Los arrullos en la costa Pacífica son celebraciones que mezclan la tradición católica con los ritos africanos, debido a la migración de estos últimos a Suramérica. Cada 5 de enero, en la comunidad, durante toda una noche, se corea, se baila, se alza y se arrulla al Niño Jesús en víspera del Día de Reyes, para festejar la vida.
Y así, en La Casa Grande, al son del arrullo —temática de la noche—, se dio ayer apertura a la versión 27 del Festival de Música del Pacífico Petronio Álvarez, como un escenario que busca exorcizar los males del bello puerto del mar, azotado por la violencia y la indiferencia del estado.
La Unidad Deportiva Alberto Galindo (sede desde el 2016), abrió sus puertas desde temprano, para acoger a los invitados a la apertura de esta gran fiesta pacífica. La Banda Departamental llevó la batuta, acompañando a La Jagua (ganadores del Petronio, en 2022, en la modalidad libre), en un popurrí de temas emblemáticos del Pacífico, como San Antonio, Suave mi Canoa, Kilele.
Al escenario llegaron luego 26 niños y jóvenes de los 6 a los 15 años de barrios de Cali y de lugares del Pacífico, que integran Huellas Petronito, semillero musical de la Secretaría de Cultura, dirigido por Pascual Caicedo.
Las danzas del Instituto Popular de Cultura ‘la tumbaron’ con un recorrido por el paisaje musical del Pacífico, con porros, jugas, bundes, currulaos, entre otros, llenando de color y ritmo la noche.
No podían faltar Sonar del Río, Cantaoras del Patía, Mar Afuera, Generación Pacífica, Pichindé, Legado Pacífico, Canalón de Timbiquí y Marimba y Son, al ritmo de las cuales se levantaron pañuelos y movieron turbantes y caderas, mientras el viche, bebida ancestral, pasaba de mano en mano.
Y la fiesta continuará el jueves 17 y mañana 18 de agosto. Desde las 6:00 p.m., desfilarán por el escenario los participantes, provenientes de muchos rincones del Pacífico, que alzarán su voz, al ritmo de marimbas, tambores, cununos, guasás y violines.
Ambos días habrá noche de tambores y lunada en la Casa Grande, con Mano e’ Currulao, del IPC, y el concurso musical en las modalidades: libre, violín caucano y marimba y cantos tradicionales, y chirimía. Habrá invitados internacionales imperdibles. Este jueves 17 de agosto, la Big Band Quinta Corchea, y mañana, el Grupo Bahía.
El sábado 19 de agosto será el Desfile de Colonias y el gran concierto con la participación de Son Bacosó, Herencia de los Ríos, Proyecto Uramba, La Jagua Ensamble, Hot8 Brass Band (New Orleans, EE.UU.), Ganbé Brass Band (Benín, África) y Rancho Aparte (Chocó).
El domingo 20 de agosto habrá final del concurso; cerrarán el IPC, Ensamble Urbano y Voces y Rostros Pacífico Ensamble, y pasadas las 11:00 p.m., el Grupo Niche rematará la fiesta con su repertorio pacífico.
Prográmese
Durante los días del Festival tendrán lugar tres atractivos que enriquecen las costumbres folclóricas, diseñados como plataformas de reconocimiento, integración y expansión de las manifestaciones culturales del Pacífico en su edición 27, como son los stands de cocinas tradicionales, bebidas autóctonas y estética de esta región.
Este año, 44 agrupaciones musicales originarias de distintos territorios del Pacífico competirán por el ‘Bombo golpeador’ en modalidades como marimba y cantos tradicionales, chirimía, violines caucanos y versión libre.
Reconocidos cantantes como Canalón de Timbiquí, dirigido por la maestra Nidia Góngora, y el Grupo Bahía, liderado por el maestro Hugo Candelario González, estarán presentes, junto a Sonar del Río, Mar Afuera, Generación Pacífica y las Cantaoras de El Patía.
Gastronomía
El País se adentró en este evento y encontró varios recomendados que usted podrá disfrutar solo o en compañía. Como ya es habitual, el Petronio cuenta con un espacio donde la gastronomía es la protagonista. Allí, los visitantes podrán disfrutar toda clase de platos deliciosos y llenos de folclor.
“Se pueden encontrar con todo tipo de encocados, cazuelas de mariscos. Nosotros siempre les recomendamos probar un de todito, es decir, un plato que contiene varias delicias. Con eso, prueban un poquito de cada cosa y terminan llenitos”, contó una de las emprendedoras que está ofreciendo sus platos allí.
También recuerde que además de los platos fuertes, puede probar delicias como las carimañolas y los aborrajados que vienen con pescado.
En cuanto a los precios, también hay para los diversos gustos. Por ejemplo, el famoso de todito tiene un costo de 35 mil pesos, pero además de él se pueden probas diferentes tipos de pescados y hasta langosta, con precios que podrían superar los 70 mil pesos.
Por supuesto, en el Petronio no pueden faltar los dulces. Y es que después de una buena comilona es momento de probar un postrecito. En ese sentido, lo que no los visitantes no pueden dejar de probar es la famosa cocada, aunque también pueden probar algunas delicias exóticas como los helados de chontaduro y aguacate.