Óscar Ortiz, presidente de Metrocali, habló de lo complejo de la operación del sistema de transporte masivo, MÍO, que aún después de doce años no alcanza un equilibrio financiero. También se refirió a la recuperación de las estaciones dañadas durante el Paro Nacional, y a los trabajos que se vienen realizando en articulación con la Administración para combatir la piratería.

Además, anunció una serie de obras de infraestructura para mejorar el servicio al usuario e incrementar el número de pasajeros este año.

¿Este lunes el pasaje del MÍO sube $200, considera oportuna esta alza cuando el sistema aún no opera al cien por ciento?

Desde julio de 2019 no se había hecho un incremento, el cual se requiere dado que el costo de la vida sube cada año, pero también el valor del acpm, los costos de mantenimiento, etc. Por eso es necesario, porque la operación del sistema tiene un costo de una tarifa técnica, que demanda un mayor valor y esfuerzo por parte del municipio que requiere un alivio para poder cumplir este cometido estatal que es el transporte.

Entendemos que nuestras estaciones no están al 100 %, por lo que ha venido pasando, la pandemia y el estallido social. Nuestras estaciones fueron vandalizadas en 90 % y esto conlleva a que debemos ir mejorando, y de cara a prestar un mejor servicio, se hace el incremento.

¿El sistema de transporte tiene salvación, luego de más de 12 años de operación sin lograr un equilibrio?

Ha sido complejo porque inicialmente estábamos en una autosostenibilidad. En el 2015 se hace un diagnóstico para pasar al tema de la sostenibilidad, y es cuando se dan cuenta que todos los sistemas de transporte en el mundo deben de tener un subsidio en cabeza del Estado.

Las proyecciones que se hicieron en el 2008 o 2007 fueron mal efectuadas, mal proyectadas, la demanda nunca llegó y la pandemia ahondó más en este asunto.

Entonces, qué habría que hacer?


Se requiere un replanteamiento de la participación de esa tarifa, de cómo se diseñó el sistema en ese momento y se requiere del compromiso de los operadores, de la Administración Municipal, de Metrocali y de los ciudadanos para entender que, requerimos un sistema de transporte público, eficiente, que preste buen servicio. Pero, sin duda, tiene que replantearse la distribución tarifaria o distribución de los costos porque no son suficientes los recursos que hoy se tienen.

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¿Cuál es la situación financiera actual de Metrocali?

Debemos identificar dos cosas, Metrocali es el ente gestor que hoy está en Ley 550 producto de un laudo que salió a favor de GIT Masivo, que no tuvo buena defensa por parte de la entidad distrital o de Metrocali.

Por eso, producto de la tarifa del 7 % y de la caída de la demanda, debe recurrir a la ayuda del municipio para su funcionamiento. Y en cuanto al sistema MÍO, pues también requiere de unos recursos que son deficitarios, de un Fondo de Estabilización y Subsidio a la Demanda, Fesde, que es insuficiente debido al alto costo de la operación del sistema.

Siendo así las cosas, ¿cuál sería el panorama para Metrocali y el MIO?

Debido a la participación que tenemos en la tarifa hay que buscar otro planteamiento, otros ingresos no operacionales. Vamos a operar de manera directa el MÍO Cable y estamos con la Unión Temporal mirando la viabilidad del contrato o su terminación de mutuo acuerdo. Respecto a la operación, la Dirección de Hacienda adelanta una consultoría con una firma mexicana, valorando los costos de la tarifa y de operación, para entrar en una renegociación y volver viable el sistema de transporte masivo de la ciudad.

El Gobierno destinó unos recursos para el sistema, a cuánto ascienden y en qué se invertirán?

Estos recursos fueron recibidos el 20 de diciembre, $49.400 millones que fueron girados a los operadores. Quiere decir que estamos al día hasta noviembre con el diferencial tarifario (recursos que aporta el municipio para compensar la pérdida en la operación) de las empresas; está pendiente diciembre que se pagará este mes.

En Unimetro son usuales las protestas, a qué se deben?

Unimetro ha venido teniendo incumplimientos con su parte laboral, con sus trabajadores, aduciendo que no se ha pagado al día el diferencial tarifario. Sin embargo, tenemos otras tres empresas que están al día con sus obligaciones laborales y contractuales con su personal. Además, hay una inconformidad con estos sindicatos en la manera como se maneja desde la gerencia y la parte administrativa esta entidad. Es responsabilidad directa de cada concesionario estar al día con sus trabajadores.

