Tres cafés que son un verdadero 'refugio' en Cali

“Dios tiene planes contigo”. Eso dicen las letras que coronan la espuma del capuchino. Y tal vez ese plan es invitarle a un rinconcito de cielo para reparar sus fuerzas o hacerle descansar después de un día largo y agitado en Cali.

En esta “cita” celestial el menú no podría tener platillos más apropiados: ‘Gracia Divina’ es el nombre que se le da a un quiche de jamón serrano crocante, con espárragos y lonjas de queso parmesano. ‘La gloria de Dios’, como su nombre lo indica, solo podría tratarse de quiche Lorraine con bendita tocineta y variedad de quesos.

Si se siente capaz de cruzar el ‘Mar rojo’, podrá probar la crema de tomates con trozos de tocineta, acompañada de ciabatta de ajo y un aceite de oliva como el de los tiempos bíblicos.

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Montaditos, ensaladas, sándwiches, gratinados, tortas, postres y cinco pandebonitos recién horneados con el corazón bondadosamente palpitante de queso que han bautizado ‘Los cinco talentos’.

Estos son algunos de los secretos de Rincón del Cielo, un café con aroma espiritual que abrió sus puertas recientemente en el norte de Cali, más exactamente en la Calle 13 #9-63, barrio Granada, muy cerca del Centro Colombo Americano, en una casa de fachada azul que, como la entrada al cielo, queda en una calle empinada.

Las creadoras de Rincón del Cielo son tres mujeres de armas (espirituales) tomar. Claudia Rodríguez aclara: “Somos administradoras porque el dueño es Dios”, y cuenta que la idea vino a su mente tras 20 años de trabajar en una importante multinacional con sede en Cali, donde se fue gestando su deseo de crear un espacio para el encuentro, la paz y el deleite.

Al momento de su retiro de la multinacional, la secundó en su idea de emprendimiento su hermana Rosita Rodríguez. Se unieron a Carolina Iragorri, ingeniera industrial y experta en finanzas, a quien conocieron en el marco de los retiros de Emaús y en su trabajo social con la parroquia de Santa Teresita.

Hasta oratorio tiene este café, que además cuenta con librería espiritual y donde se darán talleres de elaboración de camándulas y rosarios, así como charlas de líderes espirituales que compartirán allí su experiencia. Pero no solo de café, espresso, capuchino, mocca, macchiato y latte vive el hombre. Pruebe los cocteles, tómese una cerveza, y respire la paz de esta Sucursal del cielo.

En todas las mesas de Rincón del Cielo hay tomas para conectarse, e Internet con wifi gratis en todos los espacios.

Música espiritual de fondo y talleres de pintura en oración. @rincondelcielo.cali

Quien lo desee puede hacer uso del oratorio para retirarse un momento a orar, y luego reunirse a compartir una cena relajada o un café con pandebonos o pastel.

Horario: lunes a jueves 2:00 p.m. a 9:00 p.m. y viernes y sábados de 2:00 p.m. a 10:00 p.m.

Una casa preciosa en San Antonio, donde conviven reliquias asiáticas y americanas llenas de historia, y que además es un templo rodeado de bibliotecas, libros, máquinas de escribir y sofás de lectura. Eso es, para empezar, Casa Alebrije.

Pero solo para empezar, porque luego la carta revela delicias del café, cocteles, licores y un restaurante con opciones livianas y pensadas para compartir y probar mucho más que solo un plato.

Casa Alebrije fue pensada también para albergar encuentros literarios, charlas con escritores, y su bellísima biblioteca hace sentir a los amantes de las letras como en casa. O mejor que en casa, por cuenta de sus mullidos sofás y sus luces llenas de lo que los daneses llamarían “hygge”, que no es otra cosa que lugares con magia para reunirse a charlar de la manera más cálida y acogedora posible.

En modo romántico resulta ideal, pero en general los amantes del diseño encontrarán en su estilo de anticuario un deleite para los sentidos. Casa Alebrije Café Libro está en la Carrera 10 con Calle 3 esquina, barrio San Antonio. 3451179. Instagram: @casa.alebrije.

Muy difícil encontrar una buena barra de cocteles y tragos que además ofrezca cafés hasta la media noche. A veces uno peca por fanático cafetero y es mirado con resistencia cuando pide un café en el bar y le recuerdan: solo licores. La barra de Elsa es distinto, en este sentido.

El barman advierte que a partir de las 4:00 p.m. y hasta entrada la noche no solo es posible pedir una margarita con jalapeño o una ginebra con rosas sino también un buen café colombiano.

Probamos, por ejemplo, el Noche Milano, que tiene amareto al fondo de un vaso, crema láctea y helado en la superficie, para finalizar con un buen café que se mezcla con los demás ingredientes para crear una experiencia equilibrada, con el toque justo de suavidad, dulzor, acidez y personalidad. Pero hay otras variedades de café, para todos los gustos.

La barra de Elsa queda en el barrio Granada, detrás del parqueadero de Storia D’Amore y en una terraza rodeada de árboles desde donde se recibe la brisa caleña de las tardes y se ve anochecer con ganas de otro café, uno que ojalá nos quite el sueño y nos recuerde que la noche es joven.

Avenida 9A #14N-73, piso 2, barrio Granada, 3016986312. Instagram: @labarradeelsa