V-2 y VI-1: Suman 2 km. Inició en febrero del 2018 y finalizó en agosto de 2020. Inversión de $20.078 millones.

Tramo IV: 3.03 km. Inicio obras en diciembre de 2018 y actualmente está en ejecución. Inversión de $45.520 millones. 61 % de avance.

Tramo V: 4.7 km. Arrancó obras en 2018 y actualmente está en ejecución. Inversión: $60.760 millones. Avance del 33%

Tramo VI: 2.5 km. Ya se adjudicó el contrato. Inversión: $64.000 millones. Obras iniciarían entre agosto y septiembre de 2020.

Tramo VII: 1.2 km. Inició obras en diciembre de 2018 y está en ejecución. Inversión de $29.156 millones. Avance del 70 %