¿Cree usted que se requiere un mayor esfuerzo de la Administración distrital para combatir la piratería?

Venimos trabajando en el Plan de Acción de Metrocali apuntando a tres líneas: una, la del servicio que debe mejorar frecuencias, cobertura, rutas. Dos, la sostenibilidad financiera, tanto de Metrocali como del sistema MÍO; y tres, creemos que se requiere una reorganización del transporte público en la ciudad, que haya acompañamiento de las secretarías de Movilidad y Seguridad y Justicia para combatir la piratería y la invasión del carril exclusivo del MÍO, además de un mayor control sobre las personas que hacen daños al interior del sistema como fleteos y robos. Esto requiere una atención permanente de la Administración.

Pero, usted ve un interés de la Administración en subsanar todas estas dificultades?

Tenemos una mesa de trabajo que se reúne todos los lunes, con los operadores, Seguridad y Justicia, Hacienda Distrial, Movilidad, Bienestar Social, Fiscalía y Policía donde abordamos estos temas para buscarles solución y brindar acompañamiento al sistema de transporte.

¿Cuántos pasajeros pierden por el tema de la piratería?

Podríamos pensar que hoy el transporte pirata está moviendo cerca de 200.000 usuarios, son unos estimativos que requieren una atención mayúscula de la Administración distrital.

¿Cuándo entrarán en operación las estaciones dañadas del MÍO y cuánto costó su reparación?

No tenemos un valor exacto de lo que se ha pagado por reparación. Hicimos un presupuesto de cerca de $55.000 millones y hasta el momento la cifra gastada no supera los $20.000 millones. Esperamos un gran avance entre enero y febrero, aunque hemos tenido algunas dificultades porque los materiales están escasos.

¿Qué planes o estrategias están planteando este año para incrementar el número de pasajeros?

Incrementaremos el horario de atención hasta las 11:00 de la noche; vamos a incorporar algunas rutas con la apertura de las universidades. Desde este viernes abrimos Universidades, la próxima semana lo hará San Pascual, pero también estamos revisando rutas con la Secretaría de Movilidad y nuestro grupo en terreno, para mejorar cobertura y tiempos de espera.

La terminal Simón Bolívar ya está funcionando y en junio vamos a recibir el segundo tramo de la Troncal Oriental y este año contrataremos el tramo tres. Para julio empezará a funcionar la terminal de Aguablanca, y creemos que todas estas inversiones en infraestructura, repercutirán en un aumento de la demanda.

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Para usted, cuál es la principal problemática del sistema de transporte y cómo podría superarse en el corto o mediano plazo?

Los graves problemas que tiene el sistema de transporte masivo de Cali y en Colombia, es el tema financiero, es lo costoso de la operación, es que hoy requiere un subsidio por parte del Estado y se hace necesario llegar a una demanda que permita tener un equilibrio. Hoy movemos cerca 164.000 usuarios, pero en la medida que volvamos a la normalidad estaríamos superando los 200.000 y la idea es que al cierre de este año lleguemos a 360.000. Ojalá la pandemia y eventos adversos lo permitan.

¿Qué inversión importante hay proyectada para este año?


Tenemos inversiones importantes como la Gran Estación Central que arranca en construcción en el primer semestre y que hará parte de la renovación urbana de la ciudad. Esta obra le traerá al sistema cerca de 150.000 personas día hacia el centro y esperamos que esté lista en el 2023. La terminación de la Troncal Oriental con 120.000 pasajeros día y culminar la terminal Aguablanca.

Datos de interés

Durante el primer trimestre de 2022, serán instaladas 662 cámaras dentro de los vehículos, que estarán interconectadas con la Policía, para minimizar la percepción de inseguridad en los usuarios del sistema.

Los buses contarán, además, con una cámara frontal, conectada con Movilidad, para contrarrestar la invasión del carril exclusivo del MIO.
Se espera avanzar en la semaforización inteligente, para mejorar los desplazamientos por la Troncal.

Además. se avanzará en la interconexión con los municipios vecinos, y se instalarán paneles solares en las estacione