Jorge Vilda, seleccionador español, es destituido de su cargo por orden directa de Pedro Rocha, presidente interino de la RFEF. Vilda, quien ocupó el cargo de entrenador del combinado español, dejará inmediatamente su cargo en medio de la polémica que involucró a Luis Rubiales y su beso a la jugadora Jenni Hermoso.
Vilda era uno de los hombres fuertes y de confianza por parte de Luis Rubiales, pero sin duda tenía amplias distancias con el plantel femenino, hasta el punto de que se viera implicado en episodios impresentables junto a las futbolistas ibéricas.
A raíz de que Rubiales fuese destituido de su cargo, Rocha asumió las riendas de la polémica RFEF en medio de tantos señalamientos. Esta decisión fue tomada con el Consejo de los Presidentes de las Territoriales. Todo este inconformismo por las palabras de Rubiales y su apoyo inminente a Vilda, además de la renuncia de las jugadoras, llevaron a que la destitución tuviera lugar.
En efecto, según la prensa local, a Vilda ya le comunicaron la noticia en la sede de la RFEF, con Pedro Rocha en la reunión. No le perdonaron su participación activa en el caso de Rubiales, ni el hecho de presiones a Jenni Hermoso para que apareciera en el metraje del expresidente, quien le expresaría sus disculpas a la jugadora.
Vilda había llegado hace ocho años a la Selección de España, esto después de ligarse directamente a las selecciones menores. Por ejemplo, en 2010, había sido seleccionador femenino sub-17 y, cuatro años después, lideró el plantel de la sub-19.
Todo este éxito orbital se empañó con la actuación de Rubiales y Vilda, quien incluso ha sido objeto de protestas y reproches por parte de las jugadoras. Lo peor es que el expresidente de la RFEF le ofreció la renovación al timonel en medio de la opinión pública.
“He activado los mecanismos para que te quedes con nosotros cuatro años más cobrando 500.000 euros al año. Te lo mereces”, manifestó Rubiales en su momento ante la Asamblea General hace casi dos semanas.
Casi que de manera inmediata, la ‘Roja’ tendrá que definir inmediatamente a quien ocupe el cargo de entrenador/a, puesto que se avecina la Liga de las Naciones y esto será fundamental para ya pensar en los Juegos Olímpicos de París en 2024. Su debut será el 22 de septiembre ante Suecia, en condición de visitante.
La Federación pidió perdón por el comportamiento de Rubiales
Minutos antes de que se conociera la decisión de la RFEF, la misma federación emitió un concepto en pos de ofrecer disculpas por la conducta de Rubiales y su protagonismo infortunado en medio de tanto escándalo.
“La RFEF quiere transmitir al conjunto de la sociedad y al conjunto del fútbol mundial su máximo pesar por lo sucedido que ha empañado a nuestra selección, a nuestro fútbol y a nuestra sociedad. Nos sentimos profundamente apenados por el daño causado y por ello, desde esta RFEF debemos pedir las más sinceras disculpas y adquirir un compromiso firme y absoluto de que hechos como estos no puedan volver a suceder nunca más”, indicó el comunicado.
“Desde la RFEF se está facilitando todo el soporte documental y administrativo que se requiere desde ambos órganos disciplinarios para poder disponer de una resolución de manera definitiva lo antes posible que permita resarcir el daño causado”, se complementó en la carta oficial de Rocha.
“La actuación del señor Rubiales no representa los valores que defiende la RFEF, ni los valores del conjunto de la sociedad española y su actuación debe achacarse única y exclusivamente a él, puesto que es el único responsable de sus actuaciones ante la sociedad, ante los órganos deportivos y, si es el caso, ante la justicia”, fueron las palabras acerca de Luis Rubiales y su conducta “inaceptable en todo sentido”.