En Cali, en el 2020, 15.474 niños, niñas y jóvenes entre 5 y 17 años (de las 476.158 personas en este rango de edad registradas en el Dane) estaban siendo utilizados con fines económicos, es decir, eran trabajadores infantiles. De estos, el 32,6 % eran niños entre 5 y 14 años y el 67,4 % jóvenes entre los 15 y 17 años.

Estas cifras reveladas en un informe de Cali cómo Vamos, que analiza la problemática de trabajo infantil, son las más bajas en los últimos nueve años en la ciudad y su área metropolitana -que comprende Cali y Yumbo-.

De acuerdo con Marvin Mendoza, coordinador de Cali cómo Vamos, los 15.474 de niños, niñas y jóvenes que estaban en trabajo infantil durante el 2020 “representan una tasa de trabajo infantil de 3,2 %, cifra que es inferior a lo que se registró en el año 2019 cuando alcanzó 4,3 %”.

En otras palabras, el año pasado se presentó un disminución de 1,4 puntos porcentuales, comparado con el 2019. Dicho porcentaje representa 7.185 niños (as) menos en trabajo infantil. Y una de las principales razones de la reducción en estos índices se debe a la pandemia por covid.

Sin embargo, a pesar de esta disminución en la tasa de trabajo infantil, la cifra de Cali fue la más alta comparada con otras ciudades capitales como Manizales (0,6%), Bogotá (1,5%), Barranquilla (1,9%), Bucaramanga (2,0%) y Medellín (2,9%).

En el informe también se resalta que el año pasado, 421.686 de los niños (as), es decir, el 88,6% se dedicaron la mayor parte del tiempo a estudiar, cifra inferior a la registrada en Medellín y Bogotá, que reportaron un indicador de 90,4% y 89,6% respectivamente.

En este sentido, el equipo de Cali cómo Vamos destaca que “la tarea principal de esta población es estudiar y realizar actividades que promuevan su adecuado desarrollo”, ya que esto también es un requisito para mejorar sus condiciones de calidad de vida.

Al respecto, Angélica Cuenca, secretaria Ejecutiva de la Alianza Por la Niñez, asevera que “el trabajo infantil es una afectación clara para que los niños permanezcan en el sistema educativo. El niño que está trabajando, tiene unos compromisos laborales que no están acorde a sus edades y eso los alejan del sistema educativo que es el ambiente donde todos niños (as) adolecentes deberían estar”.

Es por esto que Mabel Rojas, psicóloga clínica, comenta que el trabajo infantil vulnera totalmente los derechos de todo niño, y “eso se ve reflejado en una sociedad con jóvenes y adultos que vienen de una infancia donde al no poder acceder a la educación no logran organizar su proyecto de vida desde esa época. Cuando un niño accede fácilmente a sus derechos para asistir a un escuela, a ser educado, esto les permite construir un proyecto más claro, y de alguna forma influye en que la sociedad tuviera menos pobreza y posibilidad de jóvenes adultos incursionen en delitos, grupos al margen de la ley porque la educación mejora la vida de un niño y la sociedad”.

Por otro lado, el informe que analiza la problemática de trabajo infantil en Cali da a conocer que la tasa de trabajo infantil fue superior en hombres (4,7%) que en mujeres (1,7%). De hecho, la tasa de los hombres fue la más alta entre las ciudades analizadas, la de las mujeres fue la segunda más alta superada por Medellín (2,3%).

Tiempo que laboran y tipo de trabajo

De acuerdo con el informe, los trabajadores infantiles dedicaron 27,8 horas a trabajar por semana, lo que equivale a 5,6 horas por día (teniendo en cuenta días laborales de lunes a viernes). Comparado con otras ciudades, a Cali solo la superan Barranquilla (con 30,9 horas por semana) y Medellín (29,1 horas por semana).

En cuanto a las labores en las que se han desempeñado los menores, el 42,% de los niños (as) eran obreros o empleados de una empresa particular (6.549 personas); el 29,4%, es decir, 4550 estaban en trabajos familiares sin remuneración, y el 20 %, que equivale a 3193 menores de edad, trabajaban por su propia cuenta. Asimismo, el 1,9%, es decir, 297 eran empleados domésticos. Cabe resaltar que en 2019 ni un solo niño se registró en esta labor específica.

Entretanto, el coordinador de Cali cómo Vamos, Marvin Mendoza, detalla que “los niños que trabajaron en sus hogares por más de 15 horas a la semana, donde no obtuvieron remuneración -lo que constituye trabajo de infantil ampliado-, vemos que para el 2020 se registró una tasa de 7 % de trabajo infantil ampliado en Cali, cifra un poco inferior al 7,3% que se registró en el 2019”.

Algunas de las razones por las cuales la población infantil manifiesta desempeñar labores en el hogar es porque deben aprender a hacerlas o porque sus padres tienen que trabajar.

Estrategias

En busca de reducir los índices de trabajo infantil en la ciudad, la secretaria de Bienestar Social, María Fernanda Penilla, comenta que se están trabajando varias estrategias las cuales están orientadas a la prevención de la alta permanencia en calle de niños (as) y adolescentes y el trabajo infantil.

Entre ellas, dice Penilla, está la realización de jornadas y talleres de prevención “en los cuales se fortalecen capacidades y destrezas de los niños (as) y adolescentes, sus familias, líderes, generando alertas frente al trabajo infantil, identificando la problemática”.

Asimismo, indica que este año se construyó el plan de acción para definir principalmente las estrategias territoriales “en articulación con organismos competentes para identificar riesgos o zonas de mayor impacto, así como los procesos para la atención efectiva, siendo este el principal reto el trabajo infantil”.