Esta semana se dio a conocer la noticia que Leopoldo Goût, uno de los arquitectos más reconocidos en Latinoamérica había fallecido a los 94 años de edad, en su natal México.
Entre sus obras arquitectónicas figuraron el diseño de Cine Diana, ubicado en el Paseo de la Reforma, en la Colonia Cuauhtémoc de Ciudad de México, donde incluso llegó a ubicarse el afamado Mural de Hierro de Manuel Felguérez.
Un prodigioso creativo, quien en vida unió su talento estructural con aquellos que plasmaban arte, uno de ellos, el gran maestro Omar Rayo.
Fue Leopoldo Goût quien se encargó del diseño del lugar, elaborado por el arquitecto del famoso Museo Rayo, en el año 1972, inspirado en la arquitectura Maya. De aquel trabajo, que hoy sigue conquistando a propios y visitantes, y los amantes del arte y la arquitectura, quedó una amistad que sigue intacta, la del maestro Leopoldo con Águeda Pizarro y su difunto esposo, Omar Rayo.
“Leopoldo fue el creador de una de las joyas arquitectónicas del Valle del Cauca, de Colombia y de las Américas, el Museo Rayo, insignia del dibujo y grabado latinoamericano”, destaca Águeda, advirtiendo que el conjunto de ocho módulos octagonales fue inspirado no solo en la arquitectura maya, sino en el arte de su amigo, su cuate, su compañero de juventud, Omar Rayo.
Para ella, su genio creativo se manifestó varias veces en el diseño de edificios que, a su vez, expresaban las obras de arte de sus amigos. “Y por eso, precisamente, en este momento tenemos una exposición de obras de Rayo en los 70 y mostramos el vínculo entre estas y el diseño de los ocho módulos octogonales del Museo. Fue una hermosa colaboración que todavía causa asombro en los visitantes, pues Leopoldo Gout creó en Roldanillo un espacio sagrado incomparable. Aquí brilla la imaginación de dos amigos que tejieron una constelación donde habita el arco iris y sus dragones”, cuenta Águeda, directora actual del Museo Rayo.
La poeta, gestora cultural y escritora que hoy ejerce como directora de este gran Museo, lamentó la muerte de su gran amigo: “Polo querido, no has muerto porque vives aquí para siempre. Mientras viva yo recordaré tu humor, tus guajiridengues, tu acento al contar los chistes más absurdos, que me decías Aguedulce y mimabas a Sarita. Eres México en Colombia y en nuestro recuerdo. Aquí te recibimos en tu casa de ochos”.
En datos
Su nombre completo era Leopoldo Goût Ortiz de Montellano, y solo se sabía su nacionalidad y no el lugar exacto de nacimiento. Uno de sus tantos proyectos fue el diseño del Cine Diana en Paseo de la Reforma, en México, en años los 60, cuando abrió sus puertas al público.
Lo que más llamó la atención en ese momento de su trabajo arquitectónico fue la celosía que se usó, misma que le dio un sello particular a la Glorieta de la Diana, en el país azteca.
En general, su creatividad se manifestó varias veces en el diseño de edificios que evidencian aún las obras de arte de cada uno de sus amigos.